Encuesta

La economía, determinante para decidir el voto de los españoles en las próximas elecciones

Un 82% de los encuestados considera que afectará «mucho o bastante» en las próximas elecciones generales, previstas para finales de 2023

Vista de las mesas electorales ya preparadas para la jornada electoral del domingo
Vista de las mesas electorales ya preparadas para la jornada electoral del domingoFermín CabanillasAgencia EFE

Tanto Pedro Sánchez como Alberto Núñez Feijóo son conscientes de que la variable que previsiblemente decante el resultado de las elecciones generales de diciembre de 2023 (cuando está previsto que se celebren) sea la economía. Lejos parecen quedar ya otras variables, como el «procés» o la corrupción. El último sondeo de NC Report para LA RAZÓN así lo confirma: el 82,8% de los encuestados consideran que la economía afectará «mucho o bastante» en las próximas elecciones. Tan solo un 13,5% creen que afectará «poco a nada».

Además, es una opinión muy transversal, aunque algo más extendida entre los votantes de unos partidos que otros: el 90% de los electores del PP y Vox sí consideran que la economía afectará «mucho o bastante», mientras que entre los votantes de Podemos cae al 85% y entre los del PSOE al 76%. También es una opinión más extendida entre los más jóvenes (entre 18 y 34 años es un 90%) que entre los mayores de 55 años (78%), según la encuesta, realizada entre el 30 de agosto y el 2 de septiembre con 1.000 entrevistas.

Encuesta NC Report
Encuesta NC ReportTeresa Gallardo

Con el estudio demoscópico en la mano y la delicada situación que atraviesa nuestro país, con una inflación disparada (sí que es cierto que lejos de los niveles de paro de la anterior crisis y todavía hay crecimiento del PIB), tanto el presidente del Gobierno como el líder del PP se están volcando en el ámbito económico. En este sentido, los populares cuentan con una clara ventaja en este terreno porque han conseguido mucha credibilidad durante sus años de gobierno (tanto con los años de crecimiento de José María Aznar como con la salida de la crisis con Mariano Rajoy), mientras los socialistas, todo lo contrario: muchos españoles tienen en la retina el hundimiento de la economía con el PSOE en la Moncloa en 2008.

Tanto Feijóo como Sánchez llevan tiempo marcando su agenda económica: el líder popular, que nada más llegar a Génova, envió un programa de 41 páginas con medidas para afrontar la actual situación (para reducir el gasto burocrático, reducir algunos impuestos, rediseñar los fondos europeos e impulsar reformas estructurales), y algunas de ellas las ha acabado asumiendo Moncloa (la rebaja del IVA en el gas y la luz); mientras, el líder socialista busca lavar la imagen del PSOE en el ámbito económico empuñando la bandera de hacer políticas sociales con responsabilidad fiscal (aunque desde que entró a gobernar en 2018 ha aumentado la deuda pública en 300.000 euros), demonizando al PP y cómo se salió de la crisis de 2008 frente a cómo está actuando él ahora con la pandemia y la guerra de Ucrania y «podemizando» su discurso con una cruzada contra determinados sectores económicos.

La economía, por tanto, se va a convertir en un elemento determinante para los españoles. Más que las elecciones municipales y autonómicas de mayo, aunque también parece que pueden marcar el sentido del voto de los electores: según la encuesta, un 76% de los entrevistados consideran que los resultados sí influirán en la situación política. Tan solo un 17% cree que no. En cualquier caso, lo que sí parece que tienen claro los españoles es que el calendario electoral parece inamovible y todo apunta a que las generales serán en diciembre de 2023, tal y como corresponde: un 77% de los encuestados descarta que Sánchez vaya a adelantar elecciones.

Por tanto, quedan casi 15 meses por delante de pugna entre Sánchez y Feijóo por vencer en las elecciones. De momento, ha tomado la delantera el líder del PP, a quien todas las encuestas dan como ganador. Su talante moderado y el viraje hacia el centro que ha impuesto en las filas populares ha surtido efecto y está arrebatando también mucho votante a un PSOE más radicalizado, que viene «podemizando» su discurso en los últimos meses (en el enésimo giro de Sánchez) con ataques a la «derecha política, económica y mediática» que se ha traducido, de momento, en una declaración de guerra a la banca y a las energéticas con la creación de un impuesto extraordinario.

Encuesta NC Report
Encuesta NC ReportTeresa Gallardo

El endurecimiento del tono de Sánchez también ha ido aparejado de un realineamiento con la mayoría de la investidura, de Esquerra y Bildu. No obstante, según el sondeo, un 50% de los propios votantes del PSOE creen que ninguno de los dos partidos deberían ser «socios permanentes» (un 40% cree que sí); sí que es cierto que un 52% de los votantes socialistas sí considera que deberían mantenerse las alianzas con los independentistas durante el último año de legislatura.

Y eso, ¿por qué? Porque ni los votantes de PSOE ni de PP ven posibles pactos de Estado entre los dos principales partidos de España: tan solo los ven viable un 30% de los socialistas y un 28% de los populares entrevistados. Bien es cierto que, para el 45% del conjunto de los encuestados, los pactos de Estado mejorarían el clima político. En este sentido, cabe recordar que Feijóo ha planteado hasta cinco pactos (sobre economía, seguridad, defensa, una modificación de la Constitución para atender las necesidades de las personas con discapacidad y sobre energía), aunque ninguno ha fructificado.

Además, Feijóo también ha enviado un documento con una propuesta para renovar el Consejo General del Poder Judicial garantizando la independencia de los jueces: no obstante, una mayoría de encuestados (43%) cree que no habrá acuerdo.

En cualquier caso, Feijóo y Sánchez se verán cara a cara este martes en el Senado, donde debatirán sobre las medidas de ahorro energético. Y un 68% de los votantes socialistas ven con buenos ojos que el presidente del Gobierno acuda al debate; en el caso de los votantes del PP, algo más: un 88%.

En la carrera electoral, por ahora, solo hay dos aspirantes con posibilidades de victoria: Sánchez y Feijóo. La incógnita de esa carrera está en ver qué hace Yolanda Díaz: si acaba concurriendo o no y cómo. De momento, casi un 20% de los votantes de Podemos cree que Díaz no seguirá en el Gobierno. Casi tantos como los del PSOE (21%), aunque menos que los de PP (48%) y Vox (52%).