Defensa

Un general español ya manda en la misión de la ONU en Líbano

El general Aroldo Lázaro estará al frente de más de 10.000 cascos azules de 46 países durante los próximos dos años

El general español Aroldo Lázaro Sáenz (d) sustituye al general italiano Stefano del Col (i)
El general español Aroldo Lázaro Sáenz (d) sustituye al general italiano Stefano del Col (i)ZIPIAgencia EFE

Desde hoy, España está al mando de la misión de Naciones Unidas en Líbano (UNIFIL, por sus siglas en inglés). Durante los próximos dos años, el general de División Aroldo Lázaro Sáenzestará al frente de los más de 10.000 cascos azules de 46 paísesque conforman esta fuerza de pacificación multinacional, en la que nuestro país participa desde septiembre de 2006. Y la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha querido estar presente en la toma de posesión, que se ha celebrado en el cuartel general de la operación, en la ciudad de Naqoura. Allí, ha señalado que “hoy es un día importante porque se reconoce el compromiso de España con la paz”

“Que la ONU elija a un general español es una satisfacción”, porque “España es un país firmemente comprometido con la paz”, ha destacado la titular de Defensa, quien ha querido mostrar (al igual que la semana pasada en Bulgaria con la OTAN) el compromiso de España con la seguridad internacional y con este tipo de misiones, sobre todo en un momento crítico por la invasión rusa de Ucrania y la guerra. No en vano, nuestro país es uno de los mayores contribuyentes a operaciones de la UE y la OTAN, y uno de los que más militares despliega en ésta de Líbano. De hecho, el contingente español crecerá de los 620 actuales a algo más de 710, pues la asunción del mando implica un aumento de efectivos tanto de apoyo y protección del comandante como para otras capacidades, como la unidad de helicópteros de transporte del Ejército de Tierra que se desplegará.

Durante su alocución, el general Lázaro ha querido hacer hincapié en que, pese a la difícil situación en el área de operaciones y las dificultades que vive Líbano, “me empeñaré en que el fin de las hostilidades se mantenga”. Tras hablar de “tiempos desafiantes”, ha vaticinado que este mandato “puede ser un gran paso para establecer las condiciones para una solución política y diplomática” y lograr “un futuro seguro y próspero” para Líbano.

Segundo español al mando

Con la entrega de la bandera por parte del comandante saliente, general italiano Stefano Del Col, Lázaro se ha convertido oficialmente en el segundo general español en mandar esta misión. El anterior fue elgeneral Alberto Asarta (hoy diputado nacional de Vox) entre 2010 y 2012. En los últimos años, nuestro país intentó en dos ocasiones situar a un general español al frente de UNIFIL (2016 y 2018), pero Iaeronaves AB-212 del Batallón de Helicópteros de Maniobra VI talia e Irlanda fueron las naciones elegidas entonces.

Con este mandato, el contingente español en el país aumentará en cerca de cien efectivos (la mayoría de ellos en Naqoura), ya que hay que cubrir una serie de puestos en el staff del cuartel general, entre ellos una treintena como apoyo al general Lázaro en su Estado Mayor o una unidad de protección.

Junto a ellos se desplegarán los miembros de la unidad de helicópteros del Ejército de Tierra. Se trata de dos (BHELMA VI), con base en Los Rodeos (Tenerife). Un aparato que ya se desplegó en UNIFIL durante el anterior mandato de España.

Otras aportaciones

Pero, además de todo esto, España quiere aportar y ya ha ofrecido a la ONU un equipo de Cooperación Cívico Militar (CIMIC), otro de Operaciones Psicológicas, una unidad de Caballería y otra de Defensa Anti-Aérea con un radar Raven..

Las Fuerzas Armadas españolas participan en UNIFIL desde septiembre de 2006, cuando llegaron los primeros 560 efectivos. Desde entonces, nuestro país ha tenido una paticipación muy destacada y está al frente del Sector Este desde la base “Miguel de Cervantes” de la localidad de Marjayoun. El contingente español ha llegado a alcanzar los mil uniformados desplegados, aunque desde hace varios años se mantenía, hasta ahora, en torno a los 650, que serán unos 750 con la nueva responsabilidad. Además del citado acuartelamiento, los militares españoles se encargan de dos de los 55 puestos de observación repartidos por el área de operaciones: el 9-64 y el 4-28, situados en una tensa zona, muy cerca de los Altos del Golán. En este último es donde falleció en 2015 el cabo Francisco Javier Soria al ser alcanzado por fuego israelí mientras vigilaba desde la posición. En total, 15 militares españoles han perdido la vida en la misión.

Más de 25.000 uniformados han pasado por la misión en estos más de 15 años, en los que Defensa ha invertido más de 2.300 millones de euros.