El "antisistema" Alvise "come" terreno a Vox: irrumpe en el Parlamento europeo con tres escaños

El partido del activista Alvise Pérez, creado para estas elecciones europeas, ha entrado en el Europarlamento. En total, Se Acabó La Fiesta (SALF) ha logrado tres escaños y un 4,58% de voto, una irrupción que puede complicar el futuro a Vox ya que ambos espacios comparten electorado. De hecho, SALF irrumpe "comiendo" terreno a Vox ya que los de Santiago Abascal han acabado con seis escaños, cuando había encuestas que proyectaban hasta ocho. Luis Pérez Fernández son el nombre y apellidos de Alvise, quien nació en Sevilla hace 34 años: ha creado un partido nuevo tras pasar sin éxito por UPyD y Ciudadanos y coquetear con Vox.

El activista, que ha logrado una gran proyección pública gracias a las redes sociales en los últimos años, ha estado afiliado en UPyD y en Ciudadanos. Se autodefine como "analfabeto académico" ya que no ha sido capaz de acabar la carrera de Ciencias Políticas en la UNED. Tras su frustrado paso por UPyD y Ciudadanos, Alvise ha explotado las redes sociales con informaciones y opiniones muy polémicas para ganar visibilidad. De hecho, han sido tan polémicas algunas de sus noticias que muchas de ellas han sido construidas sobre datos falsos ya que han quedado desmentidas incluso en los tribunales (como cuando publicó una falsa PCR positiva de Salvador Illa).

El propio nombre de la agrupación es un buen reflejo del tono antipartidos que tiene, pero tampoco se sabe mucho más porque solo ha ido desgranando medidas sueltas, sin tener un programa electoral concreto. La página web está vacía de contenido y, simplemente, aparecen cinco reivindicaciones sobre logros que presuntamente se atribuyen: "Identificamos pedófiles y pederastas; identificamos asesinos y violadores; identificamos más de 60 casos de corrupción; iniciamos el caso Koldo; provocamos 12 dimisiones políticas".

El discurso antisistema de Alvise tiene medidas parecidas a Podemos y a Vox: en este sentido, se parece mucho a los inicios de Pablo Iglesias, con un discurso duro contra la "corrupción política" y de apuesta y defensa por la democracia directa, que sustituya a la democracia representativa; también guarda similitudes con los comienzos liberales de Vox ya que defiende una reducción de la estructura del Estado, disminuyendo la burocracia.

"Estamos cansados de la mafia política, mediática y judicial. Queremos un cambio real, donde una persona con los huevos bien puestos se enfrente directamente a todos los políticos corruptos, sin importar si son del PSOE, Vox o PP", es un de los mensajes que ha lanzado Alvise en las últimas horas, casi una tónica de toda la precampaña y campaña, poniendo énfasis tanto en el rechazo a partidos, medios y jueces como a PSOE, PP y Vox.

Entre sus medidas populistas, aparece la promesa de renunciar al 100% del sueldo de eurodiputado que va a cobrar porque, según asegura, no lo necesita para vivir. De hecho, en una entrevista en "Periodista Digital", ha llegado a reconocer que su aspiración de ser eurodiputado busca también lograr el "aforamiento" para lograr protección frente a las querellas que ha ido recibiendo del Gobierno por sus publicaciones en las redes sociales por "luchar contra los corruptos".