Defensa anuncia la compra de 14 aviones de vigilancia y patrulla marítima y dos nuevos buques hidrográficos

La secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, no ha desvelado si España adquirirá los cazas de quinta generación estadounidenses F-35 para reemplazar a los ‘Harrier’ de la Armada y a los F-18 del Ejército del Aire, cuyas vidas útiles llegarán a su fin en los próximos años: “Elegiremos el mejor sustituto”, ha dicho.

Valcarce ha comparecido este jueves en la Comisión de Defensa del Congreso para dar cuenta de los presupuestos de su Departamento para 2023, que ascienden a 12.825 millones de euros, con un incremento “histórico” del 25,8 % y cuyo impacto el próximo año alcanzará el 1,2 % del PIB.

La secretaria de Estado ha lamentado el discurso “catastrofista” de la oposición y ha insistido en que el objetivo del presupuesto es la modernización de las Fuerzas Armadas, lo que -ha destacado- “en la historia de España la han realizado, por este orden, Azaña, González, Zapatero y el presidente Sánchez”.

Ante las reiteradas preguntas de la oposición, Valcarce ha explicado que el avión sustituto de los 'Harrier' y los F-18 no solo está en el planeamiento de la defensa sino entre los nuevos programas que recogen los presupuestos.

El reemplazo de los F-18 peninsulares representa 4.500 millones de euros y el de sustitución de los ‘Harrier’ y una segunda fase de la flota del F-18, 6.250 millones, ha precisado Valcárce, que ha dicho a los diputados que no “les quepa la menor duda de que las Fuerzas Armadas y el Gobierno elegirán el mejor sustituto”, pero les ha pedido que les dejen trabajar.

Valcarce ha insistido en que el presupuesto está dirigido a la modernización e innovación de las Fuerzas Armadas a través de la inversión en la industria de defensa, de tal forma que los créditos destinados a los programas especiales de modernización ascienden a 4.900 millones, lo que representa una subida del 72 %.

La secretaria de Estado ha trasladado garantías de que estos programas van a ser una realidad porque son “una apuesta decidida por la autonomía estratégica de España”. Entre ellos está el FCAS, el futuro avión de combate europeo, en el que trabaja nuestro país conjuntamente con Francia y Alemania.

En concreto, ha asegurado que las inversiones previstas crearán 22.667 empleos directos o indirectos en toda España en el año 2023, con un efecto “tractor” para la economía nacional y con especial incidencia en las pequeñas y medianas empresas.

Se acaban de adjudicar los primeros contratos a Indra, coordinador nacional del proyecto, por un importe total de 17 millones de euros y a Airbus España por un total de 14,7 millones.

“Es lo que necesita nuestra industria porque va a marcar un antes y un después en la historia económica de España”, ha recalcado.

Además, ha destacado los casi 1.300 millones que se dedican a los 13 nuevos programas que se ponen en marcha y que incluyen la adquisición de 10 aviones de vigilancia marítima (Vigma), dos buques hidrográficos, misiles Spike o un sistema aéreo remotamente tripulado (RPAS).

La renovación de los buques hidrográficos es una de las grandes prioridades de la Armada, como publicó Infodefensa.com, mientras que los aviones Vigma permitirán al Ejército del Aire y del Espacio recuperar capacidades de vigilancia marítima tras la retirada este mismo año de los P.3 Orion y la baja en los próximos años de los veteranos CN-235 Vigma, que entraron en servicio en España en 1988. También hizo mención a otros nuevos programas como la ya conocida compra de los cuatro aviones de patrulla marítima C295.