Cámara Alta

Dos senadores de ERC juran el cargo por “la libertad de los presos”

Adelina Escandell y Josep María Reniu han acatado la Constitución en el Senado en catalán, “por imperativo legal”, lo que ha provocado el abucheo de la bancada del PP

Tras las elecciones catalanas, han vuelto a tomar protagonismo los acatamientos sui generis de senadores independentistas en la Cámara Alta. Se trata, en concreto, de Adelina Escandell Grases y Josep Maria Reniu, ambos de ERC, que han bajado esta tarde desde sus escaños al centro del hemiciclo, ante un ejemplar de la Carta Magna y a la pregunta reglamentaria formulada por la presidenta, Pilar Llop, sobre si juraban o prometían acatar la Constitución, ambos han añadido un preámbulo en catalán que ha generado revuelo.

Se han escuchado abucheos procedentes de la bancada del grupo popular cuando han comenzado su breve coletilla, en catalán, para reclamar “la libertad de los presos y presas políticos, por el retorno de las personas exiliadas y hasta que no lleguemos a la constitución de la república catalana”. Escandell, sin abandonar la lengua catalana, ha añadido “por imperativo legal, sí prometo”, en tanto que su compañero Reniu, que lo ha hecho tras ella, ha usado esas mismas palabras, pero en castellano, para finalizar su particular fórmula de acatamiento, también semejante a la de la senadora, informa Efe.

Se trata de unos preámbulos similares a los que en la sesión constitutiva de la vigente legislatura emplearon los independentistas catalanes, y que fueron dados por válidos por la presidenta Pilar Llop, al igual que lo ha hecho hoy. En concreto, tras escuchar sus palabras, la presidenta les ha comunicado que “habiendo acatado la Constitución” habían quedado investidos de la “plena condición” de senadores.

Del mismo modo lo ha hecho con los otros tres senadores autonómicos que hoy han prestado acatamiento al comienzo de la sesión plenaria: los socialistas José Manuel de la Vega, Antoni Poveda y Lorena González. Además, otros tres más, Pau Furriol, de ERC, y Assumpció Castellví y Josep Lluís Cleries, de Junts per Catalunya, han acatado mediante la presentación de documento notarial, según ha anunciado la presidenta al hemiciclo.

Recurso de PP y Vox al Constitucional

El empleo por senadores y diputados de coletillas, apostillas, preámbulos y declaraciones no previstas en los reglamentos del Congreso y el Senado suscitaron al inicio de la legislatura protestas formales y recursos al Tribunal Constitucional de PP y Vox que el tribunal acaba de admitir a trámite. El pasado 21 de abril el pleno del TC admitió por unanimidad los recursos de amparo -dos del PP y uno de Vox- contra los acuerdos de la Presidencia y Mesa del Congreso y el Senado de diciembre de 2019 que dieron como válidos los juramentos que fueron cuestionados por ambas formaciones políticas.

Anteriormente ya había admitido otros recursos previos de PP y Cs contra acatamientos de la anterior legislatura, entre mayo y junio de 2019. No era la primera vez que senadores independentistas se pronunciaban con este tipo de fórmulas, en catalán o euskera, en las sesiones constitutivas de otras legislaturas, logrando también el aval de la Presidencia de la institución.

Así, en la sesión constitutiva del Senado del 13 de enero de 2016, con Pío García-Escudero (PP) como presidente de la Cámara, una senadora del PNV prometió, en euskera y castellano, “por imperativo legal”, una senadora de Podemos, María del Pino Alemán, prometió “acatar esta Constitución y trabajar por cambiarla. Nunca más un país sin su gente y sus pueblos”.

También la senadora de IU Vanessa Angustia acató “por imperativo legal” y añadió en gallego “y sin renunciar a mis principios republicanos, defender al pueblo gallego y poner la institución al servicio de las clases populares”, y el vasco de Podemos José Ramón Arrieta incluyó un preámbulo en euskera antes de su “sí, prometo”. En aquella sesión hubo varios pronunciamientos más en euskera, catalán y gallego que los senadores nacionalistas y de formaciones de izquierda antepusieron a sus promesas de acatamiento y que, como hoy, fueron acogidas con aplausos por sus compañeros y rumores por parte de otros a los que no convencieron sus fórmulas