Ejército del Aire

Los cazas españoles interceptan media docena de aviones rusos en el Báltico

Seis F-18 y 137 efectivos protegen desde hace un mes el espacio aéreo aliado

El Centro Nacional de Defensa ha informado en un comunicado de que los radares rusos detectaron un objetivo aéreo que volaba sobre el mar Báltico y se acercaba a la frontera de Rusia. IMAGEN DE ARCHIVO
El Centro Nacional de Defensa ha informado en un comunicado de que los radares rusos detectaron un objetivo aéreo que volaba sobre el mar Báltico y se acercaba a la frontera de Rusia. IMAGEN DE ARCHIVOEjército del Aire

La presencia de cazas españoles protegiendo el espacio aéreo de los países bálticos de las injerencias rusas es ya casi una tradición anual en lo que a operaciones en el exterior se refiere. Y este año, a pesar de la pandemia del coronavirus, el Ejército del Aire ha vuelto a desplegarse en la Policía Aérea del Báltico de la OTAN. El pasado 1 de mayo, después de una estricta cuarentena y fuertes medidas de protección, un contingente de seis cazas F-18 y 137 efectivos aterrizó en Siauliai (Lituania) para liderar esta misión. Un mes después, estos aviones han interceptado media docena de aeronaves rusas que volaban sin identificar.

La misión del bautizado como “Destacamento Vilkas” (lobo en lituano) es la de proteger los cielos de Lituania, Letonia y Estonia, países que carecen de capacidad de defensa aérea, la cual proporcionan los aliados por turnos. Y es que es habitual que los aviones de Rusia vuelen desde San Petersburgo a Kaliningrado por el Mar Báltico sin plan de vuelo y sin transpondedores, por lo que en los radares de la OTAN se muestran como una «traza», un aparato sin identificar o una posible amenaza. Pueden volar por ahí, pero deben identificarse. En ese momento, los cazas aliados llevan a cabo un “scramble”, que consiste en su despegue inmediato para interceptar las aeronaves, identificarlas y acompañarlas para evitar que entren en el espacio aéreo de dichos países.

En unas seis ocasiones en lo que llevan de despliegue han recibido alertas reales ante la presencia de este tipo de aparatos, en las que han interceptado al menos dos aviones de combate “Sukhoi”, un avión de transporte táctico “Antonov” y otro avión de transporte “Tupolev”, tal y como ha confirmado el Ejército del Aire.

Un F-18 español intercepta un avión ruso
Un F-18 español intercepta un avión rusoEjército del Aire

El Ejército del Aire liderará esta misión hasta el 31 de agosto desde Sialuai, donde los F-18 del Ala 15 comparten base con los “Eurofighter” de la Fuerza Aérea Británica (RAF). Además, también participan en esta misión los “Mirage”de Francia desde Estonia.

Esta es una de las misiones con las que Felipe VI habló el pasado sábado con motivo del Día de las Fuerzas Armadas. Durante su intervención en la videoconferencia que mantuvo con diferentes contingentes, el Rey destacó la participación de España en la Policía Aérea del Báltico, apuntando que operaciones como esta son "la manera más clara de poner hechos sobre palabras, de demostrar el compromiso con nuestros aliados en cualquier circunstancia y haciendo esfuerzos teniendo en cuenta el momento en que nos encontramos en nuestro país”.

Aunque la participación de España en esta misión se remonta a 2006, nuestro país ha estado presente ininterrumpidamente en la misma desde 2015, cuando se desplegaron en Amari (Estonia), cuatro Eurofighter. En 2016 hicieron lo propio en Siauliai, liderando también la misión. En las últimas ediciones, los aviadores españoles vivieron momentos tensos y polémicos, como en 2018, cuando uno de los cazas disparó accidentalmente un misil sobre una localidad de Estonia sin causar daños. El pasado año, mientras, uno de los aviones españoles vivió un tenso episodio con dos aviones rusos que escoltaban la aeronave del ministro de Defensa de dicho país. El Gobierno español defendió la actuación de los pilotos del Ejército del Aire.

Al haberse desplegado el actual contingente en plena pandemia de coronavirus, a todo el personal del destacamento se le realizó un test y fue sometido a una cuarentena previa como medida de precaución, tras lo cual se les realizó otra prueba. Además, se extremaron las medidas de protección sanitarias tanto en el traslado al aeropuerto como durante los vuelos del personal para evitar posibles contagios. Junto a ellosha viajado un equipo médico para, durante estos cuatro meses, realizar un seguimiento del estado de salud de todos ellos.