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Encuesta electoral: Iglesias se hunde también en las generales y solo sube el PP

El PSOE contiene su caída, y rompe el empate con el PP, pero la derecha suma más que la izquierda. El partido de Pablo Casado crece un 4,4% y 697.982 votos entre 19 y 21 diputados

El fin del estado de alarma está ayudando al PSOE a recuperar posiciones con respecto a la caída en intención de voto que ha ido sufriendo desde el mes de marzo. En junio el PP entraba por primera vez en empate en escaños con el PSOE, en la franja de los 108-111 diputados. El principal partido de la oposición sigue siendo, no obstante, la fuerza que más crece. En el sondeo de julio de Nc Report para este periódico, los socialistas mejoran en su franja más baja y en la más alta para situarse en 110/112 diputados. El PP podría perder uno con respecto a junio, y su tope está en los 110. Aun así, los socialistas se dejarían en estos momentos 773.604 votos en las urnas, con una caída del 1,6 por ciento. El partido de Pablo Casado crece un 4,4 por ciento, y 697.982 votos, entre 19 y 21 diputados.

La izquierda suma 8.457.950 votos. La derecha mantiene prácticamente su electorado del 10-N, ya que el voto que gana el PP es ligeramente inferior al que pierden Ciudadanos (Cs) y Vox. En todo caso, el bloque del centro derecha parece que se estanca en el desconfinamiento a la espera de las consecuencias de la crisis económica. El PP crece en esos 680.009 votos y la suma de la caída de Vox y de Ciudadanos es de 656.565 papeletas. La clave está en los efectos de los reajustes entre siglas y en que al caer el peso de la izquierda, esto hace que con el mismo número de votos crezca la fuerza de la derecha en el porcentaje total y que suban también sus escaños.

En todo caso, igual que ocurría en junio, en esta encuesta la derecha también sigue ganando a la izquierda en votos y en escaños gracias a la recuperación de los populares. El bloque del centro derecha se mueve en el 45,6 por ciento del voto y entre 164-169 diputados. Mientras que la suma de PSOE y Unidas Podemos baja al 37,1 por ciento y 136-139 escaños, frente a los 151 que representan en el Congreso actual.

La evolución del voto confirma que la explosión de la crisis sanitaria coincidió con la caída más fuerte en apoyos del partido del Gobierno, un descenso que ha ido ralentizándose desde que entró en marcha el proceso de desescalada.

Según la encuesta de Nc Report, realizada entre el 14 y el 18 de julio, el PSOE recupera casi 140.000 votos. En mayo, la caída era de 10-12 escaños. En junio, entre 9 y 11. Y en esta última radiografía demoscópica, 8-10.

Por el contrario, Podemos acelera su retroceso bruscamente, sin que su estrategia de erigirse en «padrino» del escudo social limite los efectos del desgaste de unas semanas en las que se han multiplicado las informaciones sobre el «caso Dina». Así, la formación morada, que confirmó su hundimiento territorial en las últimas elecciones autonómicas gallegas y vascas, cae en esta encuesta en 680.009 votos y entre 8 y 9 escaños. Un salto cuantitativo muy relevante: en junio la caída estaba en la horquilla 3-5 y en número de papeletas se quedaba en 309.979. Es el doble, confirmando un derrumbe que no había detectado hasta ahora ninguna encuesta de NC Report desde que se puso en marcha el Gobierno de coalición.

De mantenerse esta tendencia en el tiempo, puede alterar la estabilidad del Ejecutivo.

La debacle del 12-J en Galicia y País Vasco ya provocó como primera reacción unos movimientos que apuntaban a que la parte morada ha abierto el debate sobre si debe radicalicar su posición para intentar recuperar perfil de izquierdas y espacio en la calle.

En el bloque de la derecha, Ciudadanos continúa perdiendo más fuelle que Vox. El partido de Santiago Abascal, de hecho, recorta el descenso que anunciaba el sondeo de junio, después de que se haya ratificado en decisiones tan controvertidas como no acudir ni siquiera al homenaje laico a las víctimas de la Covid-19, que se celebró la semana pasada en Madrid.

Vox podría perder entre 1 y 3 diputados. Mientras que Inés Arrimadas bajaría su suelo electoral a 7-8 escaños, entre 2 y 3 menos de los que obtuvo en las últimas elecciones generales. Aun así, la decisión de la formación naranja es mantener a medio plazo su apuesta por buscar acuerdos con el Gobierno para afrontar la crisis económica y social que deja la pandemia. Desde Cs restan importancia a los sondeos y señalan que los efectos de su «política útil» se medirán a largo plazo. La primera prueba de fuego serán las elecciones autonómicas catalanas, que apuntan para octubre, y donde Ciudadanos será examinada a nivel nacional. Cataluña es la comunidad que les lanzó en todo el territorio y su principal seña de identidad. En junio, Cs caía entre 1 y 3 escaños, y Vox, de 3 a 5 diputados.

El voto independentista se mantiene estable, aunque apunta hacia una movilización en su favor en respuesta a la gestión de la crisis sanitaria y económica. PNV, ERC y JxCat podrían crecer un escaño respectivamente. Tres en total.

Las claves

  • Primer hundimiento de Iglesas. Ningún sondeo le había anunciado un desplome de tal alcance desde que se constituyó el Gobierno de coalición. Cuando estalló la pandemia sufrió mucho más la marca del PSOE. La participación cae en cuatro puntos con respecto al 10-N.
  • Fuga al PSOE. El trasvase de voto confirma cómo el PSOE está engordando a costa de la formación morada. El voto socialista que se va a Podemos se queda en el 0,6 por ciento, mientras que desde Podemos huye a las siglas socialistas hasta un 5,2 por ciento.
  • Los naranjas miran a Génova. Hasta un 22,7 por ciento del votante de Ciudadanos en las últimas elecciones generales asegura ahora que cambiaría su voto a favor del Partido Popular.