CDR

La Audiencia tendrá que revisar la libertad del CDR que almacenaba precursores de explosivos

Acvot recurre la decisión y replica que Codina, a quien compara con terroristas islamistas, participó en la localización de objetivos

Alexis Codina, uno de los CDR investigados por la Audiencia Nacional, en una imagen incautada por la Guardia Civil
Alexis Codina, uno de los CDR investigados por la Audiencia Nacional, en una imagen incautada por la Guardia Civillarazon‘Terminator Resistance’

La Asociación Catalana de Víctimas de Organizaciones Terroristas (Acvot) ha recurrido la libertad bajo fianza de 10.000 euros acordada por la Audiencia Nacional respecto a Alexis Codina, uno de los integrantes de los Comités de Defensa de la República (CDR) detenidos el pasado septiembre en la “operación Judas”. La Sección Segunda de la Sala de lo Penal adoptó la medida cautelar argumentando que a Codina se le incautaron sustancias “que debidamente mezcladas y siguiendo los correspondientes procedimientos técnicos pudieran llegar a convertirse en explosivos (precursores)”, estas no eran "en sí mismas explosivos”.

Sin embargo, los letrados de Acvot -José María e Ignacio Fuster-Fabra- sostienen en sus alegaciones que Codina “tuvo contacto directo con los materiales destinados a ser artefactos explosivos y a la puesta en marcha de la materialización de los mismos con fines terroristas”.

Del mismo modo, la asociación catalana de víctimas alude a las dudas expresadas por los magistrados de la Sección Segunda respecto a la naturaleza terrorista de los hechos investigados y recalca que durante toda la investigación han aflorado indicios de que los detenidos formaban parte de una organización terrorista “no solo por la operativa desarrollada, los materiales incautados y la información adquirida, sino por la propia naturaleza de los fines que perseguían”.

De hecho, los letrados comparan las características del Equipo de Respuesta Táctica (ERT) al que pertenecían los siete detenidos -cinco de ellos ya en libertad- con los terroristas islamistas del Raval (Barcelona) condenados por el Tribunal Supremo en 2011 y que permanecieron en prisión provisional hasta la celebración del juicio en la Audiencia Nacional.

A diferencia de lo que argumentaba la Sala, para Acvot el riesgo de fuga es “evidente” dada la gravedad de los delitos y el apoyo con el que cuentan, tanto institucional -incluido el del presidente de la Generalitat, Quim Torra- como del independentismo más radical.

La acusación popular recuerda en sus alegaciones que Codina contaba con un “laboratorio” clandestino en su vivienda de Sant Fost Campsentelles (Barcelona) en el que el ERT almacenó compuestos explosivos, “siendo la persona que conseguía por sus medios algunos elementos esenciales como el óxido de hierro”. En su domicilio, añade, “se elaboraban cohetes caseros” y también participó “en la localización de los objetivos para llevar a cabo acciones violentas” contra instalaciones críticas como torres eléctricas.