Campaña electoral

¿Dónde está la niña de Pablo?

Podemos pide el voto con una carta firmada por Esperanza, una emigrada cuya existencia se ha puesto en duda después de que el partido no facilitase su identidad

¿Dónde está la niña de Pablo?
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Podemos pide el voto con una carta firmada por Esperanza, una emigrada cuya existencia se ha puesto en duda después de que el partido no facilitase su identidad

Ni Pablo Iglesias ni Alberto Garzón firman la carta que estos días está llegando a los buzones buscando el voto para Unidos Podemos. Por supuesto, no es ni «la niña de Rajoy» ni tampoco la ubicua Juana de Pedro Sánchez, aunque la misiva les recordará a aquella joven que el hoy presidente en funciones mencionó en su debate con Zapatero antes de las elecciones de 2008 o a esa mujer –cordobesa, alicantina o canaria, limpiadora en un hotel o en un colegio, según la ocasión–, cuya historia usó el líder socialista en sus mítines de 2014 y 2015. La chica que ahora pide el voto para los morados se llama Esperanza y quiere convencer a sus padres y, por extensión al resto de votantes, de las bondades de Unidos Podemos.

Se trata de una joven de 30 años, investigadora experta en biología molecular emigrada en Londres, que dirige la misiva a sus padres, tradicionales votantes socialistas, a los que explica que va a votar a Unidos Podemos porque ellos le enseñaron que «cuando se renuncia a los principios se renuncia a lo más importante que se tiene».

Como en los episodios de «la niña de Rajoy» o la Juana de Sánchez, la pregunta es si Esperanza es un personaje real o una invención. Fuentes de Podemos explicaron a este diario que la joven existe, pero que no se trata de Esperanza Jubera –candidata del partido morado en las elecciones europeas de 2014–, como apuntó algún medio, ni tampoco de una identidad inventada, como aseguraban otras informaciones.

El partido de Pablo Iglesias ilustra el texto con sendos dibujos del Puente de Londres y el Parlamento británico y anuncia en grandes letras moradas que no se trata de «otra carta más para pedir el voto». El texto arranca así: «Londres. Junio de 2016. Me llamo Esperanza y no me presento a las elecciones. Ésta es una carta a mis padres», dice la misiva, que incluye referencias a la generación del programa infantil «Barrio Sésamo» y a la de sus padres, o incluso abuelos, ésos que emigraron del pueblo a la ciudad, lograron «recuperar la democracia» y apoyaron a Felipe González en 1982.

Esperanza explica el sufrimiento que implica emigrar para los integrantes de «la generación más preparada de historia de España», obligados a salir del país y a alejarse de su gente para poder dedicarse a aquello que estudiaron, y asegura que confía en que su anhelada vuelta «puede empezar el 26-J». Con una redacción cargada de emotividad, la autora subraya que el motivo de la carta es «dar la gracias» a sus progenitores. Es significativa la referencia a la «ola de cambio» que vivieron sus padres con la llegada al poder del PSOE, al que Unidos Podemos pretenden desbancar ahora como partido hegemónico de la izquierda y enarbolando precisamente la bandera del «cambio».