Coronavirus

Leyenda y peste negras

Las fallas siguen pero el ministerio dirá si hay una nueva recomendación
n hombre con mascarilla asiste a la mascletá disparada hoy en la plaza del ayuntamiento a cargo de la pirotecnia Mediterráneo. EFE/ Biel AliñoBIEL ALIÑOAgencia EFE

El coronavirus nos enseña epidemiología, como según De Gaulle las guerras hicieron aprender geografía a los franceses. Estos días hemos conocido mejor algunas terribles pandemias ocurridas a lo largo de la historia. Entre ellas, la «peste negra» y la mal conocida como «gripe española». La primera asoló el continente europeo procedente de Crimea donde la llevó el ejército mongol, y fue transportada de Eurasia por los comerciantes y marinos –especialmente genoveses y venecianos– siguiendo la ruta de la seda hacia la actual Italia. Observemos que hoy el coronavirus ha saltado a Europa también especialmente a través de Italia.

En cuanto a la «gripe española», en realidad nació en la estadounidense Kansas, en plena Primera Guerra Mundial, alcanzando Europa al ser transportada por soldados norteamericanos tras su incorporación a la contienda. El hecho de que España se mantuviera al margen de esta guerra, evitó la censura informativa que afectó a los países en liza, e hizo que tuviera más visibilidad en nuestro país, de lo que se derivó esta variante vírica de la leyenda negra anti española.

Hasta ayer , tras las manifestaciones, España tenía un perfil bajo en la visibilidad del coronavirus, mientras que China e Italia –unidas por su histórica comercial ruta de la seda– aparecen señaladas como el foco inicial y secundario de la misma, respectivamente. Al menos ahora, no se identifica a nuestro país como causante de la actual peste negra, como ocurriera con su leyenda del mismo color.