José Luis Ábalos
Cinco versiones del “caso Ábalos”: de no reunirse con Delcy Rodríguez a hacer “un servicio al país”
El ministro se enroca con sus diferentes versiones sobre la cita con la “dos” de Maduro. Ha pasado de negar en rotundo haber subido al avión de Rodríguez a mantener que hizo “un servicio al país”.
El “caso Ábalos” arroja ya hasta cinco versiones distintas sobre su “encuentro” -que no reunión- en secreto en Barajas con la “dos” de Maduro. El ministro de Movilidad y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, se ha enrocado y ha pasado de negar la cita con la vicepresidenta venezolana a asegurar después que tan solo fue una conversación de 25 minutos. Cinco versiones en menos de una semana.
Jueves 23 de enero
La primera “crisis” en el Gobierno de Sánchez comenzó el pasado jueves cuando el diario “Vozpopuli” informaba del encuentro con Delcy Rodríguez. El número tres de Pedro Sánchez negaba entonces de manera rotunda a la prensa la información y el equipo de Ábalos desmentía también lo ocurrido. Se aseguraba entonces que el ministro acudió a Barajas el pasado domingo para recoger a su amigo, el ministro venezolano de Turismo, Félix Plasencia.
Viernes 24 de enero
Al día siguiente, viernes 24 de enero, en un acto de partido en Córdoba, el ministro, a preguntas de los periodistas dijo: «Ya he contestado, ¿eh? me reuní con el ministro de Turismo. ¿Quiere usted saber cuándo me he reunido con la oposición venezolana?, ¿le interesa? Pues como una docena de veces. ¿Quieres saber de qué hablamos? No, yo me reuní con el ministro de Turismo», aseguró.
En una segunda versión, Ábalos aseguró que su amigo venezolano le pidió que saludar a su vicepresidenta, la cual no podía bajar del avión al tener prohibida la entrada en la Unión Europea debido a las sanciones aplicadas a Venezuela por las políticas represivas de su presidente Nicolás Maduro. Señaló el ministro que subió al avión para saludarla y recordarle que "lamentablemente no podía entrar en España”, además de destacar que “en todo momento” estuvo acompañado de miembros de la Policía y de la Guardia Civil. Ese mismo día, en una tercera versión, el ministro admite un contacto «fortuito», con la mandataria del régimen chavista, casi por casualidad. Mantuvo, según su equipo, «un saludo forzado por las circunstancias». Coincidieron dentro de la aeronave, y claro, se vieron «unos minutos».
24 horas después Moncloa seguía sin pronunciarse sobre el “caso Ábalos”, ni para defenderle ni para censurarle, como pide la oposición.
Sábado 25 de enero
Cuarta versión del secretario de Organización socialista. En una entrevista en exclusiva a este medio, Ábalos explica que “llegando al aeropuerto” recibió una llamada del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, para informarle de que en ese vuelo viajaba también la número dos de Maduro. Marlaska, según Ábalos, le dice “Ya que vas, procura que no se baje del avión”.
Reacción del presidente. Desde Murcia Pedro Sánchez, se pronunció a favor de Ábalos: “Hizo todo lo que pudo para evitar una crisis diplomática y lo logró”. El presidente destacó así que lo único que intentó Ábalos fue “poner todo lo que estaba de su parte para evitar una crisis diplomática y lo ha logrado”. Y más tarde repitió: “Puso todos los esfuerzos y logró evitarla [la crisis], ¿cuál es el reproche?”.
Domingo 26 de enero
Quinta y más reciente versión. Ábalos asegura en una entrevista en La Sexta que hubo un encuentro con la vicepresidenta venezolana que se alargó durante 25 minutos, tiempo en el que se limitó a transmitir la inquietud del Gobierno y recordarle que no podía pisar suelo español. "«Subí al avión, me la presentaron, le dije que era una situación un poco violenta. No abordé con ella absolutamente ningún tema. Si yo quisiera reunirme, hay otros sitios», afirmó. El ministro de movilidad volvió a insistir en que no había hecho nada mal, "en todo caso le he hecho un servicio al país», resumió anoche.
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