Tragedia en la frontera: los centros sanitarios de Nador registran ya la cifra de 31 muertos

Noticias facilitadas esta tarde por fuentes marroquíes a LA RAZÓN indican que el número de muertos refistrados en los centros sanitarios de Nador como consecuencia del asalto al vallado de Melilla de ayer se eleva a 31. Las citadas fuentes que se basan en datos facilitados desde medios sanitarios indican que más personas podrían fallecer en las próximas horas y que hay algunos que han perdido la vista.

Tal y como adelantó este periódico. durante el intento de salto al vallado de Melilla, se produjeron enfrentamientos en territorio marroquí que se han saldado con el fallecimiento de cinco agentes (tres militares, un policía y un gendarme) y varias decenas de subsaharianos. Según han informado a LA RAZÓN fuentes conocedoras del asunto, la cifra de fallecidos podría rondar los 45.

Esta noche, Rabat ya reconoce 23 muertos mientras que las Asociaciones de Derechos Humanos elevan la cifran hasta 37, con la advertencia de que la cifra puede aumentar en las próximas horas.

El asunto de la cifra final de víctimas está por determinar porque las que se están dando son las que fallecen en centros hospitalarios y no se habla de las que pudieron morir en el campo, en la vaguada en la que cayeron accidentalmente decenas de inmigrantes y que son a los que se referían las fuentes de LA RAZÓN a medio día del viernes, cuando este periódico dio la primicia de lo que se ha convertido en una tragedia.

La activista y fundadora Caminando sin Fronteras, Helena Maleno, asegura que la entidad “puede confirmar 37 jóvenes fallecidos” (a los que habría que sumar dos agentes). Además, ha denunciado que “las víctimas” de este suceso han “agonizado durante horas bajo la cruel mirada de aquellos que debían socorrerles y no lo hicieron”. “Los trágicos sucesos del 24 de junio de 2022 en la frontera entre Nador y Melilla, en Marruecos, son un violento recordatorio del fracaso de las políticas migratorias basadas en la seguridad. Los 27 muertos y los cientos de heridos tanto del lado de los migrantes como de las fuerzas policiales marroquíes son el símbolo trágico de las políticas europeas de externalización de las fronteras de la Unión Europea (UE), con la complicidad de un país del Sur, Marruecos”, señala..

De momento, se desconocen detalles de las circunstancias en las que se han producido las muertes, pero ya se había advertido de que los enfrentamiento de los inmigrantes con los agentes días pasados eran de una extraordinaria violencia.

En tierra española hubo 106 personas heridas, concretamente 49 agentes de la Guardia Civil y 57 inmigrantes, de los cuales tres tuvieron que ser trasladados al Hospital Comarcal. Fuentes de la Delegación del Gobierno en Melilla informaron de que las lesiones que han sufrido los 49 agentes de la Guardia Civil son de carácter leve, salvo complicación. Además, cuatro vehículos sufrieron daños en carrocería y rotura de lunas por el lanzamiento de piedras. Finalmente, fueron 133 los inmigrantes que han accedido a Melilla en este intento de entrada.

Entre 800 y 2.000 inmigrantes de origen subsahariano habían intentado entrar ilegalmente en Melilla en la última semana. Lo habían evitado hasta ahora las Fuerzas de Seguridad marroquíes, con el resultado de casi 200 agentes heridos, pero esta mañana unos 220 (de los que unos 70 han sido rechazados en frontera) han logrado protagonizar un salto en la zona del Barrio Chino.

Este numeroso grupo, según había publicado LA RAZÓN, se encontraba escondido en los bosques próximos a Melilla, cerca de Nador, y estaban perfectamente organizados. En sus enfrentamientos con los agentes marroquíes, se habían empleado con una gran violencia.

Hachas y radiales

Por su parte, la Asociación Española de la Guardia Civil (AEGC) señaló que había sido “un nuevo asalto extremadamente violento donde los que trataban de pasar a Europa venían equipados con una radial para cortar una de las puertas de acceso al barrio chino y con hachas. Un nuevo asalto al que los pocos guardias civiles que protegían el perímetro poco han podido hacer, salvo poner en riesgo su propia integridad”.

“Prueba de ello es que a esta hora hay más de 40 agentes en urgencias con diferentes politraumatismos: una veintena pertenecientes a las patrullas territoriales y seis del GRS. Agentes que han recibido pedradas, rompiéndoles los cascos y alguno con mordiscos”.

“Aun a riesgo de resultar reiterativa, seguirá reclamando al ejecutivo más personal para la frontera de Europa con el Magreb y con más razón en la actualidad ya que han quitado las “concertinas” sin tener un plan B. Parece que cuando uno está parapetado detrás de un despacho oficial no siente peligro, pero el peligro existe y son los guardias civiles los que en cada asalto (y son cada vez más violentos, hoy con una radial) ponen en riesgo su vida. Cuando el riesgo se transforme en luto tendrán que responder por su responsabilidad en esta inacción”.