Salvar al “soldado” “Antza”

Expertos antiterroristas, consultados por LA RAZÓN, ven en los esfuerzos, legítimos por otra parte, de salvar de imputaciones en atentados de ETA a Mikel Albisu, “Mikel Antza”, que fuera jefe del “aparato político” de la banda, un esfuerzo adicional dado el ascendiente que, en su opinión, tiene sobre los sucesores de dicho “brazo político”.

Es cierto que los trabajos de los defensores se centran también en los otros cabecillas, a los que, con toda lógica, se pretende imputar en la inducción de los atentados porque ellos eran los que daban las órdenes; pero en el caso de “Antza”, su historial le precede y resulta difícil creer que carece de influencia sobre el mundo proetarra.

Es una figura respetada dentro de ese sector ya que, entre otras funciones, era el jefe del subaparato “Hanes”, encargado de las negociaciones con el Gobierno de turno, que tan buenos resultados le ha dado a ETA y su entorno. Asimismo, era uno de los jefes de “Halboka” (gestión y dirección del “Colectivo de presos”), “Hanes” (negociación); y “Zabalkunde” (edición de las publicaciones internas de ETA)

Albisu ejerció la dirección del “Aparato Político” de la organización terrorista desde mediados de 1994, por lo que a partir de esta fecha pasó a formar parte de su “Comité Ejecutivo”. Dicharesponsabilidad se prolongó de forma ininterrumpida hasta el 3 de octubre de 1994, cuando fue detenido en Salies de Bearn (Francia) en una operación propiciada por la Guardia Civil.

Para realizar esas labores utilizó principalmente el alias de “Antza”, y en menor medida los de “Chupachus”, “Mixa” y “Kala”, según fuentes del Servicio de Información de la Benemérita (SIGC). Tras la detención de la cúpula dirigente de ETA en Bidart (Francia), en marzo de 1992, “Antza” fue uno de los dirigentes de la banda que consiguió reorganizarla estructural y operativamente.

Esa nueva “Dirección” consiguió poner en marcha la nueva estrategia de desestabilización. Y, según las citadas fuentes, “Antza” habría participado en la toma de decisión colegiada de cometer atentados enmarcados en dicha estrategia. Como responsable del “Aparato político” de ETA, le correspondió diseñar la estrategia “política” de la organización terrorista y coordinar su actuación con los organismos y estructuras de su entramado de apoyo.

Era de su competencia participar en la definición de la línea “política” más adecuada en cada coyuntura y aprobar, en el seno del máximo órgano de dirección de ETA (“Comité ejecutivo”, “ZUBA”, “Dirección”), la estrategia que en cada momento debiera determinar la consiguiente acción “militar”.

Así se deduce del contenido del procedimiento judicial francés relativo a su detención, en el que consta la abundante e importante documentación relacionada con el “Aparato político” de ETA incautada en la vivienda de Salies de Bearn (Francia) en la que fue detenido.

Participó en reuniones orgánicas relacionadas con el “Aparato de relaciones internacionales” de ETA-IA, estructura que dependía del “Aparato político” y a las que asistieron individuos encargados de las estructuras de los distintos organismos del complejo de apoyo a ETA (izquierda abertzale).

En abril de 1994 y a comienzos del verano de 1996 mantuvo sendas reuniones orgánicas con varios dirigentes de la izquierda abertzale (IA), entre ellos Javier Alegría y Mikel Zubimendi, relacionadas con la actividad política de la izquierda abertzale ya que entre las “competencias” de Albisu se encontraba el control “político” de ETA y de la IA.

Con estos precedentes cuesta creer que se ha desvinculado totalmente de la IA, que hoy representa Sortu, dentro de EhBildu, todo ello dentro de la legalidad.

En octubre de 1994 participó como instructor en el “cursillo” de adiestramiento a los miembros del comando de “liberados” (a sueldo de la banda) “Nafarroa”. En octubre/noviembre de 1994 tuvo lugar una reunión orgánica en Francia a la que asistieron por parte de ETA dos dirigentes de la organización terrorista, uno de ellos “Antza”, con José Manuel Jurado, responsable de la organización juvenil Jarrai en la Comunidad Foral de Navarra. En esa reunión se trataron asuntos eminentemente políticos (situación política y la de la de la izquierda abertzale).

A partir de marzo de 1995, mantuvo citas orgánicas cada tres semanas con José Domingo Aizpurúa, “Pitxas de Usúrbil”, responsable del “Aparato de makos” (cárceles), estructura que dependía del “Aparato político” de ETA. En abril de 1997 mantuvo una cita orgánica en Biarritz (Francia) con Manuel Olaizola, a quien le pidió que colaborara con la organización terrorista trayendo de África un cargamento de armas.

En la vivienda de Salies de Bearn (Francia) en la que fue detenido, fue incautada abundante documentación que evidenció su responsabilidad en la dirección del “Aparato Político”. A este respecto, entre sus funciones destacaba la redacción y difusión de las comunicaciones de la organización terrorista (comunicados, notas de prensa, entrevistas), labor fundamental para conseguir réditos propagandísticos y transmitir a su militancia cuál era la actividad que realizaba la banda para conseguir sus objetivos.

La incautación de 165 comunicaciones públicas de ETA (comunicados, notas de prensa y entrevistas), difundidas entre enero de 1992 y el año 2003, permite vincular a este cabecilla con la dirección del “Aparato Político” puesto que una labor tan importante como la de elaborar los comunicados y notas de prensa, y conceder entrevistas, así como la difusión pública de todas ellas, solo la podría ejercer el responsable del mencionado “Aparato”. También mantuvo relaciones internacionales con movimientos revolucionarios de la órbita de ETA.

Elaboró análisis políticos sobre el País Vasco, formaciones políticas nacionalistas vasco-españolas (Batasuna, Aralar, PNV) y vasco-francesas (Abertzaleen Batasuna), sindicatos nacionalistas (ELA, LAB), asociaciones pacifistas, partidos políticos españoles, etcétera.