El 85% de las universidades ha sufrido ciberataques en el último año

Actualmente el número de víctimas de ciberataques continúa extendiéndose por diversas industrias y las universidades no son la excepción. Puesto que estas instituciones se convirtieron en el foco de tácticas que van desde phishing, malware, intrusiones de red y extorsión por robo de datos. Asimismo, amenazando la integridad de la información y poniendo en riesgo la seguridad de los estudiantes.

Es por ello que reforzar estos sistemas educativos se vuelve una prioridad clave en el sector público y privado. En este sentido, intentando implementar estrategias que garanticen el resguardo del alumnado, docentes y la dirección. Esto mediante programas de capacitación para concientizar sobre las medidas de seguridad, así como el uso de las herramientas necesarias para enfrentar riesgos cibernéticos.

Universidades se convierten en el principal foco de los ciberataques

Esto según un informe del Gobierno del Reino Unido en el que revela que las universidades son las instituciones académicas más propensas a ciberataques. Esto con porcentajes que aumentan hasta un 85% de casos, superando centros estudiantiles destinados a secundaria y primaria con un 63% y 41% respectivamente. Una cifra que resalta la vulnerabilidad frente a las amenazas y plantea una preocupación dentro de este sector.

Esto se debe a que cuentan con sistemas antiguos con vulnerabilidades que todavía no fueron parcheadas. De ahí que más de la mitad de las universidades declarase sufrir brechas por ciberataques. Entre los que se mencionan variables frecuentes como phishing, suplantación de identidad y ataques DDoS. Hasta el punto de convertirse en un desafío constante, con alertas que aparecen casi semanalmente.

Un tesoro para los piratas informáticos

Sin mencionar que estas disponen de información sumamente relevante para los piratas informáticos. Aquellas que van desde notas, direcciones de alumnos o profesores, ingresos, declaraciones, gastos, becas y más. Básicamente, datos capaces de comprometer la integridad personal y financiera de todos los involucrados con la institución. Un verdadero tesoro para que grupos organizados lleven a cabo ciberataques contra estas universidades.

Así lo explicó Pedro Morcillo (Country Manager de TEHTRIS), quienes se dedicaron analizar los principales riesgos cibernéticos del sector educativo. Para así contribuir en el desarrollo de medidas proactivas, en pro de mitigar la ola de ataques que actualmente azota estas instituciones. Al mismo tiempo que destacan la importancia de contar con la ayuda de expertos en soluciones de seguridad digital.

Universidades con sistemas obsoletos como punto de acceso para ciberataques

Dicho informe destaca que uno de los principales puntos de acceso de los atacantes son las páginas de admisión. Puesto que en diversas ocasiones también se utilizan para compartir información como notas, facturas, métodos de pago y demás. Cuyas medidas de seguridad son algo cuestionables, al tratarse de tratarse de plataformas mayormente obsoletas que rara vez reciben mantenimiento o actualizaciones.

Una falta de atención que igualmente se transmite a los laboratorios de las universidades, donde los ciberataques son elaborados con el fin de obtener información relacionada con nuevos proyectos. Razón por la que estas infraestructuras se convierten en objetivos recurrentes. Posteriormente, vendiendo la información a cualquier entidad interesada en obtener una ventaja competitiva.

Una amenaza capaz de comprometer la infraestructura educativa

Sin embargo, los ataques con mayor número de daños son aquellos efectuados a redes universitarias conectadas a entidades superiores. Básicamente, encargadas de transmitir datos críticos sobre investigaciones sensibles, así como proyectos experimentales y datos valiosos. Un objetivo de alto valor para los piratas informáticos y que conlleva un gran riesgo para algunos países.

Es así como los sistemas educativos de alto nivel, al ser tan abiertos y accesibles, se convierten en una diana para los ciberdelincuentes. Ya que no solo comprometerían la integridad de exámenes y datos financieros, sino también de investigaciones valiosas para la región. De esta forma, trayendo consecuencias graves para la seguridad de los estudiantes, así como para toda la infraestructura académica.

Por estas razones, es importante desplegar medidas de seguridad robustas que garanticen la integridad de los datos. Al mismo tiempo que se busca empoderar a los estudiantes, convirtiéndolos en usuarios responsables con la información que comparten. Asimismo, logrando disminuir el riesgo de ciberataques en las universidades.