Gobierno de España

C’s da un toque de atención al PP por las primarias y las reformas institucionales

Avisa de que no puede decir «no a todo» y los populares aportarán hoy medidas alternativas

El equipo negociador de C’s: J. M. Villegas y Miguel Guitérrez, seguidos de Toni Roldán y Juan Carlos Girauta
El equipo negociador de C’s: J. M. Villegas y Miguel Guitérrez, seguidos de Toni Roldán y Juan Carlos Girautalarazon

Cuarto día de reunión entre los equipos negociadores de PP y de Ciudadanos en busca de un acuerdo de investidura que terminó encallada. La reunión vespertina giró en torno a regeneración democrática, las medidas contra la corrupción política y las reformas institucionales. En principio no se preveía que saliera ninguno de los partidos negociadores en rueda de prensa hasta que el portavoz de C’s, Juan Carlos Girauta, salió para manifestar su «preocupación» por las negociaciones y criticar la «falta de disposición» en materia de reformas institucionales por parte del PP. Su objetivo, dijo, era que los populares «no se confundan con C’s y piensen que pueden pasar otro día de negociación diciendo “no” a todo». Girauta indicó que no se había avanzado en nada sobre la despolitización de la Justicia, o la supresión del Senado y las diputaciones, donde no aceptaban «cambiar ni una coma». «Queremos llegar a un acuerdo de investidura, pero para eso la negociación tiene que ser una negociación, no sólo aparentarla». La comparecencia cogió al secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Luis Ayllón, en el despacho del Congreso trabajando en una propuesta alternativa que habían quedado en presentar en los puntos donde se habían encontrado los principales escollos. Frente a la «preocupación» de Girauta, Ayllón lanzó un «mensaje de tranquilidad» y consideró que no había motivo para la ruptura con C’s, pese al aviso lanzado por la formación naranja. Según explicó, «no hay ningún motivo para la ruptura» y el PP, siguiendo la metodología de la negociación que se pactó desde el principio, se toma su tiempo para preparar sus respuestas a las propuestas de C’s. A su juicio, eso lleva un tiempo porque no basta con poner propuestas en un papel, sino que hay que trabajar con «responsabilidad» y garantizar que son medidas realizables y que cuentan con recursos para llevarse a cabo y tienen su encaje jurídico y económico. «Estamos preparando un texto alternativo para ver si les parece razonable», dijo.

Otro de los asuntos en los que no hubo acuerdo fue en el de las primarias en el PP. C’s llevó a la mesa de negociación esta propuesta que considera «sería bueno que se aplicara por norma» para la regeneración política. Por su parte, el vicesecretario de organización del PP, Fernando M. Maillo destacó por la mañana que «en España ningún partido tiene primarias de verdad» y puso de ejemplo el caso del PSOE en Galicia y su imposición de candidatos. Ya por la tarde, el PP propuso a C’s promover reformas en la Ley de Partidos que garanticen una mayor participación de la militancia, controles internos, pero siempre respetando la autonomía de los partidos. Es decir, que no aceptan que Ciudadanos les imponga las primarias en su partido, un debate que por otra parte ya estaba abierto en el PP, pero la formación que lidera Rajoy reivindicó su derecho a decidir como partido.

En cuanto al Senado, el PP no está de acuerdo con la propuesta de C’s de suprimirlo y apuesta por convertirlo en una cámara de representación territorial. Sobre la eliminación de las diputaciones, Ayllón indicó ayer que éstas «prestan un servicio a la España rural» importantísimo y los populares no están dispuestos a que se queden «sin servicios importantes».

Donde sí hubo acercamiento fue en cuanto a impulsar un pacto por la lucha contra la corrupción. C’s ya anunció el miércoles, mediante un comunicado, que quería extender el acuerdo firmado entre los dos grupos parlamentarios en el Congreso a todos los partidos políticos a nivel nacional mediante la aceptación por parte de sus respectivas ejecutivas de un Pacto Nacional. El objetivo de este acuerdo será que los imputados por corrupción política tengan que abandonar sus cargos públicos en todas las instituciones municipales, autonómicas y provinciales. El PP aceptó ayer la propuesta de la formación naranja y el vicesecretario de organización del partido indicó que «existen discrepancias sobre cuándo comienza –a estar en vigor la aplicación del acuerdo– pero no sobre a quién afecta», ya que «el documento habla de cargos públicos en general», y aseguró que «queremos extenderlo a todos los cargos políticos». Además, recordó que el Gobierno del PP impulsó hasta 70 medidas que tuvieron que llevar a cabo «más solos que la una» porque el resto de partidos no les apoyó, ya que «estaban más pendientes de convertir la corrupción en un arma arrojadiza» contra el PP que de combatirla.

El caso de Óscar Clavell, diputado del PP procesado por prevaricación y malversación cuando era alcalde de Vall d’Uixó (Castellón), ha reabierto la polémica y los dos partidos aprovecharon su negociación para sentar criterio. Maillo indicó que su lucha contra la corrupción «es absolutamente clara», pero también hay que «distinguir lo que es corrupción de lo que no lo es». No podemos hacer tabla rasa ni podemos dejar que querellas políticas contribuyan simplemente a inhabilitar a cualquier político porque el partido contrario ha decidido acudir a la Justicia por criterios estrictamente políticos», señaló.

Por su parte, Villegas consideró que el caso de Clavell no es un episodio de corrupción política de los que estarían firmados en el pacto con el PP por lo que, de momento, no exige su acta en el contexto de la negociación de investidura. «No todos los casos de prevaricación son corrupción política», dijo, y explicó que «consideramos que lo es cuando va unido a enriquecimiento».

Óscar Clavell «dimitiría» si el PP se lo pide

Óscar Clavell, el diputado del PP por Castellón procesado por prevaricación y malversación, reconoció ayer que está dispuesto a dimitir si así se lo pide su partido y lo hará «sin dudarlo ni un instante». «Si el partido me lo solicitase, si yo soy en algún momento un problema para que España tenga un Gobierno, antepondré siempre los intereses generales de mi país a los míos», explicó en una entrevista en la Cope recogida por Ep.