El Gobierno de Pedro Sánchez

La ministra Montero excluye a los hombres de todos los altos cargos de Igualdad

Incluye a siete mujeres, entre ellas la histórica feminista Beatriz Gimeno, que será la nueva directora del Instituto de la Mujer

Ni un solo hombre ocupará un alto cargo en el Ministerio de Igualdad. La ministra Irene Montero ya ha diseñado la estructura definitiva de su departamento, y en él ha incluido a siete mujeres, entre ellas la histórica feminista Beatriz Gimeno, que será la nueva directora del Instituto de la Mujer. Gimeno ha llegado a cuestionar la lactancia materna y a considerar la heterosexualidad como “una herramienta política para subordinar las mujeres a los hombres”.

Gimeno fue presidenta de la Federación de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FLGTB), y actualmente es diputada por Podemos en la Asamblea de Madrid, pero dejará su escaño para ponerse a las órdenes de Montero. Gimeno, que es también ensayista, sostiene que el feminismo “lucha con denuedo para limitar los daños que la heterosexualidad provoca en las mujeres”, y considera que “cualquier mujer puede ser lesbiana”.

Noelia Vera (Cádiz, 1985) será la nueva secretaria de Estado de Igualdad. Vera, portavoz de la Ejecutiva de Podemos y diputada en el Congreso desde 2015, es periodista de profesión, y llegó al partido desde el programa de televisión ‘La Tuerka’, que entonces dirigía Pablo Iglesias, y donde coincidió también con Juan Carlos Monedero, cofundador de Podemos.

Amanda Meyer será la jefa de gabinete de Montero. Meyer, también gaditana, es hija del histórico dirigente de IU Willy Meyer, y fue durante siete años abogada de la Asociación 11M Afectados del Terrorismo. Por su parte, la gallega Ángela Rodríguez, más conocida por ‘Pam’, ejercerá de asesora de la ministra, mientras que la escritora Alba González será la directora general de Igualdad de Trato y Diversidad Étnico-Racial.

El cargo de delegada del Gobierno para la Violencia de Género lo ocupará la diputada murciana y jueza en excedencia Victoria Rosell. Su principal reto será el desarrollo del Pacto de Estado contra la Violencia de Género, aprobado en 2017 por todos los grupos políticos a excepción de Podemos, que se abstuvo por considerar que el proyecto era poco ambicioso.

Otra histórica activista del movimiento feminista, Boti García Rodrigo, ocupará la dirección general de Diversidad Sexual. Ese departamento, de nueva creación, será el encargado de luchar contra la discriminación por orientación sexual o identidad de género, así como contra los delitos de odio a personas del colectivo LGTBI (Lesbianas, Gays, Transexuales, Bisexuales e Intersexuales).

Boti García Rodrigo contrajo matrimonio en 2005 con Beatriz Gimeno, la nueva directora del Instituto de la Mujer. Las redes sociales ardieron ayer tras conocerse el nombramiento de Gimeno, muy criticada en ocasiones por la radicalidad de su credo feminista. En su opinión, “son muchas las lesbianas que afirman haber escogido serlo por cuestiones políticas. Han llegado a la conclusión de que como lesbianas son más felices”.