Un homenaje civil “sin precedentes”

La ceremonia de Estado y civil que mañana tendrá lugar en la Plaza de la Armería del Palacio Real como homenaje a las víctimas del coronavirus es calificada por el Ejecutivo como un acto «sin precedentes». Y lo es porque no existían parámetros previos para ello, ya que, aunque se habían celebrado funerales religiosos de Estado, nunca se había organizado una despedida de tantos compatriotas fallecidos. La vocación con la que se impulsa esta ceremonia desde el Gobierno es la de trasladar una imagen de unidad de todos los poderes del Estado, junto con la sociedad civil que ha luchado contra la pandemia. Una forma de agradecer el comportamiento ejemplar que ha mantenido la ciudadanía durante esta etapa tan oscura para nuestro país y, de algún modo, contribuir en lo posible a aliviar y arropar a aquellas personas y familias que han perdido a sus seres queridos sin la posibilidad de despedirse de ellos en condiciones de normalidad.

El acto comenzará a las 9:00 horas y la previsión es que la duración no sea muy extensa, alrededor de 40 minutos, y no está previsto que haya intervenciones más allá de la del Rey, que cerrará el acto, y la de dos representantes –un hombre y una mujer– de la sociedad civil: un familiar de una víctima de la Covid-19 de Madrid y una enfermera de la Vall d’Hebron de Barcelona, dos de las ciudades más castigadas por la pandemia. Para el acto se han cursado más de 500 invitaciones y se cuenta con la asistencia de unas 400 personas: la familia Real, el Gobierno al completo y representantes políticos de todos y cada uno de los niveles de la administración, así como de la sociedad civil: representantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, víctimas, sanitarios, trabajadores esenciales, etc. La presencia al más alto nivel será tanto nacional como internacional, ya que asistirán los presidentes del Consejo, la Comisión y el Parlamento europeo, el Alto Representante de la Unión Europea y el Director General de la OMS. Para salvaguardar todas las medidas de seguridad y distancia interpersonal, se dispondrá a los asistentes en círculo y al aire libre, en torno a un pebetero con una llama en señal de recuerdo.

En la escenografía destacarán la bandera nacional, las banderas de las 17 comunidades autónomas, de la Unión Europea, ONU y OTAN. El acto para los asistentes será narrado por Ana Blanco, que irá dando paso a los distintos acontecimientos, que arrancará con la llegada del Rey y la interpretación del himno nacional. Se encenderá el pebetero por las víctimas y se producirán las intervenciones de la sociedad civil. Después, se iniciará la ofrenda floral, a la que seguirá la intervención del Rey y el acto se cerrará con la lectura de «Silencio» de Octavio Paz por el actor José Sacristán y un minuto de silencio posterior. Entre las ausencias está la del ex presidente del Gobierno Felipe González y los miembros de Vox, que ya anunciaron que no asistirían.

Hoy tendrá lugar una cena en Moncloa a modo de recepción de las autoridades internacionales. Desde el Gobierno anticipan que además de este acto, el Consejo de Ministros tramitará en las próximas semanas la entrega de medallas al mérito civil a aquellas personas que han entregado sus vidas en el ejercicio de sus profesiones para frenar esta pandemia.