Frente Polisario

Ghali, al juez (I): “De ninguna manera renuncio a la inmunidad diplomática”

LA RAZÓN accede a la declaración desde el hospital del líder polisario, investigado por torturas: “No soy un violador, sino un simple luchador por la independencia de mi pueblo”

“No soy ni torturador, ni violador, sino un simple luchador por la dignidad y la soberanía e independencia de mi pueblo y de los pueblos que puedo ayudar”. Brahim Ghalinegó el pasado 1 de junio al juez Santiago Pedraz las denuncias por torturas investigadas en la Audiencia Nacional. Horas antes de regresar de madrugada a Argel, el líder del Frente Polisario declaró por videoconferencia desde el hospital San Pedro de Logroño durante poco más de una hora en relación a las dos querellas presentadas contra él (una de ellas ya ha sido archivada por el magistrado).

LA RAZÓN ha accedido a los audios de esa comparecencia -incorporados a ambas diligencias- durante la cual Ghali no duda en señalar a Marruecos como el muñidor de las dos denuncias presentadas contra él (una de ellas fue reabierta ya con el líder polisario en España, adonde llegó el pasado 18 de abril enfermo de Covid con el aval del Gobierno de Pedro Sánchez por motivos “humanitarios”).

“¿Por qué es usted objeto de esta querella?”, le preguntó su abogado, Manuel Ollé, al concluir su interrogatorio. “Sencillo -contestó Ghali-. Desde la invasión de Marruecos del territorio fue ministro de Defensa y dediqué totalmente mi tiempo, y más que mi tiempo, a la guerra, al campo de batalla, a las derrotas del Ejército marroquí. Y ésa fue una de las razones”.

Nada más empezar el interrogatorio -durante el cual contesta a las preguntas en un correcto español-, Ghali refutó las acusaciones contra él recogidas en la primera de las querellas por las que fue preguntado -las supuestas torturas de las que le responsabiliza el activista saharaui de origen español Fadel Breica en los campamentos de Tinduf (Argelia) entre junio y noviembre de 2019-. “No tiene ninguna base. Honestamente la acusación es injustificada -aseguró-. Tengo mucho que hacer como jefe de Estado, como presidente de la República, para dedicarme a seguir los problemas de un individuo de la sociedad saharuaui”.

El investigado -que dejó claro que “de ninguna manera” estaba dispuesto a renunciar a su supuesta inmunidad diplomática como presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD)- dijo no conocer de nada a Breica (contrariamente a lo que éste afirmó ante el juez) y negó incluso que en abril de 2019 (cuando según el denunciante fue detenido en Tinduf por sus críticas a la dirección del Frente Polisario) se encontrara en los campamentos. “Normalmente”, manifestó, en esas fechas estaba en “los territorios liberados”.

Del mismo modo, negó que ordenara amenazar al activista. “Claro que no”, replicó a preguntas del fiscal del caso, Pedro Martínez Torrijos. “¿Tuvo noticias de si Fadel Breica estuvo detenido en los territorios de Tinduf?”, quiso saber el representante del Ministerio Público. “No, me informó el abogado del desarrollo después, pero es imposible que esté al tanto de lo que le ocurre a cualquier ciudadano. Es todo un pueblo, todo un Estado”, aseguró añadiendo que se trata de algo normal “en cualquier estado a nivel internacional”.

Ghali defendió que el denunciante fue juzgado por un tribunal saharaui y resultó absuelto. Y desmintió que recibiera comunicación alguna del enviado personal del secretario general de Naciones Unidas para el Sahara Occidental respecto a Fadel Breica. “-No, no, jamás. Nuestra correspondencia con el secretario general de Naciones Unidas son todas relativas a las violaciones de derechos humanos en los territorios ocupados por Marruecos”, recalcó.

La RASD, reconocida “por 84 estados”

En respaldo de su pretendida inmunidad diplomática como jefe de estado de la RASD, el secretario general del Frente Polisario -que se definió también como “jefe supremo de las Fuerzas del Ejército Popular Saharaui”- expuso que un total de 84 países (no nuestro país ni tampoco la ONU) reconocen oficialmente a la RASD, que -subrayó- “es miembro fundador de la Unión Africana”.

Después de que el fiscal rechazara la adopción de medidas cautelares contra Ghali, proponiendo únicamente que facilitase un domicilio y un móvil “donde se le pueda contactar”-como finalmente acordó Pedraz desestimando la prisión provisional que reclamó por riesgo de fuga la acusación particular-, la defensa del líder polisario calificó de “disparatada” la petición de privación de libertad para su cliente.

“Esta querella ni siquiera se debió admitir en su día”, se quejó Ollé, para quien la “única imputación” de hechos concretos contra Ghali en la querella se refiere a que un mando del Frente Polisario trasladó a Breica que aquél le ordenó personalmente “cesar toda actividad o abandonar los campamentos”. “¿En qué artículo del Código Penal se puede subsumir esta conducta en un hecho penal?”, se preguntó el letrado de forma retórica.

Su abogado: “Llegó con su pasaporte”

“Estamos ante una querella cuya única y exclusiva finalidad -subrayó- es política: atacar al Frente Polisario por parte de Marruecos, que es quien está detrás, atacar al presidente Ghali en la lucha de más de 40 años por el derecho a la autodeterminación”. El abogado negó que existiese peligro de fuga “si ha comparecido voluntariamente”. Y añadió un dato de interés respecto a su alta en el hospital de Logroño (donde se registró con una identidad falsa a nombre de Mohamed Benbatouche):”Otra cosa será cómo le registraron en el hospital, porque llegó con su pasaporte de Brahim Ghali”.

“Ha relatado que ni siquiera le conoce, que no dio ningún tipo de orden, que un jefe de Estado no está para preocuparse de cosas mundanas, como cualquier jefe de Estado, que él tiene otros cometidos muchísimo mayores”, hizo hincapié al exponer sus argumentos en contra de la adopción de medidas cautelares.

La acusación: “Entró de manera extravagante”

Al mismo tiempo, reiteró que Ghali no ordenó “realizar ningún tipo de acción” contra Fadel Breica porque en el Sáhara Occidental “hay separación de poderes, delegada la jurisdicción por Argelia”. “Allí fue juzgado, tuvo un juicio justo y, además, se le absolvió de los delitos por los que había sido acusado”, insistió el letrado ante el juez.

La letrada de Fadel Breica, María José Malagón, reclamó sin éxito la prisión provisional de Breica ante “el hecho fundado de que puede fugarse” dado que, recalcó, “su propia documentación, tanto a la entrada como al ingresar en el hospital, demuestra claramente que está fugado” de la Justicia. “Es obvio que cuando existe riesgo de fuga es porque su situación personal es absolutamente compatible con ese riesgo”, añadió la abogada. “No podemos afirmar con qué documentación ha entrado, pero sí podemos decir que ha entrado de una manera al menos extravagante y que su colaboración con la Justicia ha sido, como poco, llamativa”.