Poder Judicial

Sánchez no rebajará el tono contra Feijóo pese a pactar el CGPJ

El Gobierno no va a «perder el marco» de confrontar modelos con el PP, aunque las negociaciones abiertas exijan prudencia

Pedro Sánchez, el jueves en el Congreso
Pedro Sánchez, el jueves en el CongresoJavier LizonAgencia EFE

El tono contra el PP que Pedro Sánchez exhibió el pasado jueves en la comparecencia que protagonizó en el Congreso de los Diputados no se corresponde con el clima de prudencia que rodea las negociaciones –en las que Gobierno y principal partido de la oposición se encuentran inmersos– para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). El hermetismo de las conversaciones es total y solo se ha visto perturbado por las declaraciones que tanto Alberto Núñez Feijóo como el jefe del Ejecutivo han hecho en los últimos días y que, por otro lado, permiten vislumbrar por dónde transitará un eventual acuerdo.

Mientras que los negociadores Félix Bolaños y Esteban González Pons apuestan por la discreción, al más alto nivel se permiten ciertas licencias, que resultan reveladoras. Por ello, sorprende la actitud que exhibe Sánchez. Si fuentes conocedoras del desarrollo de la entrevista con Feijóo el pasado lunes en Moncloa señalaban que el presidente se había mostrado más posibilista que su ministro de la Presidencia para lograr desbloquear el acuerdo; públicamente, el jefe del Ejecutivo se mantiene férreo y distante en sus posiciones.

La dureza de su ofensiva contra el PP no se ha modulado en el actual contexto de negociación y fuentes de su entorno, consultadas por LA RAZÓN, avanzan que tampoco lo hará en caso de que fructifique el entendimiento. En Moncloa quieren que la renovación del CGPJ se resuelva a la mayor brevedad posible, en «cuestión de días», y ubican como horizonte preferente antes del próximo martes, cuando Sánchez y Feijóo se medirán en su segundo cara a cara en el Senado.

«Lo suyo sería llegar con el pacto ya cerrado», señalan las citadas fuentes. En todo caso, en el Ejecutivo no están dispuestos a variar su hoja de ruta, pese al acercamiento escenificado con el principal partido de la oposición, en el que podría ser el único acuerdo antes de las elecciones. «No vamos a perder el marco», aseguran, en referencia a su estrategia de confrontar el modelo de gestión del Gobierno con el del PP. «No vamos a rebajar el tono», anticipan.

En Moncloa sostienen que el principal partido de la oposición «no tiene alternativa» al proyecto desplegado por el Ejecutivo e insistirán en ponerlo de manifiesto. En el Gobierno son conscientes de que, si Feijóo se aviene a pactar el Consejo General del Poder Judicial, una de las patas de su discurso, la relativa a cuestionar su perfil de moderación y de hombre de Estado, se tambaleará. Hasta ahora, los socialistas habían sostenido que la etapa del dirigente gallego suponía un continuismo respecto a la de su predecesor en Génova, Pablo Casado, con quien fue imposible el entendimiento. Si Feijóo enmienda ahora esa estrategia, obligará al Gobierno a hacer un esfuerzo de explicación.

En este contexto, en Moncloa también asumen que tendrán que dejar cierto margen de maniobra para que el PP pueda vender algún logro, de llegar a un acuerdo. Todo apunta a que se hará reforzando las mayorías dentro del órgano de gobierno de los jueces. Así, Feijóo advirtió ayer que su formación no «validará» perfiles políticos en el CGPJ y defendió mayorías de tres quintos para «despolitizar» los nombramientos y decisiones que realice este órgano, «profundizando» en una «mayor objetividad». Además, ha recalcado que hay que «profundizar en los requisitos de idoneidad» en los nombramientos. Por su parte, Bolaños confirmó que «se está trabajando sobre un documento por escrito».