Angela Merkel muestra plena confianza en Rajoy

La canciller alemana, Angela Merkel, reiteró ayer en Berlín su confianza en el proceso de reformas estructurales emprendido por el Ejecutivo. «Estoy convencida de que el Gobierno español y Rajoy como su presidente sabrán resolver esta tarea y Alemania los apoyará con todas sus fuerzas», declaró la canciller.

La canciller alemana, Angela Merkel, reiteró ayer en Berlín su confianza en el proceso de reformas estructurales emprendido por el Ejecutivo. «Estoy convencida de que el Gobierno español y Rajoy como su presidente sabrán resolver esta tarea y Alemania los apoyará con todas sus fuerzas», declaró la canciller en la rueda de prensa conjunta que siguió a la XXIV Cumbre Hispano-Germana. Aunque el respaldo de Merkel siguió la línea habitual de sus intervenciones públicas, ayer fue especialmente significativo. Y lo fue por el tono empleado, más enfático, y por el momento en que se produjo. El jefe del Ejecutivo llegó a Berlín muy condicionado por las recientes acusaciones de corrupción contra su partido tras la publicación de los «papeles de Bárcenas» y la Prensa alemana lo recibió con el asunto en sus primeras páginas. Merkel no quiso valorar las acusaciones, pero el mensaje de apoyo implícito marcó sus respuestas. «Todo el Gobierno está trabajando en la reducción del desempleo para que España vuelva a tener la fortaleza que le corresponde», dijo la canciller.

La de ayer fue la primera rueda de prensa en la que Rajoy enfrentaba las preguntas de los periodistas tras su intervención del sábado ante el Comité Ejecutivo Nacional del Partido Popular. «Las cosas que se me imputan son falsas. Así lo he dicho y así lo reitero en el día de hoy», afirmó el líder popular en la sede de la Cancillería. La cita estuvo marcada por el asunto de la supuesta contabilidad irregular del PP y hasta las preguntas de los medios germanos giraron en torno a este asunto contra lo que viene siendo habitual. Preguntado por las declaraciones del jefe de la oposición, Alfredo Pérez Rubalcaba, sobre si se considera un «lastre» y piensa dimitir, Rajoy aseguró que se siente «con las mismas ganas, ilusión, coraje, fuerza y determinación» que cuando llegó al Gobierno. Se mostró confiado en que España va a salvar uno de los peores momentos «de los últimos treinta años» y reconoció, aun sin mencionar a Bárcenas, que las sospechas los han colocado en una posición «muy difícil, pero lo vamos a superar». La posible querella contra el ex tesorero del PP la están estudiando los abogados del partido, según Rajoy, para defender la «honorabilidad de las personas citadas». «Tengo que reiterar que todo lo que se refiere a mí y a los compañeros del partido no es cierto, salvo alguna cosa que es la que han publicado los medios de comunicación», continuó en una posible alusión a algunas anotaciones como el préstamo obtenido por el presidente del Senado, Pío García Escudero, admitido por él mismo.

El capote de Merkel, que expresó su «admiración y respeto» por el trabajo realizado por el Ejecutivo, se extendió tímidamente a las reiteradas peticiones españolas de que se pongan en marcha políticas de estímulo al crecimiento. La canciller adelantó que el Consejo Europeo que esta semana tratará de cerrar los presupuestos comunitarios para 2014-2020 podrían incluir incentivos al empleo. Angela Merkel dijo sentirse «entristecida» por el altísimo paro juvenil que en España supera el 50% y reafirmó su voluntad de que hará lo que esté en su mano para mejorar la situación a nivel bilateral, con la colaboración de empresas alemanas y programas de Formación Profesional, y a nivel europeo fomentando la movilidad.

La delegación estuvo integrada por los ministros de Exteriores, Energía, Empleo, Economía y los secretarios de Estado de Comercio y Educación, que mantuvieron reuniones sectoriales en las sedes ministeriales de sus homólogos antes del plenario. Merkel y Rajoy mantuvieron un primer encuentro a solas hasta que en el almuerzo se unieron los asesores. Después de la comida hubo otro momento de «intimidad» entre mandatarios que no estaba en el guión. Los dos presidentes se acercaron caminando hasta la escultura de Eduardo Chillida que preside el patio de la Cancillería y frente a la que un batallón de la Marina les había rendido honores militares.