Armengol quita la razón a Podemos y dice que el cambio de despachos se comunicó

La presidenta del Congreso, Francina Armengol, ha asegurado en respuesta a la petición de amparo de Podemos que la reubicación de sus despachos tras la ruptura con Sumar se les comunicó en tiempo y forma.

Desde las filas moradas, sin embargo, continúan insistiendo en la versión que deja caer la posibilidad de que los de Díaz hayan incurrido en un "posible delito" al haber entrado en sus antiguas dependencias y sacar algunas de sus pertenencias a la zona común de la Cámara baja.

En esta misma línea, defienden que no recibieron el escrito en que se les informaba de la modificación hasta después de que se produjese la entrada de personal ajeno a su partido. Asimismo, se escudan en que el escrito no refiere nada de que tuvieran que dejar las dependencias que estaban utilizando ni se alude a los nuevos que ocuparían.

No ocultan tampoco su disconformidad con que las estancias que se les asignan son, según dicen, salas multiusos y no despachos como de los que disfrutan el resto de los parlamentarios.

La semana pasada los de Belarra denunciaron ante la Presidencia del Congreso y ante la Policía el presunto acceso "irregular" a los despachos que venían utilizando sus ahora cuatro diputados.

El cambio de su ubicación como parte del Grupo Mixto a otros despachos que antes habían pertenecido justamente a Sumar fue acordada por la Mesa del Congreso.

Los despachos del Congreso no son personales, sino que la Cámara los asigna a los grupos parlamentarios en función de un acuerdo de distribución que se cierra al inicio de cada legislatura. Y cuando hay relevos o cambios de un grupo a otro, se da un tiempo para desalojarlos y efectuar la mudanza.