CiU cierra filas y deja en manos de Mas las plebiscitarias

La ejecutiva de CiU ha cerrado hoy filas con la consulta alternativa del 9N, sin plantear “en absoluto” cambios en la actual configuración de la federación, mientras que ha dejado en manos del president Artur Mas las conversaciones para las plebiscitarias y la convocatoria de un posible adelanto electoral.

Con la presencia de Artur Mas y el líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, la cúpula de la federación ha mantenido hoy la reunión ordinaria de la ejecutiva después de que CDC explicitara su intención de pactar una candidatura unitaria independentista ante unas posibles elecciones plebiscitarias, un proyecto del que Unió se ha desmarcado.

Según ha explicado, tras la reunión, el secretario general de CiU, Ramon Espadaler (UDC), la ejecutiva se ha centrado “en la necesidad de que el 9N sea un día totalmente exitoso”, poniendo en valor el preacuerdo entre el Govern y la CUP para su despliegue, pero ha recordado que la convocatoria de las elecciones es una competencia que “sólo corresponde” al presidente de la Generalitat.

Espadaler ha añadido que, “llegado el momento, que no es el presente”, el presidente catalán va a “consultar y escuchar” la opinión de las fuerzas políticas soberanistas sobre la posibilidad de adelantar comicios en formato de plebiscito sobre la independencia, pero con la premisa de “que la última decisión corresponde solo al president Mas”.

El número 2 de la federación ha afirmado que los contactos con los partidos no se harán “de forma inmediata” sino cuando “lo crea oportuno” el president Mas, quien “mantiene, retiene y ejerce” la potestad de convocar elecciones, sin concretar si las conversaciones serán después del 9N.

Al ser preguntado por las diferencias entre CDC y UDC ante las plebiscitarias, Espadaler ha subrayado que los “planes de Convergencia y los de Unió son la conjura por al 9N” y ha descartado que se hayan centrado hoy las conversaciones en la consulta alternativa para aplazar el debate sobre los comicios a después de esa fecha: “Ni aplazamos ni dejamos de aplazar”, ha dicho.

Preguntado por una posible ruptura o replanteamiento de la federación, el secretario general de CiU ha aseverado que “no se ha planteado en absoluto” ningún cambio de “escenario”.

Espadaler ha asegurado que los dirigentes de CiU irán a votar el 9 de noviembre y que cada uno explicará si lo desea el sentido del voto.

CDC apuesta abiertamente por el doble ‘sí’ (que Cataluña sea un Estado y que sea independiente) mientras que UDC deja a libre criterio de la militancia la respuesta relativa a la independencia.

El también conseller de Interior ha dicho que CiU hace suyo el preacuerdo por el que el Govern asume algunas de las propuestas que ha hecho la CUP para desplegar el 9N, pero ha remarcado que la legalidad “siempre ha sido una de las líneas rojas de CiU” a la hora de abordar el proceso de participación ciudadana.

En todo caso, el secretario general de la federación ha dicho que lo que es “sustantivo” es “restablecer la unidad desde las diferencias, que es evidente que están”, a través de esta “unidad técnica” que debe posibilitar un 9N “de calidad”.