Entrevista

Pedro Sánchez: «El mayor regalo que podíamos dar a Putin es la división»

El presidente del Gobierno descarta el envío directo de armas a Ucrania y evita aclarar si es una imposición de Podemos

«No tenemos nada contra Rusia, contra su gente, lo que estamos haciendo es defender nuestro sistema de valores, la democracia, la libertad, los derechos humanos», ha defendido esta noche el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Telediario de La 1, donde destacó la gravedad de lo que se está viviendo en el Este de Europa. «Estamos siendo testigos de una amenaza a la seguridad», alertó, aunque descarta el envío de armas a Ucrania de manera unilateral. Todo el material defensivo que se haga llegar «se hará bajo el paraguas de la UE», afirmó en la entrevista de TVE.

Según explicó, a día de hoy, el soporte español a los ucranianos se realiza por tres vías: la ayuda humanitaria -que se canalizaa través de Polonia y Moldavia-, el envío de chalecos antibalas y cascos, y con la participación en el Fondo Europeo para la Paz, provisto de 500 millones de euros, de los que 450 son para armamento y 50 para ayuda humanitaria.

Preguntado sobre si España enviará armamento como otros países -Alemania ha proporcionado a Volodímir Zelenski 1.000 lanzacohetes y 500 misiles tierra-aire-, Sánchez ha indicado que lo vehiculará a través del mecanismo aprobado la víspera por la UE, que calificó de «inédito», e incidió en que nuestro país es el «cuarto en donación» a ese fondo, que hasta ahora se ha usado siempre para apoyar misiones europeas de formación como las de Mali o Mozambique.

El presidente evitó responder a si el rechazo a apoyar con armamento a Kiev obedece a las diferentes sensibilidades respecto a este conflicto en el seno del Ejecutivo expresadas por Podemos e Izquierda Unida.

Anunció Pedro Sánchez que «las sanciones contra Rusia se van a ver agravadas en los próximos días en todos los ámbitos» y se mantendrán hasta que abandone «toda Ucrania» y garantice la integridad territorial y la soberanía nacional de ese país.

Destacó que «prácticamente todas las formaciones políticas con las que hemos podido hablar están de acuerdo con la posición que está manteniendo el Gobierno de España y también Europa». Ha recalcado el jefe del Ejecutivo la importancia de la firmeza. «El mayor regalo que le podríamos dar a Putin es la división, la separación... la no unidad».

Advirtió el presidente de que «no podemos depender en un 40 por ciento del suministro de gas en Europa» de un país como Rusia, que amenaza la estabilidad occidental, y apuntó como solución la «transición ecológica» para tender la mano a Francia de cara a establecer una interconexión de gas e hidrógeno verde.

Acusó a Putin de pretender “un cambio tectónico” de las relaciones internacionales, y se mostró convencido de que ha cometido un “error estratégico” al no haber previsto la “unidad” de la Unión Europea y la “contundencia” de las medidas aprobadas.

Anunció que el Gobierno tomará medidas para que los 100.000 ucranianos que residen en España puedan vivir y trabajar legalmente en el país y acceder a los servicios públicos como cualquier otro ciudadano.

Además, confirmó, por un lado, que no tiene intención de aumentar el presupuesto de Defensa, como va a hacer por ejemplo Alemania tras la ofensiva rusa, poniendo en valor las leves subidas de los últimos años. Y, por otro, que España no cumplirá el objetivo al que se comprometieron los aliados en la Cumbre de Gales de 2014 de alcanzar el 2% del PIB en gasto de Defensa para 2024, año en el que, dijo, nuestro país se situaría en torno al 1,22%.

En el ámbito nacional avanzó que el miércoles, en su comparecencia ante el pleno del Congreso, pedirá a los grupos parlamentarios unidad ante las medidas que se pueden aprobar en España para hacer frente a las consecuencias de la crisis. No aclaró si eso podría suponer una bajada de impuestos de los carburantes, pero ante el hecho de que la comisión de expertos se incline por subir esos impuestos, subrayó que esos trabajos son previos “y “todo se tiene que adaptar”.

Espera que Feijóo deje la “descalificación permanente”

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, espera que el sucesor de Pablo Casado al frente del PP, que todo indica será el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, abandone la estrategia de la “descalificación permanente” y deje de poner en duda la “legitimidad” de su Ejecutivo. Sánchez comentaba así la nueva etapa que se abre en el PP con la marcha de Casado y el congreso extraordinario del 2 y 3 de abril. Sin querer entrar en cuestiones que solo afectan al PP, sí aprovechó para agradecer la posición que ha adoptado el todavía líder del PP sobre la crisis de Ucrania en el que ha dado un apoyo “rotundo, claro e incuestionable” al Gobierno de España. Preguntado también por el futuro proyecto político de su vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, y si ello puede restar expectativas electorales al PSOE, el presidente del Gobierno se limitó a valorar el “extraordinario” trabajo que esta desarrollando Díaz en el Ejecutivo. Sánchez quiso garantizar que las elecciones serán “en tiempo y forma” y cuando tocan, esto es, dentro de dos años porque, ha subrayado, en un contexto tan complejo, es necesario mantener la estabilidad política.