Crisis en Ucrania

Albares pide unidad política «como en la UE y en la OTAN»

El ministro de Exteriores apuesta por el diálogo pero advierte a Rusia de que «no se negocia bajo amenaza»

La escalada de tensión por la crisis en Ucrania se ha abierto paso en la actualidad política nacional, casi por delante de la negociación de la reforma laboral. El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, comparece en Comisión de Exteriores para explicar la posición de España en el marco de la OTAN ante el conflicto ucraniano. Tras participar en el Congreso de Ministros de Asuntos Exteriores de la UE el pasado lunes, el jefe de la diplomacia española dejó claro que el Gobierno sigue apostando por la vía del diálogo para resolver la actual crisis, si bien insistió en que hay ciertas «líneas rojas» que no se pueden aceptar y una de ellas es negociar «bajo la amenaza».

En este sentido, Albares apeló a la unidad parlamentaria al asegurar «que logramos unidad europea y transatlántica» y que, ahora, por lo tanto, el Ejecutivo aspira a obtener la unidad con todas los partidos para responder a esta crisis con una sola voz. «Si hemos conseguido la unidad a 27 en Europa y en la OTAN, no debería haber dificultades para conseguir la unidad» insistió.

De hecho y en relación a la posición española ante el conflicto, el ministro reiteró que la postura del Gobierno es muy clara y que se basa en las «cuatro D»: diplomacia, desescalada, disuasión y diálogo. No obstante, recordó que hay que estar preparado para cualquier escenario y que se actuará «de manera decidida» en caso de la escalada vaya a más, siempre, poniendo por delante al diálogo y diplomacia por delante aunque advirtió de que «hay una amenaza para la integridad territorial y para la soberanía de Ucrania».

En opinión del ministro,el despliegue ruso en la frontera con Ucrania«no se justifica por motivos defensivos» mientras que las demandas en materia de seguridad formuladas por Rusia no buscan sino «aislar a Ucrania de Occidente y bloquear la ampliación de la OTAN» además de tratar de recuperar la antigua esfera de influencia soviética.

«Todo esto es inaceptable, viola la legalidad internacional y es una amenaza para la paz», destacó el ministro, para quien el hecho de que se siga dialogando con Rusia en distintos foros no deja de ser una «buena noticia en sí misma». Además, aprovechó para reiterar el llamamiento al diálogo a Moscú en pro de lograr la paz, el objetivo último. En este sentido, advirtió a Moscú de que llegado el caso se topará con «consecuencias económicas masivas y altos costes», con sanciones por parte de la UE coordinadas con sus socios de fuera. Aunque no quiso entrar en detalles concretos sobre las sanciones, sí aseguró que será «un paquete masivo, contundente y muy creíble».

Despliegue español

Aclaró que el Gobierno no ha procedido a modificar los despliegues previstos en el seno de la OTAN, «más allá de algún adelanto puntual», subrayando que dicho despliegue se realiza conforme a las peticiones de los aliados y «con respeto absoluto de las autorizaciones parlamentarias».

Tanto el despliegue de tropas en Letonia desde 2017, como la próxima participación de cazas Eurofighter en misión de policía aérea en Bulgaria y el envío de tres buques de guerra se producen en territorio de la OTAN y aguas internacionales, y no en Ucrania, si bien «envía un mensaje claro de firmeza y de rechazo a las intimidaciones», destacó el titular de Exteriores.