Andalucía

Inmigración

Críticas a Interior por permitir el viaje en avión de 200 inmigrantes desde Canarias a Granada sin PCR

Esta semana aterrizaron cuatro vuelos en Granada con inmigrantes que quedan libres

Un nuevo bandazo en la política migratoria del Gobierno de coalición desata las críticas y quejas oficiales. Al menos 200 inmigrantes aterrizaron en Granada procedentes de los campamentos improvisados y hoteles turísticos de Canarias en la última semana. En medio del cierre perimetral de la comunidad de Andalucía para evitar los contagios de covid-19 y durante un puente de diciembre atípico debido a las restricciones a la movilidad en todo el país, cuatro aviones en los que viajaban, de media, 75 inmigrantes ilegales llegaron al aeropuerto granadino sin control y sin un destino concreto para sus pasajeros que «están deambulando por la ciudad».

Varios vídeos –divulgados por el Sindicato Unificado de Policía (SUP)– hicieron saltar todas las alarmas. En ellos se pueden ver largas colas de inmigrantes en un aeropuerto momentos antes de embarcar. Además, en otro de ellos, uno de los viajeros contesta a unas preguntas y asegura que no ha sido sometido a ninguna PCR antes de coger el vuelo. Llama la atención este detalle porque desde mediados de noviembre es obligatoria una prueba PCR para todos los viajeros que lleguen a un aeropuerto español con el objetivo de controlar la expansión del virus justo antes de las fiestas navideñas.

Según explican fuentes policiales a LA RAZÓN desde el pasado lunes –hace hoy nueve días– llegaron cuatro vuelos al aeropuerto de Chauchina (Granada). El primero de ellos lo hizo el lunes a las 10:30; el jueves aterrizaron dos vuelos, uno a las 19:45 y otro a las 20:15; y un cuarto vuelo lo hizo el sábado a las 15:15. Una vez que los inmigrantes pisaron suelo granadino ninguna organización humanitaria u organismo público estaban esperándoles. Al contrario, al desembarcar los inmigrantes se desplazaron por sus propios medios desde la terminal al centro de la ciudad o incluso hacia otras zonas desconocidas. Y aquí está la base de la crítica de las autoridades locales. Mientras que todo el país tiene que permanecer confinado en su Comunidad y no puede desplazarse a otras, estas personas pudieron moverse de manera descontrolada.

«No parece muy normal que en una pandemia como la que estamos sufriendo en este momento, el ministro monte un vuelo, mande inmigrantes al interior de la Península, los suelte en Granada, como los ha podido soltar en otros sitios, y los deja a su libre albedrío» y además «sin avisar», criticó ayer el alcalde de Granada, Luis Salvador.

Según explican fuentes policiales a LA RAZÓN, los inmigrantes para viajar necesitan dos cosas: estar totalmente identificados y, por otro lado, un permiso de entrada excepcional por un número de días concretos que emite la Comisaría General de Extranjería y Fronteras. Eso solo para coger un avión. Debido al cierre perimetral tienen que llevar un justificante o autorización que emite cualquier administración y comprueban las autoridades antes de que suban en el avión. Es decir, todos estos controles se realizan en origen. Cuando pisan la Península se presupone que los han superado y que cumplen con la normativa vigente.

El tono de las críticas fue elevándose a medida que avanzó la jornada de ayer. Al descontento del alcalde de la ciudad, –que anunció que su Ayuntamiento va a elevar una queja al respecto ya que asegura que nadie les avisó de que llegarían estas personas a la ciudad– hay que añadir las críticas del vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín, que calificó de «deslealtad» la actitud de Interior.

El vicepresidente andaluz insistió ayer en que el Gobierno central no ha «comunicado absolutamente nada» a la Administración andaluza sobre el vuelo llegado al aeropuerto de Granada, con lo que criticó la «deslealtad» del Ejecutivo central del PSOE y Unidas Podemos.

En declaraciones a Canal Sur, Marín señaló que tras visualizar él mismo los vídeos, los remitió al consejero de Presidencia e Interior, el popular Elías Bendodo, porque el Gobierno andaluz tenía conocimiento de vuelos de este tipo hacia los aeropuertos de Sevilla y Málaga, pero no se le había «comunicado absolutamente nada» de este vuelo a Granada procedente de Canarias.

Fuentes de Interior reaccionaron ayer a lo divulgado por el Sindicato Unificado de Policía, asegurando que «las reubicaciones se realizan de forma puntual y siempre priorizando perfiles de protección internacional y de colectivos vulnerables». En este sentido, destacaron que las personas que llegan de forma irregular a las costas canarias son personas en situación irregular y que por lo tanto no disponen de documentación acreditativa, «por lo que su traslado a otras comunidades autónomas debe de ser autorizado». Además, concluyeron que «se realizan controles documentales en origen para comprobar este extremo. Toda reubicación, por tanto, se realiza de forma controlada y con todas las garantías sanitarias».

Desde el sindicato, denunciaron ayer que el Gobierno «está llevando a cabo una gestión de los flujos migratorios que es de todo menos ordenada y responsable». Aseguraron que, pese a negar que se estuviera permitiendo el movimiento de migrantes llegados a Canarias en patera por otras zonas de nuestro país, «lo cierto es que están llegando a la península en vuelos regulares como el de Granada. Y se está haciendo con oscurantismo y opacidad».