Azar, apuestas y tecnología

El sorteo de Navidad es un clásico, pero no es el único que atrae a la población española. De hecho, casi la mitad de las personas (49,29%) reconocen que han realizado algún tipo de apuesta en algún juego de azar a lo largo de este año, según el Estudio de Prevalencia de Juego de 2022-2023, elaborado por el Ministerio de Consumo. La mayoría de este dinero se juega en cupones de lotería. Y aunque compartir décimo (especialmente entre familiares, amigos y compañeros de trabajo) es otro de los clásicos que marca este sorteo, lo cierto es que en la mayoría de las ocasiones (8 de cada 10) quienes compran un décimo de lotería lo hace de manera exclusiva o personal.

¿Por qué jugamos a la lotería? Pues según este estudio, por ganar dinero (43,06% de los encuestados), pero también por costumbre. Pocos son los que dicen que encuentran diversión (9,32%) en realizar apuestas o jugar a juegos de azar.

Quizá por eso el dinero que se juega no es mucho: la cantidad mayor de dinero gastado en un mes por personas que han jugado se sitúa en la mayoría de los casos por debajo de 50 euros, entre 2022 y 2023. Algo que, sin embargo, no ocurre con el sorteo de la Navidad: según la Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado (SELAE), cada español habrá destinado una media de más de 71 euros en el sorteo de este año.

Nada se deja al azar

Aunque se trate de juegos de azar, nada se deja al azar en este tipo de sorteos: todas las tareas de quienes participan en este tipo de sorteos están protocolizadas y medidas al detalle con el fin de evitar cualquier tipo de incidencia. Y todos los equipos (tanto físicos como tecnológicos) que participan en estos sorteos se someten a estrictos controles de seguridad para garantizar su correcto funcionamiento.

Por ejemplo, las bolas que se meten dentro de un bombo eran antiguamente, de madera, lo que obligaba a su reemplazo cada cierto tiempo por el desgaste de las mismas. “La ONCE estaba obligada a tener un medidor oficial que revisara cada cierto tiempo las bolas de madera para garantizar que todas pesaban exactamente lo mismo y tenían las mismas opciones de salir”, detalla una fuente de la organización. Aunque el material con el que están hechas ha cambiado, estos peritajes se siguen haciendo para certificar que todas tienen el mismo tamaño, peso y color.

El detalle y características de las bolas y bombos de los sorteos, así como sus sustituciones, controles internos y externos, están detallados en el protocolo específico, aprobado por el Comité de Seguridad del área de Juego de la ONCE

Los bombos en los que se introducen estas bolas encargadas de repartir suerte son del todo menos manuales. Un sistema automatizado es el encargado de dar vueltas a estos recipientes y de accionar el botón que permite que una, y solo una bola, salga del habitáculo para marcar el número o la cantidad con la que se premia. Y sí, evidentemente existen bombos de reserva que sustituirían a los habituales en el caso de que alguno de ellos se estropeara in extremis.

Cuestión de imagen

Las fuentes consultadas por esta redacción (se preguntó también a SELAE, pero pese a que se hizo con un margen de casi un mes, a última hora declinaron participar en el reportaje por falta de tiempo) aseguran que, pese a que en algunos sorteos parece que todo siga siendo manual, todo está automatizado, tecnificado y con tecnología.

¿Por qué entonces se siguen produciendo estos sorteos que invocan un proceso manual, artesanal y tradicional? “Se mantienen los bombos por imagen, para mantener el sabor de la tradición”, reconocen las fuentes de la ONCE con las que hemos hablado. En el caso de esta organización, cabe señalar que solo el sorteo del cupón diario tiene esta puesta en escena, mientras que el resto de los sorteos y juegos se realizan de forma tecnológica.

Preguntamos también si se ha planteado la posibilidad de decir adiós a estos bombos y adoptar también este enfoque más tecnológico en estos sorteos. Las fuentes consultadas confirman que la tecnología permite hacer todos los sorteos con ella, en la medida en que la aleatoriedad es la que manda. «Pero no hay debate: se seguirán haciendo con los bombos», señalan tajante.

Es más, añaden que sorteos como el 11 de la 11 (en el que se extraen 24 bolas para 12 premios) «sería muy fácil hacerlo con tecnologías», pero que se hace con extracción para esa aumentar esa sensación de tradición y de suerte en el sorteo.

Apuestas deportivas

La tecnología y la posibilidad de apostar por Internet supusieron también un revulsivo para el sector de los juegos y el azar. Por ejemplo, la tecnología eliminó la necesidad de acudir a un local físico de apuestas deportivas para realizarlas.

De hecho, según el mencionado Estudio de Prevalencia del Juego, las personas que deciden apostar de manera online suelen destinar una mayor cantidad de dinero a este tipo de juegos. Así, por ejemplo, se observa que hay pocas personas que reconozcan haber desembolsado más de 500 euros en un mes para loterías, apuestas y juegos de azar, pero entre quienes lo han hecho, abundan más quienes lo hacen a través de las diferentes opciones que permite Internet (el 0,69% de este tipo de jugadores) que entre quienes realizan estas apuestas de forma presencial (0,07%).

En cualquier caso, este informe también pone de relieve que lo más habitual es que los participantes en juegos de azar se gasten menos de diez euros al mes, tanto entre aquellos que siguen yendo a un establecimiento físico para hacer este tipo de apuestas (62,2%) como para quienes deciden jugar de forma online (53,12%).

¿Cómo y para qué se utiliza la tecnología en este tipo de negocios? El área de Traders de Codere, una casa de apuestas, explica a La Razón que para ofrecer sus productos utilizan sistemas de informática y redes al uso, así como trabajadores en los estadios/TV/Radio, encargados de comprobar los acontecimientos que están pasando en los eventos deportivos. «Estos datos se integran y alimentan un algoritmo con el que conseguimos ofrecer hasta 150 mercados en vivo (modalidades de apuestas) de un evento deportivo que está siendo disputado en cualquier parte del mundo».

Jugar con probabilidades

Aunque en los juegos de azar, como los de la lotería, todo se deja a la suerte, en el caso de las apuestas (incluyendo las deportivas), algunas tecnologías pueden servir para ayudar a tener mayores probabilidades de acertar, sobre todo combinando datos, análisis, estadísticas y probabilidad, tanto pasadas como actuales.

«El juego de apuestas no es imparcial», reconocen estas mismas fuentes, quienes explican que el departamento de Traders de Codere «estudiamos las probabilidades de los posibles sucesos y los transformamos en precio. Estos están disponibles para apostar (aplicándoles un mínimo margen competitivo)».

Los datos y la tecnología también están siendo utilizados para «reaccionar a peso/volumen de las apuestas para controlar el riesgo en cientos de eventos simultáneos de múltiples deportes».

Próximas jugadas

La tecnología y la propia retransmisión de muchos eventos deportivos ha cambiado mucho en los últimos años y, con ello, el negocio de las apuestas.

Aunque suelen ser los países anglosajones los que tienen una mayor tradición en las apuestas, se observa ya cómo estos negocios se están amoldando y ofreciendo incluso premios y juegos en tiempo real sobre diferentes aspectos durante la propia retransmisión de una competición. Algo que implica la gestión y el análisis en tiempo real de una gran cantidad de datos relevantes y de las correspondientes modificaciones en las estadísticas y probabilidades.

El uso de los datos en tiempo real para seguir y ajustar los pronósticos está cambiando radicalmente el sector de las apuestas, especialmente deportivas. Ahora se está trabajando para combinar los datos recopilados con tecnologías como la Inteligencia Artificial o el blockchain para mejorar el análisis de datos, la experiencia de los jugadores y la confiabilidad en el sistema.

Por ejemplo, las apuestas digitales en tiempo real han creado oportunidades de apuestas que no dependen de la puntuación. En lugar de ello, los espectadores crean su propia competición apostando por elementos individuales de la acción (por ejemplo, las posibilidades de que se pite un penalti antes de un determinado minuto o que la pelota salga del campo un determinado número de veces a lo largo de la primera parte del encuentro).

El cascabel al gato

La tecnología es capaz de predecir cuáles van a ser los números o los equipos que más probabilidades tienen de salir, lo que puede llevar a algunos a cuestionarse si no se hace un uso de ingeniería inversa para, con estos datos en la mano, premiar justamente aquellos que más favorezcan a la banca.

«Desde el área de Traders, además de visualizar apuestas y fijar el precio de las mismas, se desarrolla una labor de vigilancia constante de los riesgos asociados a las operaciones, con el objetivo de minimizar los fraudes», aseguran las fuentes consultadas desde el área de Seguridad de la Información y Riesgos Tecnológicos de Codere. Los riesgos, evidentemente, también están ahí fuera y, como cualquier sistema informático, es susceptible de ser atacado. De hecho, este tipo de negocios se han visto hackeados.

Evitar hackeoss

En septiembre de este año, uno de los mayores casinos del mundo, MGM (con varios hoteles y establecimientos en Las Vegas), sufría un hackeo en sus sistemas que repercutía en unas pérdidas de 100 millones, según reconoció a la CNMC del país. También la Lotería Nacional de México sufría un hackeo y filtración, hace un par de años, de tres gigas de información robada de manera fraudulenta.

El pasado mes de noviembre, el FBI detenía a un joven de 18 años acusado de piratear un sitio web de apuestas y deportes y robar cientos de miles de dólares a titulares de cuentas individuales que utilizan el sitio. El FBI asegura que este delincuente consiguió piratear unas 60.000 cuentas del sitio de apuestas.

En este punto, la seguridad de las casas de apuestas en España, aseguran, está al más alto nivel para evitar, precisamente, una alteración de los juegos de azar.

«La labor fundamental para evitar el hackeo de sistemas lo encontramos en otras áreas, como Seguridad de la Información y Riesgos Tecnológicos, que pone en marcha una combinación de acciones y herramientas», señalan estas mismas fuentes. «Nuestra plataforma de apuestas está monitorizada 24x7 analizando y mitigando todas las amenazas que puedan surgir».

Por si fuera poco, se dispone de «un servicio de inteligencia contratado que vigila de manera oportuna cualquier información de Codere tanto en la Dark web como en la Deep web». Es decir, que los responsables se adentran incluso en las zonas más oscuras de la web para estar alerta ante un posible hackeo a sus sistemas y una alteración de las apuestas y sus resultados.

Desde la ONCE las fuentes consultadas también subrayan que la «aleatoriedad de los números está garantizada» y que «no hay resquicio» para la duda. De hecho, esta organización realiza simulacros de que, efectivamente, alguien pudiera llegar a entrar en los sistemas informáticos y piratearlos para evitar, precisamente, que pudiera llegar a producirse cualquier fraude en los sorteos.

Lo que las Inteligencias Artificiales saben del Gordo de Navidad

¿Qué saben las Inteligencias Artificiales del Sorteo del Gordo de Navidad? ¿Son capaces, de verdad, de predecir el número ganador?

Hemos preguntado a varias de ellas (ChatGPT, Copilot de Microsoft Bing y Bard de Google) para ver sus respuestas.

La mayoría conocen de qué estamos hablando: saben que se refiere al Sorteo Extraordinario de Navidad de la Lotería Nacional de España, que se celebra anualmente el 22 de diciembre y que es uno de los eventos de lotería más esperados en España. También nos cuentan que su nombre completo es «Sorteo Extraordinario de Navidad» y a menudo se le conoce simplemente como «El Gordo» debido al premio principal, conocido como el Gordo.

Les preguntamos, directamente, si saben qué número va a tocar este año. Bing nos remite a algunos enlaces de prensa que se hacen eco de una supuesta predicción elaborada por una IA y viralizado a través de TikTok. Pero todas las IA nos advierten de que no tienen una bola de cristal para acertar.

«Lo siento, pero no tengo la capacidad de predecir números ganadores de lotería(…). La lotería es un juego de azar y los resultados son completamente aleatorios. No hay ninguna manera de prever con certeza qué número ganará en un sorteo específico», señala Chat GPT.

Google, mientras, responde, directamente, con un «no lo sé» porque el resultado «se extrae de forma aleatoria, por lo que cualquier número tiene la misma probabilidad de salir ganador». Eso sí, los dice cuáles son los más vendidos y, por tanto, lo que podrían tener más probabilidades de salir, «sin ninguna garantía de que salgan».

Por si tiene curiosidad, son 03, 10, 11, 13, 15, 19, 25, 29, 31, 33, 39, 41, 43, 45, 47, 51, 53, 55, 57, 59, 61, 63, 65, 67, 69, 71, 73, 75, 77, 79, 81, 83, 85, 87, 89, 91, 93, 95, 97, 99