Elecciones generales

Sánchez buscará salir indemne antes que ganar

Al igual que Rajoy en Madrid, Sánchez se fotografía con asistentes al mitin del PSOE celebró ayer en Valencia
Al igual que Rajoy en Madrid, Sánchez se fotografía con asistentes al mitin del PSOE celebró ayer en Valencialarazon

No cometer errores. Esta es la máxima con la que Pedro Sánchez acude hoy al cara a cara con Mariano Rajoy. El equipo del candidato socialista es consciente de lo arriesgado de un debate de estas características, en el que es más importante salir indemne, que vencedor. «Hay mucho en juego, tenemos más que perder, que ganar», destacan. Los socialistas intentarán no dejar frentes abiertos que minen su discurso en la recta final de la campaña, esto es, que el postdebate les permita reafirmar su actuación y no ponerla en evidencia como sí ocurrió tras el de Atresmedia. En todo caso, en Ferraz fían a la intervención de Sánchez sus posibilidades de remontada en la última semana y le otorgan la entidad propia de una actuación en la que podrán confrontar proyectos y postularse como una verdadera alternativa de gobierno. Un discurso, éste, que en el debate a cuatro quedó excesivamente difuso y que ahora tienen la oportunidad de apuntalar.

La prudencia de la que hacen gala desde la dirección federal, aseguran, no implica que Sánchez vaya a adoptar un rol «conservador» en el cara a cara, sino que –sin asumir demasiados riesgos– expondrá claramente el discurso socialista. Éste se incardinará en tres ejes fundamentales: corrupción, paro y desigualdad, a través de los cuales el líder socialista resumirá los cuatro años de Mariano Rajoy al frente del Ejecutivo. Sánchez espera encontrarse con un presidente del Gobierno «muy bronco y correoso» en el discurso, pero evitará «bajar a ese barro» y mantendrá un perfil educado aunque incisivo. «No habrá sorpresas pero sí un tono distinto», apuntan desde su entorno, donde reconocen que explotarán al máximo el bloque dedicado a la corrupción. El tema que el equipo de Sánchez ha querido dejar al margen del discurso es el del terrorismo, pues entienden que con un asunto «tan serio y delicado» no se debe hacer campaña.

Así como dominan sus puntos fuertes, en Ferraz también tienen claras sus debilidades, es decir, las bazas que explotará Rajoy en su intervención contra el líder socialista. Los asesores de Sánchez, en una conversación informal con periodistas, asumieron que el presidente del Gobierno sacará pecho por la recuperación económica, por su capacidad de mantener el tipo en momentos de dificultad y echará en cara al PSOE la necesidad de apoyarse en otros para llegar al poder, lo que se traducirá en una crítica abierta a los pactos con Podemos tras el 24-M, con los que hurtaron a la lista más votada la legitimidad de gobernar aquellos territorios en los que ganaron las elecciones.

Pero en el PSOE no tendrán solamente la mirada puesta en el cara a cara con Rajoy, sino que también les preocupa la gestión que se pueda hacer de este duelo por los partidos emergentes. La intervención del líder de Ciudadanos, Albert Rivera, y el de Podemos, Pablo Iglesias, en el análisis previo y posterior que emitirá la Sexta no ha sentado nada bien a la dirección federal, pues consideran que quienes han sido excluidos de la cita realizarán un debate paralelo, en el que las críticas a Sánchez quedarán sin posibilidad de réplica.