Crisis migratoria en Europa

Juncker se compromete a ayudar a España con «recursos limitados»

Desbloqueará 55 millones de euros y enviará de visita al Comisario de Inmigración

El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker / Foto: Ap
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker / Foto: Aplarazon

Desbloqueará 55 millones de euros y enviará de visita al Comisario de Inmigración.

Bruselas está dispuesta a salir al auxilio de España ante la crisis migratoria, pero advierte de que los recursos son «limitados» ya que dependen de las aportaciones de los países europeos. Ayer el presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker y el jefe del Ejecutivo español, Pedro Sánchez mantuvieron una conversación telefónica después de un intercambio de cartas en el que España solicitaba ayuda de emergencia a Bruselas, ante el incremento de llegadas de migrantes por la ruta del Mediterráneo Occidental esta semana. En esa charla, Juncker manifestó, el «pleno apoyo» de las instituciones europeas ante la situación vivida por nuestro país debido al incremento de los flujos migratorios y encomendó al Comisario de Inmigración, Dimitris Avramopoulos, que viaje a España «en los próximos días» para conocer la evolución de los acontecimientos de primera mano.

En Moncloa se mostraron aliviados por la respuesta del presidente de la Comisión Europea. El propio Pedro Sánchez celebró el «compromiso» de Junker y le agradeció su disposición a «abordar de forma coordinada el desafío de la inmigración». «Estamos ante un reto que afecta a toda la UE y que solo podremos afrontar juntos, con una política común», señaló. Fuentes gubernamentales aseguraron que la «sintonía» entre Sánchez y Junker fue «total» y que la Unión Europea había «reiterado su apoyo y solidaridad con España en la gestión de los flujos migratorios», tanto los adquiridos con el Gobierno anterior, el de Mariano Rajoy, como los fijados en el Consejo Europeo del pasado 28 de junio. El presidente de la Comisión Europea también trasladó a Sánchez el «mantenimiento de su apoyo a Marruecos ante este reto como socio prioritario de la UE», Informa A. Martínez.

Juncker, por su parte, aseguró al Gobierno español –en su misiva– que comparte la «sensación de urgencia» y se compromete a desbloquear «con la máxima celeridad» los recursos del Fondo Fiduciario de Emergencia para África con un montante total de 55 millones de euros para la gestión de las fronteras en Marruecos y Túnez. Aunque los portavoces comunitarios no quisieron ayer detallar la cantidad exacta de este desembolso de urgencia ni cuándo se producirá, el ministro de Exteriores español, Josep Borrell aseguró que la mitad de estos 55 millones de euros se destinarán a «paliar las circunstancias que se están produciendo en Marruecos».

En la misma misiva enviada por Juncker, el presidente del ejecutivo comunitario reconoce ser «plenamente consciente de que las necesidades manifestadas por Marruecos exigen un esfuerzo financiero muy superior» ya que los recursos de este fondo para el norte de África son «desgraciadamente limitados». El 25 de julio, la máxima representante de la diplomacia europea, Federica Mogherini, la Comisión Europea y la presidencia austriaca pidieron a los países europeos que aumentaran sus contribuciones a este fondo. En la misma misiva, la Comisión Europea confía en que estas contribuciones proporcionen «financiación adicional para la gestión de las fronteras en Marruecos» tanto para este año como para el que viene ya que este programa seguirá siendo un «asunto de máxima prioridad». En esta carta también se recuerda que durante más de una década la UE ha aportado 100 millones de euros a Marruecos para luchar contra la inmigración ilegal. Una cantidad que sitúa al reino Alauita como el segundo país tras Libia en la recepción de estos fondos dentro de los países meridionales de la vecindad europea. A pesar de este esfuerzo por parte de la UE, este montante queda muy lejos de los 3.000 millones de euros ofrecidos a Turquía en el año 2016 a cambio de que Ankara interceptara a los demandantes de asilo procedentes de Siria, en su camino al continente europeo a través de las islas griegas. Tras la firma de este pacto con Turquía –en uno de los peores momentos de la crisis de refugiados que comenzó en el año 2015– el número de llegadas por esta ruta descendió de manera vertiginosa.

Borrell, en declaraciones a los periodistas, pidió ayer no restar importancia al «esfuerzo que está haciendo la Comisión, que reconoce que puede no ser suficiente para hacer frente al aumento de las llegadas». Durante la cumbre de los días 29 y 30 de junio en Bruselas –centrada en el desafío migratorio tras el caso «Aquarius»– el Gobierno español consiguió que el texto de conclusiones mencionase la necesidad de aumentar los recursos para la ruta del Mediterráneo Occidental aunque sin que se comprometiese ninguna cifra. Hace unas semanas nuestro país recibió 25 millones de euros de fondos comunitarios para mejorar la condiciones de acogida en Ceuta y Melilla y los retornos de los inmigrantes ilegales.