Relación

Los aliados de Díaz dejan en vilo a Sumar: rechazan integrarse en el partido y piden métodos democráticos

Más Madrid e IU avisan que actuarán con "autonomía" en el proceso de reconstrucción de la izquierda y piden una mesa de la coalición en el que Sumar "sea uno más"

MADRID.-Mónica García agradece a Yolanda Díaz su "valentía": "Un paso al lado para dar un paso al frente"
MADRID.-Mónica García agradece a Yolanda Díaz su "valentía": "Un paso al lado para dar un paso al frente"Europa Press

La subsistencia de Sumar en el futuro como partido que aglutina a todas las fuerzas de izquierda está hoy por hoy en cuestión tras la "dimisión" de la vicepresidenta, Yolanda Díaz. Tras el varapalo en las urnas del pasado domingo, no hay, a día de hoy, ningún aliado de Sumar que garantice su integración, sino que tan solo prometen, fórmulas de cooperación.

Más Madrid e Izquierda Unida han aprovechado su salida para marcar los límites de la nueva relación política que debe trabajarse en la izquierda. Al reconoccimiento del coordinador federal de IU, Antonio Máillo, de que Sumar "está superado" y que debe ser un "partido más" dentro de las formaciones de izquierda, se une también Más Madrid, que avisa de que el resultado de las elecciones y el anuncio de Yolanda Díaz de dejar su cargo dentro de Sumar, “marca un antes y un después” en la relación de la izquierda alternativa. En ambos partidos, aliados en el Congreso de los Diputados, en el Gobierno, avisan que tras la salida de Díaz hay un punto de inflexión y que Sumar no es ya el partido hegemónico en la izquierda alternativa. Por tanto, reclaman una negociación de tú a tú, de ahora en adelante, y una relación de cooperación "con autonomía propia".

En una carta enviada a la militancia, analizando los resultados de las elecciones europeas, el partido madrileño tilda de “malos, sin matices”, los resultados obtenidos por Sumar en las elecciones europeas. Una lista a la que Más Madrid participaba como número cinco en la lista y que se quedó sin representación en Europa, al igual que IU, para quien Sumar otorgó el número cuatro de la lista. Más Madrid presume de haber contribuido en la campaña “desde la responsabilidad y la lealtad” y con la mejor “aportación posible”, en relación a su militancia. “A pesar de no haber sido tenidos en cuenta para participar con el peso que consideramos que nos corresponde en el diseño, orientación y desarrollo de la campaña, hemos trabajado con discreción y responsabilidad”, aseguran.

El partido pide que Sumar extraiga sus propias conclusiones de los resultados, tomen las decisiones que “consideren”, pero se desvinculan de la posibilidad de integrarse dentro de Sumar como partido. Son claros y avisan de que seguirán colaborando “estrechamente en el marco de la coalición que sostiene al Gobierno progresista”. El partido llama a la convocatoria de una Mesa de la coalición en la que el espacio se siente a debatir y definir el rumbo de su “cooperación y colaboración desde la autonomía y la horizontalidad”. Es decir, Más Madrid cierra la puerta también a una inclusión perse dentro de Sumar y pide protagonismo. Fuentes de IU, el partido que aporta la organicidad en Sumar, explican que ahora Sumar "ya no tiene legitimidad", también buscan una mesa de partidos en la que poder dirimir las discrepancias y lanzar una reflexión profunda del futuro de la izquierda. La reacción no ha gustado en Sumar, donde se ha afeado que los aliados usen los medios de comunicación, las ruedas de prensa o las redes para posicionarse en un momento de extrema debilidad tras la "dimisión" de su líder, y esperan en el futuro un debate "fraternal". Otros sectores de la izquierda piden "repensar" la idea de volver a unir la izquierda, puesto que piensan que "la unidad por si misma, solo, no funciona". El portavoz de IU en Sumar, Enrique Santiago, advirtió que era necesario "retomar el empuje" pero exigiendo "métodos democráticos" para que todas las formaciones "se sientan parte".

Quien continúa con la misma posición es Compromís. Que cuando surgió Sumar y los partidos comenzaron a fraguar su relación con los de Díaz, ya advirtieron que ellos tan solo aseguraban el apoyo a nivel nacional y, también finalmente en las europeas. Un discurso que no han cambiado. La portavoz de Compromís en el Congreso, Águeda Micó explicó ayer que no participará en ninguna reagrupación a nivel estatal de la izquierda. "Somos un proyecto político de estricta obediencia valenciana que hemos demostrado capacidad de colaborar y cooperar desde la horizontalidad, de igual a igual, con otros proyectos estatales pero manteniendo nuestra autonomía e independencia", recalcó. En la misma línea se mantiene Podemos, partido que rompió con Sumar el pasado 5 de diciembre en el Congreso. Su portavoz, Javier Sánchez Serna, ya vaticinó el resultado. "Hemos pasado página". En la formación morada trabajan ahora -sin ciclos electorales a la vista- para "ponerse en pie", al verse reforzados por los dos eurodiputados que consiguieron en las elecciones europeas.

Así, los principales partidos que apoyan a Sumar dan ya por amortizada la rentabilidad de Díaz y de Sumar como espacio aglutinador. Un extremo al que, sin embargo, no renuncia Sumar en ningún contexto. En el partido, de hecho, explican que Yolanda Díaz es el "mejor activo político y electoral" de Sumar. El partido enfría así la sucesión en Sumar, de la cual, sí había dejado claro la vicepresidenta segunda tan solo un día antes, cuando había asegurado que dejaba sus responsabilides orgánicas. Y es que fuentes del grupo parlamentario explican que no se abre ningún debate sucesorio en el partido, y que su liderazgo no está en cuestión, a pesar de que ella ahora vaya a centrarwsse en su faceta gubernamental y el grupo de coordinación de Sumar designe este jueves a otra persona para las labores más orgánicas. Fuentes del grupo parlamentario reconocen que "nada va a cambiar" a partir de ahora, y que la vicepresidenta continuará ejerciendo las mismas funciones en lo práctico.