Memorial
El Rey subraya que la memoria de las víctimas es “esencial para evitar cualquier legitimación del terrorismo”
Don Felipe y Doña Letizia inauguran el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo en Vitoria con la visita al zulo donde Ortega Lara permaneció secuestrado 532 días
Los reyes, Don Felipe y Doña Letizia, han presidido la inauguración del Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo en Vitoria, el Banco de la memoria inspirado en diferentes memoriales de la Segunda Guerra Mundial y en otros museos como el del Holocausto. El Memorial ha creado fuentes orales y, sobre todo, ha realizado una larga tarea de recopilación de la labor hecha durante años por otros protagonistas, unas veces anónimos, víctimas, policiales, medios de comunicación (diarios, revistas o cadenas de radio) y asociaciones.
Durante la inauguruación, los Reyes visitaron la recreación del zulo donde el funcionario de prisiones, José Antonio Ortega Lara permaneció secuestrado por la banda terrorista ETA durante 532 días. Don Felipe, que mide 1,97 se ha tenido que agachar cuando ha entrado en dicho zulo ya que el tejado, en su parte más alta, solo alcanzaba el 1,80 y el funcionario de prisiones apenas podía ponerse de pie salvo en el eje central de lo que fue su ataud en vida.
Reconocimiento a las víctimas
Tras la visita, Don Felipe transmitió el reconocimiento por el trabajo y el esfuerzo desarrollados para que se haya podido inaugurar finalmente de manera oficial el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo y su exposición permanente. Destacó la importancia del nuevo Banco de la memoria que “permitirá disponer de un espacio propio para seguir cumpliendo y aún en mejores condiciones los altos fines que tiene encomendados”: Preservar y difundir los valores democráticos y éticos que personifican las víctimas del terrorismo, construir la memoria colectiva de las víctimas, y concienciar al conjunto de la población en la defensa de la libertad y de los derechos humanos y contra el terrorismo, dijo.
Preservar la memoria
El Rey subrayó la importancia de “preservar la memoria de las víctimas” como un “ejercicio de respeto y de justicia, pero también un elemento esencial para que las generaciones venideras sean siempre conscientes de la gravedad de lo sucedido, del dolor que el terrorismo provoca a toda la sociedad y a sus víctimas en particular” y recordó que esa memoria “constituye un elemento esencial para evitar cualquier legitimación o justificación del terrorismo”. Además, el monarca apuntó la “obligación que toda sociedad y todo Estado tiene de combatir” el terrorismo “con la Ley, con sus capacidades policiales, de investigación y de cooperación internacional, y con la labor jurisdiccional de los tribunales de Justicia. Y que, con todo ello, “hagan lo posible para evitar que vuelva a ocurrir”.
Con el Centro Memorial se da un “gran paso” para preservar lo que ocurrió, ya que expone los hechos que “todos recordamos, porque los hemos vivido, y a cuyo conocimiento tendrán acceso, con rigor, las generaciones que han tenido la fortuna de no sufrirlos. Nos permitirá también profundizar en el conocimiento de la actual amenaza”, dijo Don Felipe.
Asimismo, resaltó la importante labor que hacen las asociaciones y fundaciones acompañando a las víctimas con el fin de “preservar su memoria”. “La memoria es pues imprescindible para preservar la verdad, la dignidad y la justicia, los pilares en los que debe basarse el reconocimiento de las víctimas”.
Felipe VI se paró a mencionar al terrorismo yihadista sin embargo, no hizo ninguna mención directa y específica a las víctimas de ETA a pesar de que el Centro Memorial recoge en su totalidad el horror producido por la banda terrorista.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el lehendakari, Iñigo Urkullu, así como el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y el director del Centro Memorial, Florencio Domínguez, acompañaron a los Reyes en esta inauguruación además de asociaciones y fundaciones de víctimas del terrorismo.
Un amplio perímetro policial les separaba de unas decenas de personas que se han congregado en las cercanías con banderas de España y han lanzado vítores al Rey. También se han escuchado algunos pitidos y gritos de “Marlaska dimisión” o comentarios de ¡Vaya tres! en relación al trío del titular de Interior, Sánchez y Urkullu que charlaban instantes antes de la llegada de Felipe VI.
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