Propuestas para acelerar el despegue de la electromovilidad

El desarrollo de una red pública de puntos de carga es fundamental para reducir la dependencia de la carga en garajes privados, ya que en España -a diferencia de otros países- el 65% de los vehículos no dispone de esta opción. Alcanzar una infraestructura accesible y distribuida equitativamente, similar a la actual en estaciones de servicio para combustibles tradicionales, que garantice la cobertura necesaria en las zonas de mayor tráfico y en áreas rurales, facilitaría la adopción de vehículos eléctricos y una transición energética justa que llegue al conjunto de la población, asimismo evitaría las desigualdades por ubicación geográfica y nivel de renta.

Es una de las conclusiones de la jornada Espacios de Energía celebrada recientemente. Se trata de una iniciativa impulsada por Cepsa para fomentar la escucha activa, el intercambio de conocimiento y la construcción de consensos entre diferentes actores implicados en la transición energética. En la sesión participaron políticos de distintas formaciones, representantes de todos los niveles de la administración, expertos académicos y emprendedores.

Mapa de la red

Destacable entre las propuestas aportadas fue la creación de un mapa estatal que identifique una red básica de puntos de carga públicos en carretera y que estos tengan también visibilidad en las distintas apps de los puntos del resto de operadores; de tal manera, que permita acceder a toda la información acerca de la disponibilidad y estado de la red, una solución que ya existe en Portugal.

Igualmente, en el foro se apuntó la conveniencia de incluir la infraestructura de recarga en los planes generales de ordenación urbana y considerarlos bienes de interés general o utilidad pública.

Ayudas e incentivos

También se planteó una serie de fórmulas para reducir el precio de los vehículos eléctricos. En primer lugar, reformar el sistema de ayudas volviendo a sistemas como el Plan Renove, pudiendo aplicar el descuento directamente en los concesionarios. Esta fórmula ayudaría a aumentar el beneficio y percepción social de las ayudas.

Otra propuesta fue diseñar nuevos incentivos para la adquisición de vehículos eléctricos, ayudas directas para las empresas que impulsen la movilidad sostenible de sus flotas y trabajadores. También se propusieron soluciones como el leasing social, siguiendo el ejemplo de Francia, o el carsharing de iniciativa pública.

Agilización de la burocracia

Entre los grandes consensos a los que se llegó estuvo la necesidad de agilizar la tramitación y homogeneizar los procesos de autorización entre comunidades autónomas y los distintos niveles de la Administración de los puntos de recarga y de concesión de las ayudas a la compra.

Los participantes también compartieron la importancia de simplificar los trámites administrativos para la instalación de puntos de recarga y la creación de una ventanilla única, como esencial para unificar y agilizar los procesos que permitiría una mayor eficiencia y transparencia en los trámites, facilitando la inversión en infraestructura de recarga y eliminando las barreras burocráticas que actualmente ralentizan el despliegue de puntos de recarga hasta dos años, cuando el tiempo de construcción es de dos semanas.

Igualmente, se consideró necesario acelerar la gestión burocrática del refuerzo de capacidad de la red eléctrica allá donde se proyecte una mayor demanda.

España, lejos de los objetivos de electromovilidad

La adopción de la movilidad eléctrica en España es aún muy limitada. En 2023 solo el 12% de los vehículos vendidos estaban electrificados, lejos del 21% de la media europea, alcanzando únicamente el 1,2% del parque total de turismos.

Actualmente, se han implantado más de 30.000 puntos de recarga, de los cuales solo en torno a 2.000 son rápidos o ultrarrápidos, lo que constituye una barrera significativa para los trayectos de larga distancia y para los usuarios que no disponen de carga doméstica.

Hoy en día, los vehículos se encuentran estacionados el 96% del tiempo y en grandes ciudades el tiempo empleado en buscar aparcamiento puede suponer hasta el 25% del tiempo de uso. La movilidad eléctrica es aceleradora de un modelo no basado en la propiedad (MaaS, Mobility as a Service), que descongestione el tráfico, libere el uso del espacio público en las ciudades y reduzca las emisiones.

Espacios de Energía

En este foro, enmarcado dentro de la estrategia Positive Motion de Cepsa, la compañía reúne a líderes institucionales, expertos y miembros de la sociedad civil para debatir y generar soluciones que impulsen la transformación hacia un modelo energético más sostenible.