Carmen Calvo

El Gobierno crea una comisión para censurar a los medios de “desinformación”

El ministerio de Relaciones con las Cortes de Carmen Calvo alerta de que la libertad de expresión se ve “amenazada” y asegura que examinará el “pluralismo” de los medios de comunicación y podrá “adoptar decisiones” contra las “desinformaciones”

La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, interviene durante una sesión de control al Gobierno en el Senado
La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, interviene durante una sesión de control al Gobierno en el SenadoPOOL. Ángel Navarrete. El MundoPOOL. Ángel Navarrete. El Mundo

El Gobierno ha puesto en marcha su plan para luchar contra las “fake news”. Este era uno de los objetivos que perseguía el ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y la Memoria Democrática, dirigido por Carmen Calvo, con el fin de establecer unos criterios claros para actuar contra la “desinformación”.

El Ejecutivo alerta de que la la libertad de expresión “se ve amenazada por la difusión deliberada a gran escala y sistemática de la desinformación que persigue influir en la sociedad con fines interesados y espurios”. Es por ello que ha publicado esta mañana en el Boletín Oficial del Estado un “procedimiento de actuación contra la desinformación aprobado por el Consejo de Seguridad Nacional”. Se respalda en las directrices que la Unión Europea ha llevado a cabo a través del Plan de Acción contra la Desinformación de 2018.

La orden publicada por el ministerio de Relaciones con las Cortes señala que la comisión monitorizará la información y podrá solicitar colaboración a los medios de comunicación para perseguir la “difusión deliberada, a gran escala y sistemática de desinformación, que persiguen influir en la sociedad con fines interesados y espurios”. Según refleja la norma, habrá varios niveles de actuación, desde el análisis temprano para detectar esas “desinformaciones" hasta, si es necesario, "adoptar decisiones y coordinar una respuesta “política-estratégica”.

Entre sus objetivos, el Gobierno -que será el máximo controlador del nuevo organismo- reconoce que para fortalecer la libertad de expresión y el debate democrático. Se examinará la “libertad y pluralismo de los medios de comunicación”. Se incrementará la “integridad electoral” y se abordará la “a desinformación de manera coherente, considerando la necesidad de examinar los medios que se utilizan para interferir los sistemas democráticos, basándose en las acciones sobre la lucha contra la desinformación relacionada con la COVID-19”.

El Ejecutivo ha diseñado una estructura concreta que estará compuesta por el Consejo de Seguridad Nacional, el Comité de Situación, la Secretaría de Estado de Comunicación, la Comisión Permanente contra la desinformación, las autoridades públicas competentes y, por último, el sector privado y la sociedad civil.

El Gobierno se asegura además su control total en su lucha contra la desinformación al designar como competentes en la Comisión Permanente a órganos dependientes del Gobierno. Estará coordinada por la Secretaria de Estado de Comunicación y presidida por el director del Departamento de Seguridad Nacional, e integrada por representantes de Defensa, Interior, Exteriores, y del Ministerio de Asuntos Económicos.

El objetivo principal de este comité de reciente creación será el de identificar qué informaciones son “fake-news”, evaluar si resultan una amenaza pública y decidir si se debe o no actuar ante esa “desinformación”, al igual que diseñar campañas de contrainformación para combatirlas.