Desescalada
Desescalada militar: sólo quedan 801 efectivos en las calles
Son un 84,5% menos que en el pico más alto del 3 de abril. A ellos se suman 2.995 sanitarios del Ejército en los hospitales o la Farmacia de la Defensa
El pasado 15 de marzo, nada más decretarse el estado de alarma, arrancó la mayor operación militar en territorio nacional en tiempos de paz: “Balmis”. Ese día, los primeros en desplegarse en las calles de 21 localidades fueron 911 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) la punta de lanza de esta operación, a los que se sumaron unos 2.500 sanitarios del Ejército en los hospitales de la Defensa (Madrid y Zaragoza) o en la Farmacia Militar. Día a día ese contingente fue aumentando hasta llegar, el 3 de abril, a 8.261 efectivos (5.161 en las calles y 3.100 sanitarios). Fue el “pico” de un despliegue militar sin precedentes que se mantuvo por encima de los 7.000 efectivos (incluidos los médicos) hasta el 18 de abril en más de 220 localidades de media (llegaron hasta las 300).
Después de muchas duras batallas, las Fuerzas Armadas cada vez son menos requeridas y también llevan varios días de “desescalada”. Tanto, que este fin de semana ya hay menos de mil efectivos en las calles: el sábado fueron 933 y hoy, 801. Eso sí, sin olvidarse de los casi 3.000 sanitarios castrenses que mantienen su lucha en los centros dependientes de la Inspección General de Sanidad de la Defensa.
De esta forma, hay menos militares en las ciudades que el primer día y un 84,5 por ciento menos que en la peor de todas las jornadas desde que comenzó la pandemia. De hecho, la presencia de uniformados prevista para hoy únicamente incluye diez localidades españolas, mientras que ayer fueron una docena.
En este tiempo (57 días), las misiones de las Fuerzas Armadas en la lucha contra el coronavirus han sido variadas, aunque una ha sido la protagonista: la desinfección, sobre todo de residencias de ancianos, donde se encuentra la población más vulnerable y con mayor tasa de fallecimientos. Y es que, de las cerca de 11.000 descontaminaciones que han llevado a cabo por toda España, más de 5.100 han sido en geriátricos, 3.100 en hospitales y centros de salud, y 1.100 en centros sociales. Sin olvidar aeropuertos, estaciones, dependencias policiales...
En total, han llevado a cabo más de 18.500 intervenciones en más de 2.300 poblaciones de toda España, en las que también han ayudado a levantar hospitales o albergues de campaña, han dado seguridad a instalaciones críticas o colaborado con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en proteger las fronteras. Además, han trasladado enfermos y fallecidos.
Junto a esto, los uniformados han transportado más de 70 toneladas de ayuda en una treintena de vuelos del Ejército del Aire, tanto dentro como fuera de España. Una Fuerza, la Aérea, cuyos efectivos también han llevado a cabo otras misiones, como la medicalización de aviones o el montaje y gestión de la UCI instalada en la Feria de Madrid. Miles de militares que a diario han estado coordinados por una veintena de efectivos desde el Mando de Operaciones (MOPS) de Madrid.
La intención, tal y como explicó a LA RAZÓN el teniente general Fernando José López del Pozo, comandante del MOPS, es mantener “Balmis” hasta que concluya el estado de alarma. Algo que confirmó esta misma semana la ministra de Defensa, Margarita Robles, quien apuntó que se mantendrá la estructura de la operación y un nivel de reacción adecuado para hacer frente a las demandas y peticiones de actuación de las Fuerzas Armadas que se sigan solicitando.
En lo que respecta a la jornada de hoy, domingo, las Fuerzas Armadas, los 801 desplegados en diez localidades continuarán realizando desinfecciones en cuatro residencias, cuatro centros de salud y un hospital, además de en la Feria de Madrid, Mercamadrid y Mercabarna. Sin olvidar la formación en estas tareas a diferentes organismos. Mantendrán, además, su presencia en pasos fronterizos y en centrales nucleares y colaborarán con Cruz Roja en el transporte de alimentos en La Laguna (Tenerife).
Por último, continúan con su nuevo proyecto, “Atila”, con el que prueban lámparas UV acopladas a un vehículo de desactivación de explosivos para desinfectar áreas críticas. Ya se encuentra en su fase 3 para realizar un reconocimiento en una residencia de ancianos de Zaragoza.
A ellos hay que sumar a los 2.995 sanitarios militares que prestan su servicio en los hospitales y centros dependientes de la Inspección General de Sanidad de la Defensa.
✕
Accede a tu cuenta para comentar