"Caso Begoña Gómez"
Las acusaciones populares ven "necesaria" la declaración de Sánchez por las "deficiencias de memoria" de Barrabés sobre las reuniones en Moncloa
En su petición por escrito al juez, consideran de "especial trascendencia" la testifical del presidente del Gobierno para esclarecer el "elemento nuclear" del posible tráfico de influencias
Las acusaciones popular del "caso Begoña Gómez" ven "necesaria" la declaración como testigo del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que acaba de acordar el juez Juan Carlos Peinado y que reclamaron por escrito el pasado viernes. En esa petición al juez Juan Carlos Peinado, cuatro de las cinco acusaciones populares -Vox, Manos Limpias, Hazte Oír y Iustitia Europea- aseguran justifican la citación de Sánchez en la presencia del jefe del Ejecutivo en dos de las reuniones del empresario Juan Carlos Barrabés con Begoña Gómez en el Palacio de la Moncloa -según este último dijo al instructor en su declaración como testigo (ahora deberá volver a comparecer el próximo día 29, pero ya como investigado)- y en "su doble condición de presidente de Gobierno de España y cónyuge de la investigada".
Por todo ello, hacían hincapié en que su testimonio tiene "especial trascendencia a la hora de determinar la configuración del elemento nuclear" del posible tráfico de influencias, delito que es objeto de la investigación judicial junto al de corrupción en los negocios.
En el escrito -presentado por los letrados de Vox, Marta Castro; Javier María Pérez-Roldán, de Hazte Oír, Luis María Pardo, de Iustitia Europa, y Carlos Perales, de Manos Limpias-, las acusaciones populares hacen hincapié en que la declaración de Pedro Sánchez como testigo resulta "del todo necesaria" teniendo en cuenta "la ausencia de precisión" por parte de Barrabés -el empresario clave en el máster de Begoña Gómez, quien a su vez le avaló en sendas adjudicaciones públicas que investiga la Fiscalía Europea- "respecto al contenido de dichas reuniones" y las "deficiencias en su memoria".
Las acusaciones recuerdan que Begoña Gómez se acogió a su derecho a no declarar y, por lo tanto, "no contestar a ninguna de las partes personadas en el proceso – ni al juez, fiscal, ni si quiera a su propia defensa-". "Esta opción, aunque legítima, hace que sean necesarias, sin duda alguna, la práctica de nuevas diligencias tendentes al esclarecimiento de los hechos objeto de la presente investigación", aseguran en ese escrito.
Al mismo tiempo, señalan que en su comparecencia como testigo del pasado día 15, el empresario Juan Carlos Barrabés explicó al juez "que había mantenido varios encuentros y reunión en el Palacio de la Moncloa y en la que habrían estado citados tanto la investigada" como Pedro Sánchez "junto a una cuarta persona".
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