PSOE

Gonzalo Caballero: «Si Feijóo necesita a Vox para gobernar, el pacto será una realidad»

El candidato del PSdeG, rival de Feijóo el próximo 5-A, advierte de que si llega a la Xunta, exigirá que Galicia esté al mismo nivel que Cataluña y el País Vasco

Gonzalo Caballero –Ponteareas 1975– es doctor en Economía y profesor en la Universidad de Vigo. Es prácticamente un recién llegado a la política. Hasta el verano pasado su vida profesional se desarrollaba en el ámbito universitario. En apenas seis meses ha pasado de corregir los exámenes de sus alumnos a dar el salto al Parlamento gallego y ahora a disputarle la Xunta a Alberto Núñez Feijóo. David contra Goliat. Gonzalo Caballero quiere que el PSdeG sea la «casa común del progresismo» para confirmar la mayoría de izquierdas de las elecciones de 2019 el próximo 5 de abril y acabar con la hegemonía de 11 años del PP que deja una «Galicia sin buena salud».

–Aterriza en Madrid, arropado por la plana mayor del Gobierno en sus horas más convulsas tras la crisis por la ley de Liberad Sexual...

–El Gobierno de coalición está funcionando de manera satisfactoria, con habilitad, firmeza y consistencia. Existirán ajustes en distintos temas, como en cualquier ejecutivo, para conseguir la coordinación máxima, pero lo cierto es que todo lo que está consiguiendo es positivo para el país.

–La izquierda ganó las generales en Galicia, pero las encuestas no le son favorables de cara al 5-A. ¿Confía en poder gobernar?

–Todas las encuestas reflejan que el PP está en fase de caída electoral y el PSOE, en recuperación. El 55% de los gallegos votaron a fuerzas progresistas en 2019 y estamos convencidos de que el 5 de abril va a haber un cambio político en Galicia. Retiramos a Rajoy del Gobierno de España y retiraremos a Feijóo del Gobierno de la Xunta.

–Hablaba de las bondades del Gobierno de coalición, ¿importaría la fórmula con el BNG y las mareas?

–Necesitamos un gobierno que resuelva los problemas de los gallegos, que están preocupados por el empleo la despoblación y la crisis en la Sanidad pública en la que Feijóo metió a la región. Los 11 años de Feijóo han sido 11 años de retrocesos. Frente a eso tenemos un proyecto anclado en la generación de empleo, la vertebración territorial y las políticas sociales con la Sanidad como prioridad para limitar los recortes. Nosotros respetamos a otras fuerzas progresistas con las que tenemos diálogo e interlocución, pero nuestro reto es tener un proyecto para los gallegos.

–No ha contestado a la coalición...

–Salimos a ganar las elecciones y a partir del 5 de abril veremos cuál es la estructura adecuada para dar un gobierno de progreso a Galicia. Todos los progresistas saben que retirar a Feijóo de la Xunta es una emergencia nacional para el país. Deja Galicia con un balance nefasto. Ha sido un gran enemigo de lo público en 11 años de gobierno. La mejor opción para Galicia es que haya una mayoría socialista clara para encabezar un tiempo de progreso en la comunidad.

–¿Estaría dispuesto a asumir el discurso del BNG para gobernar?

–Nuestro proyecto es el del PSdeG. El BNG se recuperó en las elecciones de noviembre, pero se quedó a escasos votos de Vox y eso abre un escenario que nos preocupa. Nosotros no queremos que la extrema derecha pueda penetrar en Galicia y combatimos con toda la fuerza que tenemos para dejarles al margen.

–Sí, pero el BNG está en ascenso y las mareas en caída...

–Somos una fuerza política de izquierdas llamada a conectar con una amplia mayoría social. Desde el centro izquierda hasta la izquierda. Queremos ser la casa común del progresismo gallego. Les deseamos lo mejor a otras fuerzas, pero el cambio será efectivo cuantos más votos tengamos los socialistas.

–Si Vox fuera decisivo para la gobernabilidad, ¿prestarían sus votos a Feijóo para que no tenga que depender de Vox?

–Si Feijóo necesita los votos de Vox para gobernar Galicia, el pacto con la ultraderecha será una realidad. El problema es que ni juntos tienen garantizado que vayan a gobernar, porque solo suman el 44% del electorado. Feijóo aplaudió el pacto del PP con Vox en Andalucía y cuando Javier Ortega Smith visitó Galicia aseguró que, si los necesitaba, los votos de Vox estarán a disposición de Feijóo. El PP y Vox pactarán en Galicia si es necesario para mantener el Gobierno. Si Feijóo es negativo para Galicia por sí mismo, un pacto con Vox sería letal.

–Sin embargo, Feijóo les acusa a ustedes de tener el mismo objetivo que Vox: echar al PP.

–Feijóo es un cínico integral, lo único que quiere es mantenerse en el poder a cualquier precio, miente de forma continua. Mintió cuando decía durante meses que para garantizar la estabilidad no iba a adelantar las elecciones y, de repente, las adelantó porque se encontró con una mayoría que lo ha puesto contra las cuerdas y lo ha arrinconado. Por ejemplo, cuando cerró el paritorio de Verín y miles de gallegos salimos a la calle para frenar su línea de retrocesos y recortes. La palabra de Feijóo ya no tiene ninguna credibilidad en Galicia.

–Pero no me negará que Feijóo no es Cayetana Álvarez de Toledo y se parece poco a Pablo Casado.

–En todas las decisiones importantes, Feijóo vota lo mismo que el PP. Es un heredero de Romay de Becaría y ha estado en los gobiernos de Aznar y de Rajoy colaborando desde la Xunta. No encuentro ningún hecho objetivo en el que Feijóo haya roto con el PP.

–El adelanto electoral en Galicia se produjo para evitar el «contagio» con las catalanas, ¿cree que les perjudica este debate?

–El tema catalán es un tema de alta complejidad política, pero lo cierto es que no marca la agenda. Lo reflejan todas las encuestas.

«Feijóo es un cínico integral, lo único que quiere es mantener el poder a cualquier precio. Dijo que no adelantaría las elecciones y lo hizo. Su palabra no tiene credibilidad»

–Se ve usted presidente...

–Hay una mayoría de cambio en Galicia. Quiero ser el presidente de la esperanza y la gestión.

–¿La abstención es el rival a batir en las urnas?

–En 2019 hubo distintos niveles de participación y la mayoría progresista se reflejó en el 55%. Creemos que es necesario que haya una alta participación porque si la participación fuese muy alta, estaríamos en condiciones de retar al PP para ser primera fuerza.

–Habla mucho de sanidad...

– Feijóo deja menos camas, menos presupuestos en atención primaria, problemas en urgencias y en seis de cada diez ayuntamientos no hay pediatra todos los días y a todas las horas. Negó durante mucho tiempo el problema de la Sanidad. Me reuní con él nada más ser elegido secretario general, hace dos años en la única reunión que hemos tenido a puerta cerrada. Le trasladé la preocupación por la sanidad pública gallega. Me negó cualquier debilidad del modelo y han tenido que pasar dos años para que, arrinconado, haya empezado a reconocer los problemas que existen.

–Si usted está al frente de la Xunta, ¿el diálogo con Moncloa será más fluido? Feijóo ha llamado a Sánchez «moroso»...

–Feijóo es el mayor moroso que hay en Galicia. Moroso con la Sanidad, con la Educación, con los ciudadanos que tienen problemas de Dependencia, con los niños en lista de espera en las escuelas infantiles. Moroso con una Galicia que necesita un cambio. Ha buscado una estrategia de confrontación a la desesperada con el Gobierno de España porque ha visto que ha perdido la mayoría política. Pero los gallegos ya ven que de esa estrategia no sale ninguna solución para Galicia. Se necesita un presidente de la Xunta que, con firmeza y exigencia, dialogue con el Gobierno de España. Ese es el papel que quiero jugar. Un gobierno del diálogo con la España plural.

–¿Esa firmeza va en la línea de evitar que exista bilateralidad con unos territorios sí y con otros no?

–Galicia ha estado cómoda en el Estado de las Autonomías desde la Transición, pero somos una nacionalidad histórica como reconoce el texto constitucional equiparable al País Vasco y Cataluña. Si en algún momento hay una reforma constitucional para implicar mayores competencias o mayor rango a las nacionalidades históricas, siempre exigiremos que Galicia esté al mismo nivel que Cataluña y el País Vasco.

–Orense está gobernando por un alcalde muy criticado y lo hace con el apoyo del PP. ¿Es una anomalía?

–Orense es el mayor ejemplo del fracaso de Feijóo y de la poca vergüenza política del PP. Hicieron un pacto de la indignidad con una fuerza política localista que se presentó para echar a Baltar de la Diputación de Orense. Patrocinó un acuerdo contra natura que mantiene la saga del caciquismo en la diputación y ha colocado al frente de Orense a un representante político cuya tónica general es el esperpento y la ineficiencia.

–Qué planes tiene para la industria gallega

–En 11 años de Feijóo no ha existido política industrial y ha triplicado la deuda pública por tres. Su política industrial ha sido un discurso institucional en la televisión pública en la que prometió una docena de barcos para ser construidos en los astilleros gallegos. Luego la amplió a 20 gracias a su acuerdo con Pemex. Sólo llegaron dos y uno está empantanado y el astillero está al borde de la quiebra. Los otros 18 nunca llegaron. Sí llegó la foto de Feijóo con un dirigente de PEMEX –petrolera mexicana– hoy detenido por corrupción y soborno.

–¿Pontón o Gómez Reino?

–Ana Pontón muy bien para el BNG, Antón Gómez Reino muy bien para Galicia en Común y el PSdG para liderar una mayoría de progreso.

«Si Feijóo necesita los votos de Vox para gobernar Galicia, el pacto con la ultraderecha será una realidad. Aplaudió el pacto del PP en Andalucía»

–¿Quien quiera ganar en Galicia debe pasar por Argentina?

–Hay que atender a los gallegos repartidos en el mundo. En Argentina la comunidad es muy amplia. Por eso he estado estos días en Argentina. Me he reunido con el presidente y he mantenido contactos con toda la colectividad gallega.

–¿A quien recibirá primero en su despacho, si es elegido presidente?

–No me preocupa a quién recibiré primero, me preocupan que medidas tomaremos para revitalizar el empleo, recuperar el medio rural y para fortalecer las políticas sociales y la sanidad. Mi despacho siempre estará abierto, no me encerraré en el coche oficial como Feijóo.