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Análisis de las elecciones en Galicia: “Estamos ante un fracaso sin paliativos de la coalición de Gobierno”

Varios politólogos analizan para LA RAZÓN el resultado en la comunidad gallega

El candidato Popular a la Xunta, Alfonso Rueda, celebra la victoria durante el seguimiento de la jornada electoral de los comicios autonómicos de Galicia, en el hotel Eurostars de San Lázaro, a 18 de febrero de 2024, en Santiago de Compostela, A Coruña, Galicia (España). Todos los gallegos han sido llamados a las urnas hoy, 18 de febrero, para elegir a su nuevo presidente autonómico para los próximos cuatro años. Hay 75 escaños en juego, por lo que los candidatos de los diferentes partidos de...
Elecciones en Galicia 18F 2024. Seguimiento de resultados del PP en SantiagoÁlvaro BallesterosEuropa Press

Sin sorpresas en Galicia. El PP ha logrado su quinta mayoría consecutiva, y aunque empeora levemente su resultado -pierde dos escaños- con respecto a la anterior convocatoria electoral , se puede hablar de un éxito.

Javier Martín Merchán, politólogo y profesor de la Universidad Pontificia Comillas

“La participación y la victoria del PP lo que demuestra es que un aumento no siempre conlleva un resultado más favorable para la izquierda. De hecho, ya vimos en 2009 cuando el propio PP recuperó la Xunta porque ese incremento provocó un cambio a favor del PP. En este caso, vuelve a suponer una consolidación de la mayoría absoluta del PP. Por lo tanto, no podemos establecer esa regla de tres de que los aumentos de participación siempre favorecen a la izquierda.

Por otro lado, estamos ante un éxito rotundo del PP, que mantiene la mayoría absoluta de manera holgada en unas circunstancias nada favorables, ya que llegaba con una transición de líder, que no tenía el mismo carisma que Feijóo. En este ecosistema, haber mantenido la mayoría absoluta es todo un éxito, sin duda. Es verdad que percibimos una disminución de escaños, pero es lógica y sobre todos después de 15 años de desgaste en la Xunta

Respecto al resto de resultados, es verdad que tenemos la inclusión de Democracia Ourensana pero lo que llama la atención es que ni Sumar ni Podemos entran. Es decir, desaparece todo el espacio no nacionalista a la izquierda del PSdG, ya que el BNG galvaniza todo lo que está a la izquierda del PSOE y no deja espacio a otras fuerzas políticas.

El gran titular es que tenemos a un Partido Socialista con menos de un 15% en una comunidad autónoma. Es un boquete enorme, un nuevo suelo del Partido Socialista de Galicia, que venía del peor resultado y ahora consolida otro nuevo peor resultado de su historia. Entre las razones, yo diría que hay una conjunción de dinámicas que tiene que ver con la fuerza de Pontón. Otra tiene que ver con la propia dinámica de la vida interna de los partidos ya que el BNG lleva diez años consolidando la figura de su candidata mientras que en estos diez años el PSdG ha ido cambiado elección tras elecciones su candidato, que implica crisis internas y desmovilización. Y por último, están las propias transferencias de voto dentro del bloque de la izquierda y cómo ha afectado la participación del voto socialista.”

Manuel Mostaza, Director de Asuntos Públicos de Atrevia,

“Estamos ante un fracaso sin paliativos de la coalición de Gobierno, que con la presencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y de Yolanda Díaz, habían convertido las elecciones en una especie de plebiscito sobre Feijóo. El PSOE obtiene su peor resultado en Galicia. Sumar es absolutamente irrelevante, de hecho en la provincia de Orense no llega ni a los mil votos.

Por otro lado, se consolida el cambio en el Partido Popular de Galicia. Llega Alfonso Rueda y el PP va a seguir gobernando cuatro años. También es interesante la entrada de Jácome de Democracia Ourensana en el parlamento. También está la idea del voto dual, es decir, como el PSOE parece que empieza a compartir con los partidos de la izquierda independentista una parte del electorado. Se trata de una parte del electorado de la izquierda independentista que en las generales vota al PSOE porque lo ve más útil para frenar a la derecha española y en las autonómicas, al revés, hay una parte del votante del PSOE que considera que la opción de cambio es la izquierda independentista”.

Veronica Fumanal, Presidenta de la Asociación de Comunicación Política (ACOP)

Estas elecciones se convocaron de forma adelantada para que el PP y, sobre todo Feijoo, tuvieran una victoria que, de alguna forma, reforzara el liderazgo de Feijóo, y estos resultados así lo avalan porque se consolida la mayoría absoluta.

A partir de ahí, la fragmentación de la izquierda ha sido letal. En especial, el PSdG y Sumar llegaron tardísimo a las elecciones. Podemos y Sumar llegaron a un acuerdo que las bases rechazaron, por los tanto, vemos que en las elecciones hace falta tener un proyecto creíble y a largo plazo, que haya pisado el territorio y que sea identificable.

Creo que el BNG ha hecho una magnífica campaña y que Ana Pontón ha sabido trabajar a nivel estratégico un proyecto creíble que se centra en su figura para concentrar el voto útil del cambio. Su trabajo ha tenido resultado. Por otro lado, las prisas y esos candidatos precipitados han sido tremendamente rechazados.

Por último, el diputado de Democracia Ourensana da una última lección: menos votos concentrados en una circunscripción son mucho más poderosos que más votos dispersados. Ha sabido explotar ese agravio comparativo con otras provincias y ha explotado algunas técnicas de comunicación política populista, que ha tenido su premio”.

Pedro Marfil, miembro de la Asociación de Comunicación Política (ACOP)

Sabíamos que el PP iba a ganar las elecciones, pero estaba en el aire si lo hacía o no con mayoría absoluta. Normalmente hablamos de que cuando la participación aumenta suelen ser elecciones de cambio, sin embargo, en Galicia no ha ocurrido así. Lo que ha ocurrido es que ha aumentado la participación pero vemos que hay continuidad.

Esto se explica por el contexto. Tenemos un gobierno local que se diferencia al nacional y hemos visto una campaña que, como casi siempre en España, se ha desarrollado en una clave muy nacional. En ese contexto, el desgaste del Gobierno ha pesado más que otros factores de los que se han ido hablando.

Es decir, el desgaste de la marca PSOE es muy fuerte y ha caído a tercera fuerza mientras que el PP se mantiene, en parte, a la idea de reforzar esa idea de desencanto con determinadas cuestiones a nivel nacional.