Pedro Sánchez

Sánchez anuncia la creación de una reserva estratégica de material sanitario para hacer frente a posibles rebrotes

El presidente del Gobierno hace balance de los 100 días de estado de alarma: “No podemos bajar la guardia” y apela a la "unidad" en España para iniciar la reconstrucción del país

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pone broche hoy al fin de 100 días de estado de alarma desde su declaración el pasado 14 de marzo. En una declaración institucional desde el Palacio de La Moncloa ha querido rendir un homenaje público a las víctimas del coronavirus, y ha apelado a los españoles a no bajar la guardia a pesar de que hoy decaigan las medidas especiales de contención contra la enfermedad. “No podemos bajar la guardia”, ha asegurado para advertir de que podemos “ser muro o vía de transmisión” del virus. Así, a pesar de la desescalada que ya viven todas las comunidades, el presidente ha querido transmitir un mensaje de prudencia y contención a los ciudadanos, recordando que “el virus puede volver y puede sacudirnos de nuevo en una segunda ola, y hay que evitarlo a toda costa”.

El presidente ha realizado su último anuncio dentro de las quince conferencias que ha venido realizando durante los casi 100 días del estado de alarma. Según ha confirmado el Gobierno se encuentra ya preparando una reserva estratégica de material sanitario para hacer frente a posibles brotes junto a las comunidades. Un plan que tendrá que consensuarse con las comunidades autónomas, que desde esta noche tendrán las competencias intactas para tomar decisiones frente al virus.

En su comparecencia ha asegurado que “es un orgullo y un honor ser el presidente del Gobierno de este país”, y ha apelado a “mantener la guardia alta y seguir a rajatabla las reglas de higiene y de protección”. En el resumen sobre los efectos de la pandemia, el presidente ha señalado que nos encontramos ante “una nueva etapa”, y ha confirmado que “estamos en condiciones de avanzar, tenemos el deber de avanzar”, ha reflexionado. Se ha gratificado de que “hemos recuperado la calle y reconquistado la movilidad” y se ha mostrado optimista en cuanto a la recuperación económica, asegurando que “la economía empieza a latir”.

En su comparecencia ha admitido que España y el conjunto del continente europeo “ha atravesado una situación en la que ignorábamos que era el inicio de la pesadilla europea” y en cuanto a la gestión del coronavirus por parte de su Gobierno ha defendido que “en España el Gobierno acababa de asumir sus funciones”. “Todos los países, antes de la pandemia, nos preparábamos para los juegos olímpicos de Tokio, los países europeos deliberábamos sobre los presupuestos comunitarios y en España el Gobierno acababa de asumir sus funciones y los españoles se preparaban para Semana Santa o para las Fallas”, ha dicho.

Como resumen desde que se declarara el estado de alarma, el presidente ha recordado que “el país se frenó en seco” pues “hubo que parar para contener la vida” y señalado que “fuimos golpeados con dureza, con extrema dureza”, pero, ha reafirmado que “contuvimos la propagación de los virus unidos”. En palabras del presidente, el principal objetivo del Gobierno era el “de frenar el colapso sanitario, frenar la curva de contagios, el objetivo común era el de salvar vidas”, ha dicho. El presidente ha ahondado también en las consecuencias del freno a las actividades esenciales. “Tuvimos que sostener un tejido económico para que estuviera sano, tuvimos que ofrecer un escudo social”. “Es doloroso recordar esos momentos oscuros, en esta oscuridad nadie podía predecir cuando iba a terminar esta pesadilla”, ha lamentado.

En la declaración institucional, sin preguntas de los medios de comunicación, el presidente del Gobierno también ha querido reclamar “unidad” a los partidos políticos en España para levantar el país, y abogó por un entendimiento en Europa porque con “la división” no se puede prosperar. Así, comparó la crisis de 2008 con la actual, y aseguró que la ventaja se encuentra en la “respuesta europea” a través de un plan de recuperación. Para Sánchez el “homenaje más duradero” a los más de “28.000 fallecidos” durante la crisis del coronavirus es “levantar nuestro país desde la unidad”.