Memoria Histórica

El general Varela pierde su estatua a caballo en San Fernando (Cádiz) 74 años después

El Ayuntamiento socialista retira al bilaureado militar del espacio público

Un operario, durante las labores para la retirada de la estatua ecuestre dedicada al general Varela en San Fernando (Cádiz)
Un operario, durante las labores para la retirada de la estatua ecuestre dedicada al general Varela en San Fernando (Cádiz)Román RíosAgencia EFE

Solo era cuestión de tiempo que la estatua ecuestre del general Varela en San Fernando (Cádiz) fuera eliminada del espacio público. Ayer, poco antes de las siete de la mañana, se produjo el desmontaje de la efigie que se levantó en 1948, convirtiéndola en un elemento más de la Plaza del Rey de la localidad, donde hoy es ya un recuerdo en la memoria local isleña.

Los operarios encargados de trasladar la estatua venían trabajando en los últimos días en separar la figura de Varela a caballo de la piedra del pedestal donde se asentaba, con radiales y taladro, hasta que se ayer culminaron las últimas maniobras para esta tarea. Previamente se habían desmontado las figuras alegóricas y la fuente. Un grúa sostenía con unas cinchas la figura del general y su caballo, movidos después a una caja para su traslado a un almacén.

Es el desenlace esperado desde que un Pleno ordinario de enero de 2016 aprobara la propuesta de retirada por el grupo Sí se Puede San Fernando con los votos a favor del PSOE, Ciudadanos y la edil no adscrita Inmaculada Pérez. El PP votó en contra y el PA se abstuvo.

No obstante, la cuenta atrás comenzó cuando hace más de 15 años se planteara por primera vez en el Ayuntamiento de San Fernando, al señalar directamente a la obra la comisión creada para concretar la aplicación de la Ley de Memoria Histórica creada en el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

Sin embargo, la alcaldesa socialista, Patricia Cavada, ha enmarcado la retirada en los cambios diseñados para la plaza y no en el cumplimiento de la legalidad. Según sus palabras, «durante los últimos años hemos visto la necesidad de actuar para la conformación de este espacio público y hoy hemos dado un paso más en la transformación de la Plaza del Rey, por lo que quienes vean una batalla ideológica hoy, les digo que lo que hay es una batalla por el urbanismo».

La decisión ha generado polémica dentro y fuera de la localidad isleña. Muchos vecinos lamentan que se haya quitado lo que consideraban «un símbolo» de la ciudad, «un elemento más del paisaje urbano que se perdía en la memoria» de sus «vivencias» a lo largo de décadas.

Últimos trabajos para el desmontaje del conjunto de Aniceto Marinas, ayer en San Fernando
Últimos trabajos para el desmontaje del conjunto de Aniceto Marinas, ayer en San FernandoRomán RíosAgencia EFE

Algunos de sus defensores abogaban por su permanencia apelando al valor artístico del conjunto, obra de Aniceto Marinas –autor de la imagen de Velázquez que preside la puerta del Museo del Prado, la estatua de Eloy Gonzalo en Cascorro o el Monumento al Sagrado Corazón en el Cerro de los Ángeles–, al contemplar la Ley de Memoria Histórica una posible excepción por esta vía, pero no ha sido posible.

El destino de la estatua en bronce se desconoce por el momento. El Ayuntamiento isleño ha propuesto a Defensa reubicarla en instalaciones militares o en el Museo Naval, aunque la decisión inmediata ha sido guardarla en un almacén municipal.

José Enrique Varela, Hijo Predilecto de la Ciudad desde 1923, obtuvo dos laureadas de San Fernando en África, donde sufrió siete heridas en combate. Al finalizar la Guerra Civil fue nombrado ministro del Ejército, aunque la adscripción carlista de Varela no le gustaba a Franco, de quien había sido compañero inseparable durante la contienda. De la confianza inicial entre ambos da idea el hecho de que fuera el propio Varela el que impuso la Cruz Laureada de San Fernando, máxima distinción militar, a Francisco Franco en 1940, como reconocimiento al triunfo en la Guerra Civil.