Reforma

Iglesias quiere una «doble vuelta» en la reforma del CGPJ

Intenta sortear las críticas sobre la politización de la Justicia de la UE logrando los votos de la mitad de los partidos del Congreso

El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, durante una sesión de control al Ejecutivo
El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, durante una sesión de control al EjecutivoEUROPA PRESS/R.Rubio.POOLEuropa Press

Unidas Podemos busca alternativas para tratar de renovar la cúpula del Consejo del General Poder Judicial arrinconando al PP y contando con el beneplácito de Europa, quien, en las últimas semanas ha criticado la reforma presentada por ambos socios de la coalición para renovar doce de los 20 vocales de la cúpula del Consejo General del Poder Judicial rebajando la mayoría de tres quintos a mayoría absoluta en segunda votación. Europa abroncó al Gobierno al entender que con sus intenciones politizarían el órgano y podría interferir en la independencia del poder judicial del legislativo.

Es por ello que ahora el partido del vicepresidente trabaja en una mayoría reforzada en el Congreso de los Diputados para garantizar la pluralidad en la elección de la cúpula de los jueces, una especie de «mayoría doble».

Los morados se encuentran, no obstante, a la espera de que PSOE y PP desencallen la negociación en ciernes, pero, el acuerdo aún queda lejano debido a la condición inamovible de los populares de excluir a Pablo Iglesias –partido que forma parte del gobierno- de las conversaciones para renovar el órgano de los jueces. Confía Iglesias en que el PSOE no les deje fuera de la negociación al contar con un acuerdo tácito por parte del Gobierno de que formarán parte de la elección de los jueces. De hecho, el propio ministro de Transportes, José Luis Ábalos, dejó claro esta semana que no había posibilidad de vetar a los de Iglesias en las negociaciones por su integración en la coalición. Sin embargo, Unidas Podemos no desea la foto final con el PP y quiere elevar a los socios de investidura y de los Presupuestos a la negociación, es decir que ERC y Bildu participen de la elección de los vocales.

Ante el hecho de que la negociación se alargue el socio minoritario de la coalición se mueve ya y busca otras alternativas a la reforma de la ley del CGPJ que no se tope con el veto de Europa. El partido plantea que la mayoría necesaria para renovar el órgano de los jueces tenía sentido «durante el bipartidismo» pero «ya no» y que una mayoría absoluta reforzada «garantiza la pluralidad del CGPJ». Para esa mayoría reforzada estudian incluir una enmienda en la ley presentada con el PSOE para reformar el sistema de elección de los magistrados del Consejo en la que, en la segunda votación en el Congreso de los Diputados, además de la mayoría absoluta necesaria para elegir a los doce vocales judiciales, se necesitaría el apoyo de la mitad de los grupos del Parlamento. En la Cámara habitan 10 grupos, por lo que bastaría con cinco. De esta manera, Unidas Podemos apuesta por volver a emplear la fórmula para la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado, que contó con 188 «síes». De este modo, el Congreso daría luz verde a un nuevo órgano con el respaldo de los siguientes grupos –además de con la mayoría absoluta–: PSOE, Unidas Podemos, ERC, Bildu y el Grupo Plural (BNG, Compromís, Más País y JxCAT), por ejemplo. Aquí el deseo explicitado de Iglesias de que en el órgano judicial también participe el partido independentista y el heredero de Batasuna. «El Estado es de todos, tienen que participar», aseguró hace una semana.

Asegura el partido que con la mayoría reforzada «se garantizaría de nuevo la pluralidad» del órgano de los jueces. Refrendan, además, que «hay algunos juristas que defienden que una cláusula en este sentido podría ser interesante», según respaldó el propio portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique en una entrevista hace un mes.

Los morados son conscientes de que la renovación del CGPJ debe ser liderada por los socialistas, y es por ello que respetan los tiempos de su socio de Gobierno. Recuerdan que saben que los temas de Estado corren a cargo del PSOE, pero también es cierto que siempre que el ala socialista presenta reparos para dar luz verde a una pretensión de los morados, estos despliegan una hoja de ruta de presión pública y acaban acelerando los plazos. De hecho, esperan, que en el próximo periodo de sesiones pueda introducirse esta enmienda dentro de la ley presentada, dado que es una manera más ágil que, presentar ahora una nueva iniciativa.