Conflicto

Denuncian el hartazgo de la juventud con los actuales dirigentes del Frente Polisario

Desde las propias filas saharauis, se critica, sin citarlo, a Ghali y demás jefes por su obsesión por el poder y la ostentación

Brahim Ghali, jefe del Frente Polisario EFE/EPA/FETHI BELAID / POOL
Brahim Ghali, jefe del Frente Polisario EFE/EPA/FETHI BELAID / POOLFETHI BELAID / POOLAgencia EFE

“Producto de una mezcla de indiferencia y hartazgo, la mayoría del pueblo saharaui, sobre todo la juventud, guardan una desconfianza total hacia el liderazgo debido a conductas irresponsables de parte de los líderes del Frente Polisario” .

La afirmación no viene desde lassectores que combaten al grupo saharaui, sino de sus propias filas. En un artículo de opinión publicado en Ecsaharaui, se habla, entre otras cosas, de “mala praxis, errores de cálculo, planes improvisados y el mal desempeño de algunos responsables oportunistas que no escatiman en usar una lucha existencial para acaparar todo lo posible sin controles y sin escrúpulos religiosos ni morales, y en consecuencia poniendo trabas y apostando por el fracaso”.

--“Con el paso de los años, esta conducta impropia en la máxima dirección del movimiento de liberación saharaui ha mermado considerablemente la unidad y es la culpable de la situación de desamparo y desesperanza reinantes, vaciando de contenido político e ideológico al grueso de la población: los jóvenes saharauis”.

--Se refiere a “comportamientos inmaduros y mentalidades estrechas practicadas por las autoridades, que provocaron recelos entre las nuevas generaciones jóvenes para participar en asuntos públicos debilitando su sentido de patriotismo, forzando así a que se preocupen de sí mismos empujándoles a buscar por todos los medios sus propios intereses y el modo de ganarse la vida, renunciando así al rearme ideológico juvenil que caracterizó al movimiento de liberación saharaui”.

--“No podemos esperar menos si tenemos a parte del liderazgo de la vieja guardia obsesionado con el poder, e incluso su disposición abierta a renunciar a todo por eso, y la indiferencia pasmosa por parte de algunos en cuanto a lograr o no metas ante el acomodo que ofrece el estancamiento del conflicto, exabruptos verbales de altos responsables que dan munición mediática al enemigo, difamaciones injustificadas y motivadas por un tribalismo recalcitrante, así como el surgimiento de conflictos de acusación y condena, especialmente el intento de algunos de desacreditar a los líderes históricos que lucharon y se sacrificaron al servicio de la causa nacional”.

--“Se teme que si la situación siga como se ha descrito anteriormente, lo que es un escenario bastante probable, el problema se expandirá y las diferencias se multiplicarán, creando el caldo de cultivo perfecto para la rebeldía y la desobediencia, que nos puede llevar a desviarnos del camino de la única lucha que solucionaría todos nuestros problemas, que es la lucha contra la ocupación marroquí, siendo la principal causa de nuestra indecible situación como pueblo”.

--“Todos los dirigentes deben estar de acuerdo en la necesidad del relevo de la juventud en esta sensible etapa de nuestra historia nacional, por su papel clave en la unidad del pueblo y en la construcción del estado”.

--“No capitalizar la gran formación de jóvenes saharauis de la diáspora en las más variadas ramas supone renunciar a la vanguardia juvenil, un error de dimensiones bíblicas, como lo es pasar por alto aquellos que se han beneficiado de distintas becas y programas de intercambio internacionales promovidos por el gobierno saharaui, contradiciendo incluso la propia esencia de dichos acuerdos educativos”.

--(Es necesario) “exigir ceses y destituciones de responsables en los diversos órganos del movimiento y del estado saharaui siguiendo criterios de eficacia y eficiencia”. “Responsabilizarse de los errores cometidos, rendir cuentas y disculparse debidamente ante un pueblo digno y sufrido”.

--“Gran parte del liderazgo saharaui debe considerar cesar antes de que sea demasiado tarde y se vuelva en su contra, allanando el camino a nuevos líderes adecuados y racionales, que velen por el interés nacional del pueblo saharaui”.

--”Cambiar la situación comienza con cambiar las mentes de aquellos que han sido afligidas por la enfermedad del engaño compulsivo, la grandeza y ostentación, el sentimiento de superioridad por razones jerárquicas o tribalistas, y cada uno de nosotros debe pensar y actuar como ciudadano de un país militarmente ocupado y no como espectador”.