Oleada de llegadas en el Mediterráneo

El Mediterráneo se convirtió ayer en la principal ruta de inmigración ilegal.Almería y las Islas Baleares fueron los dos principales destinos de las pateras que usan las mafias para trasladar a personas hasta las costas europeas.

Los Equipos de Respuesta Inmediata ante Emergencias (ERIE) de la Cruz Roja prestaron asistencia humanitaria a 130 inmigrantes rescatados de pateras o llegados a la costa de Almería en las últimas veinticuatro horas. Fuentes de la ONG informaron a Efe que desde este lunes los ERIE han sido activados para atender a un total de once grupos de entre 3 y 27 personas en las instalaciones del Centro de Acogida Temporal de Extranjeros (CATE) del puerto de Almería. No se trata de un caso aislado, ni mucho menos. De hecho, la Fiscalía de Almería apuntaba en su memoria anual, hecha pública esta semana, que, «otro año más», son «numerosos» los procedimientos que se tramitan como «consecuencia de la llegada a las costas de la provincia de pateras cargadas de personas que pretenden entrar irregularmente en nuestro país» a través «de bandas organizadas que actúan con ánimo de lucro y que ponen sistemáticamente en peligro la vida de las personas pues lo hacen con embarcaciones precarias y sobrecargadas, sin útiles de salvamento y en muchas ocasiones en condiciones climatológicas muy adversas». Unas conclusiones similares a las que recoge la Fiscalía de Murcia que constata que en los últimos cuatro años se ha producido un crecimiento exponencial del número de inmigrantes que las mafias trasladan desde el norte de África –principalmente desde el litoral argelino– hasta las playas del Levante español y, a las de Murcia.

Por otro lado, un total de 333 migrantes fueron interceptados en la jornada de ayer en distintos puntos de Baleares en 20 pateras, según informó la Delegación del Gobierno en el archipiélago. Desde la mañana del viernes se ha registrado un goteo constante de embarcaciones. En total, en las últimas horas, más de 460 personas arribaron de manera irregular a través de la ruta mediterránea. Pese a que las Islas Canarias son el principal destino de la inmigración ilegal que llega a España, las rutas del Mediterráneo han cobrado especial protagonismo durante este verano y continúa este mes de septiembre. De hecho, hay una tendencia que está observando en los últimos meses que confirma la importancia de esta ruta por la que entraron 1.075 personas de manera irregular en el mes de agosto: están llegando más inmigrantes a la Península y Baleares que a las Islas Canarias, una novedad respecto a 2021.

Hasta el 31 de agosto, han entrado de manera irregular 19.007 personas, un 10,2 por ciento menos que en el mismo periodo de 2021. No obstante, los meses de septiembre y octubre se caracterizan por un aumento de las llegadas, por lo que esta tendencia podría revertirse.

Además de los rescates, en la jornada de ayer también se procedió a la detención de tres inmigrantes que viajaban en una moto acuática. En concreto, la Guardia Civil trasladó al puerto de Motril (Granada) a tres personas, entre ellos un menor. El uso de motos de agua para llegar a las costas españolas ha experimentado una fuerte subida este año, tal y como señalaron a LA RAZÓN agentes que luchan contra la inmigración irregular. No se trata de un fenómeno nuevo, ni mucho menos, pero sí despierta cierta preocupación entre las Fuerzas de Seguridad ante su despegue en los últimos meses porque son difíciles de frenar, porque ponen en peligro la seguridad de otras embarcaciones e incluso algunos bañistas y por la dificultad en este caso para pillar «in fraganti» a los delincuentes. Las mafias cobran 5.000 euros para embarcarse en este transporte frente a los 1.000 o 2.000 euros que se abonan por subirse a pateras o vehículos motorizados. Las condiciones meteorológicas influyen en la duración de la travesía. Así, por ejemplo, para cruzar desde Argelia a las Islas Baleares o Murcia, según los expertos, pueden tardar entre dos horas y media y tres, en función de la climatología. En el caso del Estrecho, la travesía es mucho más rápida, tan solo quince minutos, dependiendo también de la cilindrada de la moto. Por otro lado, la Guardia Civil localizó ayer el cuerpo sin vida de un joven de origen magrebí flotando en el mar cerca del puerto comercial de Melilla. Aunque se está investigando el suceso, todo apunta a que se trata de un intento fallido de alcanzar la costa, ya que Melilla lleva varias semanas sufriendo una mayor presión migratoria por mar, según han denunciado públicamente algunas asociaciones profesionales del instituto armado.