Apagón informativo de las vacaciones de Sánchez

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, prosigue sus vacaciones estivales y, desde el pasado viernes por la tarde, se encuentra, junto con su mujer y sus hijas, en el palacio de las Marismillas, en el Coto de Doñana, según han informado a LA RAZÓN fuentes solventes.

Todo lo que relativo al descanso presidencial veraniego está rodeado de un halo de silencio y secretismo, por la incidencia que este tipo de noticias pueden tener en la opinión pública, en un año en el que el coronavirus, lejos de desaparecer mediáticamente, está cada día más presente en el seno de la sociedad española.

Lo único que ha trascendido, al menos de momento, es que Sánchez y su familia llegaron en avión a un aeropuerto cercano y después se trasladaron por carretera y por barco al citado palacio.

En torno a este lugar, como es habitual sea quien sea el presidente del Gobierno, se ha montado el correspondiente dispositivo de seguridad, formado por varios círculos en los que la participación de la Guardia civil, incluidas las unidades especializadas, como el Servicio Marítimo, los buzos de los GEAS, los desactivadores de explosivos TEDAX y la protección de la naturaleza del SEPRONA, juegan un importante papel.

A lo que hay que unir a los agentes encargados directamente de asegurar la zona, como la Agrupación Rural de Seguridad y las patrullas rurales. También está alertado el Servicio Aéreo (helicópteros) por si fuera necesario.

Para el Gobierno, al menos su portavoz, es una magnífica noticia que Sánchez esté en Doñana. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, espera que esta visita suponga «un foco de atención» que atraiga turismo a Andalucía. Y por ello, ha agradecido a Sánchez su presencia en el Parque Nacional de Doñana.

Según trascendió recientemente, el Gobierno se ha gastado casi 9.000 euros en la instalación, en plena pandemia, de mosquiteras en el Palacio de Las Marismillas, según informó El Independiente. También ha empleado unos 28.000 euros en el «acondicionamiento del palomar» del palacio.

Dentro del Parque Nacional de Doñana, la finca de Las Marismillas es utilizada con carácter institucional del Estado, en el que se incluyen las vacaciones presidenciales. Tiene una superficie de 10.286 hectáreas y se halla en el término municipal de Almonte (Huelva).

De hecho, en el pasado fue utilizada como residencia vacacional por anteriores presidentes del Gobierno como Felipe González, José María Aznar, José Luis Rodríguez Zapatero y el ex líder de los populares Mariano Rajoy.

Sánchez y su familia ya han estado en la finca en años anteriores. En 2018 recibió allí a la canciller alemana, Angela Merkel.

Desde el Palacio de la Moncloa se guarda un absoluto mutismo sobre los detalles de las vacaciones del presidente que este año, por la pandemia del coronavirus, se ha hecho más intenso.

En teoría, tras haber despachado ya con Su Majestad el Rey en Mallorca, su primer acto oficial es el Consejo de Ministros del próximo 25 de este mes. Se desconoce si se entrevistará, durante su estancia en Doñana, con representantes socialistas de la zona.

Los primeros días de sus vacaciones los pasaron Sánchez y familia en la isla de Lanzarote, en una complejo residencial que fue donado por el Rey Juan Carlos, que la había recibido como regalo del rey Hussein de Jordania.