XX Congreso del PP

Ayuso utiliza su cuota en la dirección para blindar la victoria en su congreso

Génova convocará de inmediato el cónclave que la aupará a presidir el PP regional

Pablo Casado e Isabel Diaz Ayuso se saludan ayer en Sevilla en presencia del ex presidente del Gobierno Mariano Rajoy
Pablo Casado e Isabel Diaz Ayuso se saludan ayer en Sevilla en presencia del ex presidente del Gobierno Mariano RajoyAlberto R. RoldánLa Razón

La estructura popular se duele de las heridas internas que ha dejado el amplio plan de renovación implementado por Pablo Casado y su equipo. Y el nuevo presidente, Alberto Núñez Feijóo, ha optado por entrar con precisión de bisturí, evitar pulsos con los dirigentes autonómicos en la confección de los máximos órganos de dirección, Junta Directiva y Comité Ejecutivo, y centrar sus poderes en la cúpula que llevará en el día a día el partido. En este reparto de cuotas, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha utilizado la proporción que le correspondía por su peso territorial para colocar en la cúpula nacional a «peones» hábilmente seleccionados con la vista puesta en su congreso regional.

Por el pacto alcanzado con Feijóo, la presidenta sabe que la intención de la nueva dirección nacional es convocar cuanto antes los congresos regionales que están pendientes de celebrar. En el choque con el anterior equipo, Casado decidió retrasar el Congreso del PP de Madrid y utilizarlo como arma contra Ayuso. El retraso tenía como objetivo buscar la manera de controlar la organización madrileña para que no quedara en manos de Ayuso.

Feijóo ya comunicó a la presidenta que el congreso se convocará de inmediato y que él deja el camino libre para que se pronuncie la militancia madrileña y Ayuso, como es de esperar, asuma la Presidencia regional. Ante este examen, Ayuso ha tenido la precaución de promover a piezas clave para ella, por ser los representantes del partido en algunos de los municipios más grandes. Así explican en el PP que haya favorecido a Judith Piquet, portavoz en Alcalá de Henares; o también a José Manuel Zarzoso, portavoz del PP en Parla. La portavoz en Fuenlabrada, Noelia Núñez, ya fue propuesta como portavoz adjunto del PP en la Asamblea de Madrid. Fuenlabrada es otra bolsa muy importante de votos para Ayuso en su congreso. Alfonso Serrano, portavoz del PP en la Asamblea, es señalado como la influencia en la sombra de los descartes de la presidenta para decidir su cuota territorial en la Junta Directiva Nacional del PP.

Nombramientos pendientes

Feijóo presidirá hoy la primera reunión del nuevo Comité Ejecutivo, y ahí hará públicos los nombres con los que completará el organigrama de Génova: vicesecretarías y secretarías de áreas. Además de las tres portavocías parlamentarias. En la oposición, el peso de las portavocías parlamentarias se reduce al mínimo ya que el presidente nacional es el que ejerce de portavoz para los grandes temas. Su ausencia del Congreso desplazará, además, el cuerpo a cuerpo con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a otros ámbitos políticos y mediáticos.

Sí es clave la vicesecretaría de Organización, pero la elección de un coordinador general de tanto peso como el que tiene Elías Bendodo, consejero de Presidencia andaluz, diluye también la importancia de este cargo. Más relevante será la persona que Feijóo elija para representarle en el Parlamento Europeo. Esteban González Pons está muy bien conectado en Bruselas y acumula esa experiencia de la que tanto habla el recién elegido líder del partido.

La nueva cúpula abre el interrogante de cómo será la convivencia de la bicefalia entre la secretaria general y el coordinador general. Pero los futuros procesos electorales resolverán el dilema. Bendodo dejará Andalucía después de las autonómicas para centrarse en el trabajo en Génova, y la secretaria general, Cuca Gamarra, se perfila como candidata en La Rioja para las elecciones de mayo. El adelanto de las elecciones andaluzas vuelve a estar otra vez en boca del partido: habrá que ver el alcance del “efecto Feijóo” y la evolución de la incertidumbre política y económica del momento actual.

Saludo fugaz entre Casado y Ayuso

Pablo Casado se despidió oficialmente del PP como su presidente el viernes con un emotivo discurso, pero también estuvo presente en la clausura del cónclave. Allí saludó afectuosamente a Feijóo y a los barones autonómicos. Antes, el ya expresidente popular había coincidido en el vestíbulo con la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. Ambos regalaron a las cámaras un beso fugaz. Sin más conversación ni gestos de complicidad, –tras la crisis–, cada uno puso rumbo a su destino más inmediato, que era el de acudir al resultado de la votación de Feijóo. Y así se perdieron el rumbo entre las peticiones de «selfies» de los militantes presentes.