Bolaños mantiene el tono crítico del Gobierno contra el Supremo por la Amnistía: "Todas las partes han recurrido, excepto Vox"

La polémica sobre la fuga de Carles Puigdemont sigue tomando vuelo. Ahora, por los pronunciamientos del Gobierno sobre el Tribunal Supremo, que es quien ha rechazado aplicarle la Amnistía por el delito de malversación y, por lo tanto, se mantiene la orden de detención para el líder de Junts. El ministro Óscar Puente acusó ayer al Alto Tribunal de "extralimitarse" en la aplicación de la Amnistía y este martes ha sido el turno del ministro de Justicia, Félix Bolaños, quien también se ha mostrado crítico con los magistrados, aunque de forma velada, para evitar entrar a un choque directo. "Esta discrepancia jurídica que mostró el Gobierno con la resolución es una discrepancia que comparten todas las partes que están personadas, excepto Vox", ha dicho Bolaños, en declaraciones a los medios desde Almería.

Con estas palabras, el ministro mantiene la presión sobre el Supremo y al acusar, de forma velada, a los jueces del Tribunal de ser afines al partido de Santiago Abascal. Bolaños ha señalado que "todas las partes" han recurrido la no aplicación de la Amnistía, aunque "todas las partes" se sintetizan en el Gobierno y los independentistas. Es decir, en el Gobierno a través de la Abogacía del Estado y de la Fiscalía y las defensas de Carles Puigdemont, Oriol Junqueras.... "Creo que la posición del Gobierno en relación con la resolución de la inaplicación de la Amnistía es conocida. Ya en su día mostramos nuestra discrepancia con argumentos jurídicos", ha resumido Bolaños, quien ha hecho énfasis en señalar cómo el Supremo se alinea con las tesis de Vox al asegurar que es la única "parte" personada que no ha recurrido la inaplicación de la Amnistía.

No obstante, ha asegurado que en un Estado de derecho hay margen para el recurso y ahora es el momento de esperar a que se pronuncie la Sala de Apelaciones del Tribunal Supremo. "Por tanto, ahora tenemos que estar a esperar que la Sala de Apelaciones del Supremo se pronuncie y acoja los argumentos jurídicos muy potentes para la aplicación de una ley que es clara", ha afirmado el ministro de Justicia, quien ha incidido en que el propósito y la letra de la Amnistía son "meridianos".

Pese a esta crítica velada al Tribunal Supremo, el ministro también ha querido dejar claro que Puigdemont sí tuvo que haber sido detenido porque existía una orden derivada de las resoluciones judiciales. "También quiero decir que, aunque discrepamos de la resolución judicial, si se deriva una orden de detención, sin ninguna duda esa orden de detención hay que aplicarla", ha añadido el ministro, quien ha responsabilizado de la fuga de Puigdemont a los Mossos d'Esquadra y ha exculpado al Ministerio del Interior de Fernando Grande-Marlaska.