Feijóo es el líder mejor valorado, mientras Díaz sigue perdiendo apoyo

A menos de una semana para las elecciones generales, los líderes nacionales son conscientes de que su perfil y cómo son percibidos por la ciudadanía supone un componente importante de cara al apoyo final en las urnas. Esta imagen se mima al detalle, desde un Alberto Núñez Feijóo que arrancó la campaña reivindicando sus raíces y su origen rural, hasta un Pedro Sánchez al que sus asesores se afanan en humanizar.

El empuje o el desgaste de las figuras nacionales funcionará como lastre o catalizador de las expectativas electorales de sus propias formaciones políticas. Una cuestión de piel. La última encuesta de NC Report para LA RAZÓN antes del 23J calibra el estado de forma de los principales candidatos a las generales, de los cuales, solo Pedro Sánchez y Santiago Abascal repiten, mientras que Alberto Núñez Feijóo y Yolanda Díaz irrumpen en escena como cabeza de cartel.

Un pulso entre los grandes partidos que queda limitado también al bipartidismo. El líder del PP es el mejor valorado, con un 4,5 sobre 10, seguido del presidente del Gobierno que, con un 4,2, ha sido capaz de estabilizar su ventaja sobre la vicepresidenta segunda, que llegó a situarse por delante antes del 28M. Díaz ha ido perdiendo apoyo paulatinamente en las últimas semanas hasta situarse tercera con un 4. A la cola, a seis décimas de distancia, se sitúa el líder de Vox.

En el Ejecutivo son plenamente conscientes de la crisis reputacional que arrastra la figura de Sánchez y que, junto a los pactos con EH Bildu y ERC, suponen el principal reto al que se enfrentan en lo relativo a la percepción ciudadana del candidato socialista. Los intentos por humanizar al presidente o por ofrecer una imagen más empática –el último en esta campaña, con su participación en el podcast «La Pija y la Quinqui»– han dado paso a un mayor pragmatismo, consistente en unir su figura a la de su vicepresidenta segunda.

El propio candidato socialista recurrió ayer en un mitin en Barcelona a recuperar el «tándem» electoral Sánchez-Díaz como una opción de referencia frente a la dupla Feijóo-Abascal. Una entente que, al incluir a la ministra de Trabajo, puede diluir las reticencias que despierta la figura del presidente del Gobierno, ya que ve mermadas sus opciones electorales si el pulso se reduce a la confrontación directa contra Feijóo.

Una fórmula que en Moncloa creen imbatible, sobre todo para erosionar el perfil moderado con el que el líder del PP aterrizó en la escena nacional, ahora que los pactos con la formación de Abascal, tras el 28M, han pasado de ser una expectativa a una realidad. La estrategia del Gobierno pasa por asimilar al PP con Vox –«son lo mismo», aseguran– y en dar cierto oxígeno político a Díaz, que compareció el pasado martes en Moncloa tras el Consejo de Ministros, para presentarla como una vicepresidenta con continuidad en un futuro Gabinete. «Yo gobernaré con Yolanda Díaz, habrá un Gobierno de coalición», confirmó ayer Sánchez.

Por edades, Feijóo logra su mejor valoración (4,7) en el segmento de mayores de 65 años y también es el líder más valorado en todos los tramos de edad, con un empate (4,3) con Yolanda Díaz entre los más jóvenes, entre los 18 y los 29 años. Sánchez mantiene un 4,2 lineal en todas las horquillas generacionales, que despunta hasta el 4,4 su mejor dato entre los votantes más mayores. Una tendencia contraria a la de la vicepresidenta segunda, que va perdiendo apoyo a medida que se cumplen años, con su peor dato (3,8) entre los de más de 65. Por su parte, Abascal arranca con un discretísimo 3,3 entre la juventud que consigue elevar mínimamente hasta el 3,5 entre los votantes de mayor edad.

La segmentación también se hace por opciones ideológicas y cada candidato es la primera opción para sus votantes. Algo que no llama la atención, aunque sí existe cierta competencia dentro de los votantes del PSOE, donde se produce el margen más estrecho entre la valoración de Sánchez (6,4) y Díaz (5,7). Tanto los votantes del PP como los de Vox optan prioritariamente por la ministra de Trabajo antes que por el presidente del Gobierno. Si bien los socialistas valoran a Feijóo con un 4, los populares apenas le otorgan un 1,7 a Sánchez. En el electorado morado, Sánchez logra un 5,7, un punto por debajo de la candidata de Sumar (6,7). Por su parte, dentro del espectro de la derecha, los votantes del PP dan a Feijóo la mejor nota de todos los candidatos entre sus electorados –un 7,2– y un 4,7 a Santiago Abascal, casi rozando el aprobado, lo que supone una normalización en su relación. Entre los votantes de Vox, su líder consigue un 7,1 y Feijóo supera el aprobado con un 5,5 de valoración.