Adela Martínez-Cachá: «Me he sentido condenada y sentenciada por la oposición»

El TSJ archivó el caso «Guardería» en el que fue llamada a declarar como investigada. Ahora, pide calma y respeto a los tiempos judiciales para el conocido como caso «Auditorio».

–¿Qué balance realiza de toda la situación judicial que ha vivido?

–Uno intenta continuar con el trabajo y que ocupe el menor tiempo posible para que todo siga con un ritmo igual o mayor. Pero al final lo que piensas es que todo el ruido, aparte de hacerte daño en el plano personal y de intentar distraer, no consigue nada. El ruido al final solo es eso, y esta Región necesita que siga la hoja de ruta marcada, los cambios y las reformas. Tenemos que ser conscientes de que estas situaciones perjudican a todo el mundo. Ahora, por cuestiones personales, hay a quien le interesa el ruido y no saber la verdad. Eso nos debería hacer pensar. A todos nos interesa saber la verdad y dejar que la Justicia hable, que siempre habla. No podemos dejarnos llevar por lo que otros quieren.

–¿Se ha sentido «condenada» por la oposición?

–Totalmente. Me sentí enjuiciada y con sentencia. Era un pack. Hay que poner orden y que lo que prime sea el interés de la Región. Mientras ellos hacen reuniones nosotros trabajamos. A la Región no le interesa que se arme lío, sino que se hable del déficit hídrico, del Pacto Nacional del Agua, del Corredor Mediterráneo, de la llegada del AVE, de que se resuelva el tema del Aeropuerto, de los temas en los que está presidente. Y el Gobierno está en esos temas.

-¿Cree que el juego de la oposición quedará en nada?

-Creo, además, que esto va a pasar factura a esos partidos que están jugando a hacer un tripartito cuando lo que tienen en común son las ganas de montar lío. ¿Qué tienen en común en materia de agua Ciudadanos con Podemos? Nada. Aparte de montar este «guirigai» creo que es un tripartito unido absolutamente con unos alfileres que les van a pinchar.

–¿Cuál es su opinión con respecto a la situación del presidente Pedro Antonio Sánchez?

–La situación del caso «Guardería» ha puesto sobre la mesa que hay que dejar hablar a la Justicia. Y ya está. Dejar que sus tiempos sean los que primen. Además, es muy llamativo que a 200 kilómetros está la ciudad de Granada con un alcalde investigado, y no hay este ruido. ¿Por qué con Pedro Antonio Sánchez sí y con el alcalde de Granada no? No lo termino de entender que en Andalucía valga una cosa y aquí otra.

–¿Habría dimitido con la apertura de juicio oral?

–Claro. Yo creo que hay que escuchar a los que tienen que hablar, que en este caso es el TSJ. Y en el caso del presidente exactamente igual. Ya ha dado todas las explicaciones y ha presentado todos los informes que ha estimado oportuna su defensa. Lo que queda claro es que los 6 millones de la subvención están en el Auditorio.

–El Congreso Regional del PP abordará la situación del Mar Menor. ¿Cómo avanza la recuperación?

–Debemos ser muy prudentes, porque es un tema de una complejidad enorme, pero ahora mismo las últimas analíticas nos hacen tener esperanza. No me atrevería ni siquiera a decir ser optimistas, pero sí tener una esperanza de que el Mar Menor tiene una capacidad de regeneración enorme. Todo irá siguiendo las pautas establecidas en un sistema lagunar que ha estado sometido a demasiadas presiones.

–¿Estará lista para la Semana Santa?

–Nosotros tenemos que tener la tranquilidad de que los gobiernos de la Región y de la Nación han puesto toda la carne en el asador para que esté lo mejor posible, pero también siendo consciente de que lo más importante es que no se le someta a ninguna presión más. Seamos prudentes y con calma. El Mar Menor es un enfermo, pero está en buenas manos y en los mejores especialistas en esa materia, como es el Comité Científico.

–¿Cual es el panorama actual de las zonas de cultivo afectadas por las lluvias y nevadas?

–Los agricultores son conscientes de que están en un lugar especial, en la zona del Mar Menor, y por lo tanto, las prácticas agrónomas deben ser cuidadosas. Estamos trabajando para que haya setos vegetales que puedan evitar, en la medidas de los posible, que las partículas de suelo acaben en la laguna salada.

–¿Murcia lidera la exportación de fruta de hueso en el ámbito internacional. ¿Qué perspectiva se tiene para este año?

–Muy buenas, porque además ahora mismo las previsiones de cosecha son fantásticas, ha habido horas de frío suficiente, ha llovido cuando ha tenido que llover y de la forma que ha tenido que hacerlo, y casi no me atrevo a decir lo buenas que son las expectativas para la cosecha.

–¿Qué países son los principales receptores? ¿Suscriben un convenio con garantías?

–Emiratos Árabes, por ejemplo está respondiendo muy bien ante nuestros productos. Somos un mercado seguro, que ofrece garantías, y eso es porque nuestros agricultores siempre han sido valientes, no sólo en abrir nuevos mercados sino que no se han quedado en variedades antiguas.

–¿Cree que los jóvenes continuarán con las labores agrícolas?

–Hay futuro en el campo y en la ganadería. En el sector primario de la Región, y los jóvenes lo están entendiendo. Somos la Comunidad Autónoma que más ayudas ha dado para la incorporación de jóvenes agricultores. Más de 400 jóvenes han presentado proyectos empresariales tanto en la agricultura como en la ganadería, que han demostrado que esos proyectos son viables, y el gobierno regional les está respaldando con esa ayuda económica de hasta 70.000 euros para cada uno de ellos.

–¿Qué soluciones abordarán para el déficit hídrico?

–El presidente de la Región lo tiene clarísimo, y es que esta legislatura tiene que ser la del Pacto Nacional del Agua para llegar a consensos en un ámbito nacional en el que ningún territorio imponga a otro. Si la fábrica de alimentos para toda Europa está aquí, el combustible que necesita para que funcione es el agua.

–¿Por qué es imprescindible el trasvase?

–Reivindicamos que necesitamos el agua para garantizar esos en torno a 100.000 puestos de trabajo. Hace pocos Europa necesitaba nuestras hortalizas, y nosotros garantizamos que las neveras de Alemania, Holanda, Bélgica, Francia tuvieran alimentos. Eso es lo que queremos, transformar el agua en puestos de trabajo, en crecimiento de nuestro país, y en alimentos. Nosotros no producimos tomates, sino alimentos.