El despacho de Baltasar Garzón sale en defensa de Delgado tras el “caso Stampa” y amenaza con denunciar

El despacho de abogados que dirige ahora el exjuez Baltasar Garzón ha decidido dar un paso al frente en toda la polémica suscitada por el «caso Stampa» en la Fiscalía General del Estado y salir en defensa de la independencia de Dolores Delgado. Ilocad S.L (nombre del bufete) ha enviado un burofax a la Asociación de Fiscales (AF) en el que amenaza con emprender acciones legales por la petición que han hecho a Delgado para saber si sus letrados ejercen la defensa de algunos de los imputados en «Tándem» o caso Villarejo. Dice el bufete de la actual pareja de la Fiscal General que la asociación no está «legitimada» para acceder a esta información secreta que, además, la cabeza del Ministerio Público no tiene por qué conocer.

Después del Consejo Fiscal del pasado 24 de noviembre en el que se trató el «caso Stampa» (para saber si la mano derecha de Delgado maniobró para dilatar la investigación al fiscal Ignacio Stampa y así no renovarle al frente de la causa de «Tándem»), la AF hizo varias peticiones: acceder al expediente completo de Stampa -una solicitud que han reiterado este jueves- y saber si el despacho de Garzón ejercía la defensa de alguno de los investigados en el marco de esa causa judicial sobre Villarejo. Esta última petición pretende conocer si, como dice Stampa, Delgado tenía intereses «personales» en el proceso y, por eso, quiso apartarlo de Anticorrupción. Y esta última petición es, también, la que ha hecho que el despacho del exjuez se revuelva contra la asociación.

En una misiva de tres páginas, el despacho dice no entender cómo una asociación quiere acceder a «datos profesionales de abogados, vulnerando con ello el derecho al secreto profesional». Hablan de «intromisión ilegítima» y señalan, además, que esta información nada tiene que ver con Delgado porque ella no está personada en el proceso. Como «se están analizando» acciones judiciales que se puedan emprender «en defensa de nuestros intereses legítimos [los de Illocad]», el despacho pide a la asociación que les remita dos documentos: una copia certificada de las actas en las que ellos deciden solicitar a la Fiscal General dicha información; y otro documento sobre si «en alguno de los congresos y reuniones previos» se han debatido «cuestiones referidas al ejercicio profesional de abogados que tengan relación de amistad, familiaridad o cualquier otro tipo análogo de afinidad con fiscales o jueces en ejercicio».

Esta carta llega después de que el pasado fin de semana la Asociación de Fiscales, a la que por cierto acaba de afiliarse Consuelo Madrigal (exfiscal general del Estado), celebrara un congreso en cuyas conclusiones pidieron la dimisión de Delgado. La AF ha emprendido un camino del que no quiere apartarse para conocer el expediente completo de la investigación a Stampa. Una senda paralela a la emprendida por el propio Stampa con el mismo objetivo en los tribunales.

El despacho del exjuez termina la carta advirtiendo que toda esta polémica, que se viene prolongando semanas, está generando un daño reputacional al despacho que repercute en «un evidente perjuicio económico, una merma» en su actividad «con una injustificada presión» hacia sus clientes y potenciales clientes. Por eso, dejan la puerta abierta a demandas.