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Las Fuerzas Armadas afinan su plan para hacer frente a un rebrote del coronavirus

Los militares cuentan ya con una reserva de material sanitario y de protección para 40 días y están listos para desplegarse en un máximo de 48 horas

Acto de clausura y reconocimiento de la operación 'Balmis'
La ministra de Defensa, Margarita Robles, en el acto de clausura de "Balmis"Eduardo ParraEuropa Press

La madrileña base de Retamares ha sido el marco elegido para celebrar hoy el acto de clausura de la “Operación Balmis” de las Fuerzas Armadas contra el coronavirus. Y es que desde este acuartelamiento, sede del que ha sido el “cerebro” de esta misión, el Mando de Operaciones (MOPS), se gestionaron las cerca de 20.000 intervenciones que llevaron a cabo los efectivos de los dos Ejércitos, la Armada, la Unidad Militar de Emergencias (UME) y la Guardia Real durante 98 días. Un acto que ha estado presidido por la ministra de Defensa, Margarita Robles, quien ha querido recordar, una vez más, que las Fuerzas Armadas “han escrito una página heroica en tiempos de paz”. Sin embargo, tanto ella como el resto de mandos militares que han intervenido en el acto han hecho hincapié en que no hay que bajar la guardia. De hecho, ya trabajan en el plan de contingencia para, en caso de un rebrote, poner en marcha “Balmis II”, para lo que ya tienen prácticamente lista una reserva de material sanitario y de protección para unos 40 días.

Acompañada por el Jefe de Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), general Miguel Ángel Villarroya; el comandante del MOPS, teniente general Fernando José López del Pozo, y la cúpula de los Ejércitos y la UME, la titular de Defensa no ha dejado de agradecer a los militares su labor en esta misión tan atípica “ayudando a los españoles”, apuntando que, lamentablemente, “no hemos podido ayudar a todos”.

Robles ha querido recordar que durante estos 98 días los uniformados han vivido “momentos muy duros, como cuando veíamos el estado de muchas residencias o los hospitales saturados de cadáveres”. Por ello, y para que no se repita una situación así, ha destacado que “el virus sigue ahí y debemos ser conscientes de los riesgos y peligros”. “Esperemos que seamos capaces de pasar pronto esta página, pero si hay un rebrote, allí van a estar las Fuerzas Armadas”, ha apuntado.

Y, sobre todo, como ha venido diciendo en las últimas semanas, la ministra ha recordado la situación de las residencias de ancianos: “España ha de reflexionar sobre lo que ha pasado en las residencias. Es una exigencia de este país que demos una respuesta a nuestros mayores. Hay que plantear este tema muy en serio”.

Junto a Robles también ha intervenido el “director” de la orquesta militar de “Balmis”, el comandante del Mando de Operaciones, teniente general Fernando José López del Pozo, quien ha dado detalles del plan de contingencia que preparan las Fuerzas Armadas para estar preparados y hacer frente a un posible rebrote. “Puedo garantizar que el plan para hacer frente a una posible segunda ola va a estar afinado, lo tenemos prácticamente terminado”, ha apuntado, explicando que se basa “en la experiencia obtenida y en las necesidades identificadas”. La intención, ha dicho, es “elevarlo al JEMAD para su promulgación en julio”.

Y dentro de ese plan, una de las claves es la reserva de material sanitario y de protección (mascarillas, guantes, epis, respiradores, tests...). Tal y como ha comentado, ya está casi completa la reserva operativa (para los efectivos que intervendrían directamente en la operación) y la que se destinaría al resto de efectivos que no participen en ella, como podrían ser los alumnos. En principio, dicho material cubriría las necesidades de unos 40 días.

Pero también ha hablado el teniente general de la reserva nacional y de que el Ministerio de Sanidad “tiene intención de que les apoyemos en la gestión y almacenamiento de esa reserva”.

El teniente general López del Pozo durante su intervención
El teniente general López del Pozo durante su intervenciónEduardo ParraEuropa Press

En cuanto al plan en sí, ha explicado que, básicamente, “reproduce lo que hemos hecho” y “la hipótesis de la que parte es que sea una cosa parecida a la que hemos tenido ahora”. “Estamos preparados desde ayer para intervenir en 24/48 horas”, ha sentenciado, no sin antes avisar de que “hay que tener cuidado con el virus” e instar a los españoles a que “se convenzan de que la inversión en Defensa es realmente útil”.

20.000 intervenciones

“Balmis” ha implicado el despliegue de miles de efectivos al día, que pasaron de los primeros 911 miembros de la UME del 15 de marzo a los más de 8.200 que se contabilizaban en los primeros días de abril, cuando la pandemia golpeaba más duro y las Fuerzas Armadas recibían cerca de 600 solicitudes de ayuda al día. Llegaron a tener lista de espera para actuar.

Durante los 98 días que duró la operación, los militares han llevado a cabo cerca de 20.000 intervenciones en 2.300 localidades de toda España. De esas actuaciones, más de 11.000 han sido descontaminaciones (la petición “estrella”) en puntos críticos, como las residencias de ancianos, interviniendo en 5.300. Además, han desinfectado 3.431 hospitales y 1.339 centros sociales. O más de 150 puertos y 140 aeropuertos, además de apoyar en unas 800 misiones a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, protegiendo centrales nucleares o las fronteras.

También han contribuido a levantar una veintena de hospitales y albergues de campaña, como los de la Fira de Barcelona, el polideportivo de Sabadell o la UCI que montó la Unidad Médica Aérea de Apoyo al Despliegue de Madrid en Ifema. O ayudado a transportar cientos de toneladas de material sanitario o de alimentos para la población más vulnerable, entre otras muchas tareas “atípicas” para los uniformados.

Pero sin duda, la más dura de todas sus misiones fue, además de las actuaciones en las residencias en los días más duros de la pandemia, el traslado de cadáveres a las morgues que improvisó la Comunidad de Madrid y que supusieron un gran impacto para los efectivos, tal y como explicó el jefe de la UME, teniente general Luis Martínez Meijide, en una reciente entrevista en LA RAZÓN.

Eso sólo en la calle, porque también los uniformados han estado desplegados en los centros dependientes de la Inspección General de Sanidad de la Defensa, como son los hospitales militares de Madrid y Zaragoza o el Centro Militar de Farmacia de la Defensa.

Una medalla para los participantes

El Ministerio de Defensa ha confirmado que en las próximas semanas se creará una medalla específica que, “con carácter general, premiará a todos los participantes de la Operación Balmis que reúnan las condiciones requeridas. De esta forma, el Departamento que dirige Margarita Robles responde a una petición que ya hicieron varios partidos en el Congreso de los Diputados, como el PP, que reclamaba una condecoración para los uniformados que han luchado en primera línea durante estos 98 días contra el virus.
Además, Defensa informa también de que mañana, viernes, el Boletín Oficial del Ministerio de Defensa (BOD) publicará las Cruces al Mérito Militar, Naval y Aeronáutico, además de las menciones honoríficas, concedidas a los efectivos que han participado en “Balmis”.