La Audiencia Nacional procesa a la turba de contrabandistas que apedrearon a dos agentes de Aduanas en Gibraltar

La Audiencia Nacional (AN) ha propuesto este martes juzgar por un delito de atentado con utilización de medio peligroso y dos de lesiones a la turba de siete supuestos contrabandistas de tabaco que lanzaron piedras a dos agentes de Aduanas el pasado dos de febrero.

Todo ocurrió la madrugada de aquel día en que se desplegó un operativo policial en la Playa de la Atunara de la Línea de la Concepción (Cádiz) que acabó con la detención de nueve personas acusadas de un delito de contrabando ilegal de tabaco.

En un momento en que una parte de la mercancía era aprehendida en tierra, otra embarcación con tres tripulantes, que también portaba una "considerable" cantidad de este producto, intentaba desembarcar y no lo logró por la acción policial.

Entonces, una patrullera y una embarcación auxiliar del Servicio de Vigilancia Aduanera, esta última con los dos agentes víctimas a bordo, iniciaron una persecución a los investigados que no hicieron ningún tipo de caso a los requerimientos de los agentes y pusieron para tratar de no ser interceptados, rumbo a Gibraltar. Trayecto durante el que arrojaron los fardos de tabaco al mar.

El juez titular del Juzgado de Instrucción número 1 de la AN, Francisco de Jorge, señala en el auto que estos tres presuntos contrabandistas de este producto a los que se perseguía huyeron hasta la playa de Levante, una zona que es de soberanía discutida entre España y el Reino Unido.

Desafortunadamente, relata el instructor, la embarcación auxiliar de Aduanas en la que les perseguían la pareja de agentes sufrió una avería , quedando inutilizado su motor, lo que acabó provocando que la corriente les llevase a la misma playa en la que estaban los presuntos delincuentes.

Precisamente, en ese momento, los querellados atacaron a los agentes "con ánimo de lesionarles, arrojándoles piedras de gran tamaño y pese a saber que el citado tabaco había sido intervenido y que se hallaba a bordo de una embarcación española, se subieron a la misma y se apropiaron de los fardos recuperados".

El auto indica que los dos agentes sufrieron distintas heridas y fracturas por lo que los hechos encajan en un delito de atentado con utilización de medio peligroso y dos delitos de lesiones.

El magistrado ha dado así traslado al Ministerio Fiscal y a las acusaciones personadas para que en el plazo de 10 días soliciten la apertura de juicio oral o el sobreseimiento de la causa.