Villarejo planeó una extorsión al “abogado de referencia de Rajoy”

José Manuel Villarejo urdió un plan para extorsionar al abogado Javier Iglesias, según consta en una carta que escribió desde la prisión de Estremera (Madrid) el empresario Alfonso Pazos, quien actuaba como “intermediario” del comisario jubilado. Este preso, según el magistrado que investiga la “operación Kitchen” en la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, procedía “bajo las instrucciones” del presunto cabecilla del denominado por Anticorrupción “clan policial mafioso”. Y con la misiva pretendía obtener información del letrado, a quien el comisario jubilado consideraba una persona muy cercana a Mariano Rajoy.

Y por eso Pazos escribió el 16 de septiembre de 2020 una carta desde la prisión en la que proponía a un abogado, que no tiene ningún vínculo con Villarejo, que amenazara a Javier Iglesias para que este le facilitara información del “caso del ático” del expresidente madrileño Ignacio González.

En el manuscrito, al que ha tenido acceso LA RAZÓN, Pazos señala que, “una vez puesto en contacto con mi cliente, este, haciendo memoria, ya que su situación no le permite el acceso a ningún tipo de documentación”, debería ponerse en contacto con Iglesias, a quien Villarejo denomina con el alias de “El Largo”: “Otra persona a la que se puede acceder y tiene todo esto documentado es Javier Iglesias. Como letrado no soltará prenda, pero como también se ha reunido muy a menudo con mi cliente, también está ‘inmortalizado’ y por ahí se le puede presionar”.

“Intermediario” de Villarejo

El considerado por el instructor como “intermediario” del polémico comisario en la “comercialización del material ilícito en poder de la organización”, completa su alusión al que fuera abogado del empresario condenado en el “caso Gürtel” Alfonso García-Pozuelo Asins y también del fallecido extesorero del PP Álvaro Lapuerta, aludiendo a su presunta implicación en el espionaje a Luis Bárcenas: “El momento actual es muy propicio ya que está cerca de ser investigado en varias piezas, entre ellas ‘Kitchen’ por ser el abogado de referencia del PP, de Soraya [Sáenz de Santamaría] y de [Mariano] Rajoy”, prosigue la carta.

Las fuentes consultadas enmarcan el inicio de la denominada “Operación Kitchen” en la reunión que mantuvo el abogado Iglesias con Luis Bárcenas en la cárcel de Soto del Real el 8 de julio de 2013. El extesorero del PP se sintió amenazado, tal y como declaró el 21 de diciembre de 2020, -en una pieza secreta del “caso Kitchen”. Sin embargo, Iglesias niega haber amenazado al extesorero. Tampoco reconoce haber actuado como “emisario” del PP en la prisión madrileña. Iglesias no está imputado en el “caso Tándem”, en el que defendió a la mujer de Villarejo, Gemma Alcalá.

Tal y como consta en una grabación, Villarejo se dirigió en 2017 a Iglesias para trasladarle a Rajoy que el comisario José Luis Olivera debería ser nombrado director adjunto operativo (DAO) de la Policía. No logró su objetivo.

Mantenía contactos con Rajoy

En el audio, que fue grabado el 17 de enero de 2017, Villarejo confirma a sus interlocutores que Iglesias mantenía contactos con Rajoy: “Que ‘El Largo’ tiene acceso al asturiano [Rajoy]...lo sé, eso es cierto. Yo, a través de la Cospe [María Dolores de Cospedal], cuando se lo presenté. Estuve una vez en una reunión, únicamente he estado una vez, pero lo he visto”, dice el comisario.

En su declaración como testigo, el inspector de la causa de la “Caja B” del PP, Manuel Morocho, aseguró que Iglesias, como abogado defensor del constructor Alfonso García-Pozuelo, condenado en la causa, reclanmó el 11 de febrero de 2013 que le entregara todos sus informes y que se apartara de sus funciones.

Aparece en las trece agendas

Las trece agendas de Villarejo descubiertas por los agentes de la Unidad de Asuntos Internos (UAI) de la Policía durante el segundo registro de la vivienda del cabecilla de la “Kitchen”, que tuvo lugar el 23 de octubre, también reflejan numerosas alusiones a Javier Iglesias, quien aparece en otro sumario vinculado a Villarejo. Según declaró el empresario de origen indio Harishchandra Tarachand Varma, él recurrió a Iglesias, y este a su vez al comisario, para saber si un vehículo que le seguía era de la Policía.

La Policía descubrió que Villarejo, utilizando un nombre falso, alertó a Varma de que estaba siendo seguido por la Policía. El entonces inspector Andrés Gómez Gordo, imputado en “Kitchen”, envió un oficio policial al juez de Fuenlabrada que se encargaba del caso en el que aseguró que Villarejo había mantenido esta reunión con el ciudadano indio en calidad de agente encubierto. El instructor no le imputó por revelación de secretos.